Estás aquí
Inicio > Política > Poder y Abusos > 23-01-1989: La Tablada y el “Movimiento Todos por la Patria”

23-01-1989: La Tablada y el “Movimiento Todos por la Patria”

26-01-1989: el día después. desde el Ámbito Financiero.

Informe de la SIDE.

Códigos.

Anticipos.

Ambito político.

Escuelas.

Ámbito gremial

Presos políticos.

Contactos internacionales.

Apreciación.

Comentarios periodísticos.

Semana de Mayo de 1995: Gorriarán, sin arrepentimiento.

28-10-1995: Gorriarán Merlo detenido en México.

Mayo de 2003: Gorriarán y su huelga de hambre.

Indultos.

Memoria insoslayable.

1989-1990: otro “escenario”.

22-08-2004: Gorriarán Merlo, en la lucha.

 

El 23 de enero de 1989 el Movimiento Todos por la Patria tomó el Regimiento Nº 3 de La Tablada y atribuyeron la organización al terrorista Enrique Gorriarán Merlo de 49 años, ex titular del ERP -Ejército Revolucionario del Pueblo.  Entre los combatientes fue detenido el sacerdote Antonio Puigjané, condenado a veinte años de presión que cumple en la cárcel de Caseros.

(El fiscal Pablo Quiroga declaró en 1996 que “las armas correspondían a épocas del ERP e incluía lanzacohetes y lanzagranadas muy modernos” y que “existe la certeza de que Gorriarán Merlo estuvo en la Argentina un mes antes del asalto al cuartel, plazo en el que ultimó los detalles del ataque”. [1]

Jorge Baños, Francisco Provenzano y Carlos Burgos reivindicaban las acciones guerrilleras del terrorífico grupo.  Baños, era uno de los abogados del Centro de Estudios Legales y Sociales, había asistido al homenaje al Obispo Mons. Enrique Angelelli presidido por el gobernador Menem en La Rioja en 1986 con motivo del décimo aniversario del asesinato.  [1]

A fines de 1987 se mencionó a Enrique Gorriarán Merlo (nacido en 1942) como el único sobreviviente de la dirigencia del ERP -grupo armado que en 1975 reunía a 3.000 militantes, la quinta parte con misiones militares-, liderado por Mario Roberto Santucho hasta que fue asesinado en su departamento situado en Florida (provincia de Buenos Aires).

En abril de 1972 habían secuestrado al presidente de la Fiat en la Argentina, Ing. Oberdan Salustro y cuando la policía detectó dónde lo tenían decidieron matarlo.  Intervinieron el 22 de agosto de ese año en la fuga de presos políticos y terroristas detenidos en el Penal de Rawson; en diciembre de 1973 en el secuestro de Víctor Samuelson, gerente general de ESSO en la Argentina, cobraron 14 millones de dólares de rescate y asaltaron el cuartel militar de Azul.  Gorriarán Merlo -quince años después- reconoció desde la televisión argentina su protagonismo en el asesinato del ex presidente nicaragüense Anastasio Somoza, en diciembre de 1980, cuando permanecía en Paraguay después de su derrocamiento por los sandinistas, quienes de acuerdo con manifestaciones de Gorriarán habían apoyado el Operativo Reptil que les demandó ocho meses de tareas de inteligencia y de práctica de tiro en Colombia.  Gorriarán describió su participación:  «Yo tenía un fusil M16 y tiré sobre Somoza todo el cargador, los treinta disparos».

26-01-1989: el día después. desde el Ámbito Financiero…

Desde las páginas de “Ámbito Financiero”, el 26 de enero de 1989 –el día después de ese caos que conmovió a la mayoría de los argentinos-, difundieron diversa información relacionada con el “Movimiento Todos por la Patria” que de acuerdo a los testimonios, era el responsable y ejecutor del atroz ataque al Regimiento 3 de Infantería Mecanizada de La Tablada, en la provincia de Buenos Aires, República Argentina.

Reprodujeron textos del informe elaborado en la SIDE -secretaría de inteligencia del Estado-, a cargo del Dr. Facundo Suárez y entregado en 1987 al entonces presidente de la Nación, doctor Raúl Ricardo Alfonsín.

Informe de la SIDE

“El MTP fue creado en mayo de 1986 y surgió en base a una idea del grupo conductor de la revista ‘Entre Todos’ y allegados. Originalmente su sede estaba en las dependencias de esa publicación (Pueyrredón 1080), pero a mediados de octubre de 1986 el MTP ya cuenta con local propio, alquilando un piso con varias dependencias en Lima 1109, y figurando como titular de la locación Hugo Guagiroli, un médico recientemente incorporado a su Mesa Nacional.  [2]

En la actualidad el MTP está conformado mayoritariamente por elementos que integraron las filas de la organización subversiva Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) y en menor medida por otros que se desempeñaron o colaboraron con la organización Montoneros.

Gran parte de esos elementos fueron liberados en 1984 mediante el sistema de ‘doble cómputo’ cuando se hallaban recluidos en distintas unidades penales, luego de haber sido juzgados por sus actividades guerrilleras, en tanto otros retornaron al país desde el exilio.  [3]

Un ejemplo de esa actual participación en el MTP, puede resumirse en las palabras de Rubén Dri -ex sacerdote ligado al Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo (MSTM) en la década pasada y, al igual que sus hermanos, a la organización Montoneros – en un reportaje que el semanario ‘El Periodista’ le efectuara hace varios meses.  [4]

En esa oportunidad y entre otros conceptos, Dri expresó, al referirse al MTP, que ‘algunos de nosotros participamos en las luchas populares de los últimos años desde diferentes organizaciones… fue una época violenta que terminó con la derrota, por demás costosa, de los sectores más combativos de la sociedad argentina’, subrayando además que ‘para Todos por la Patria comprender lo ocurrido en esos años es básico: esa etapa fue una derrota, por lo tanto se trata de no repetir aquellos errores’.  [5]

  Códigos

En varios casos, los integrantes del MTP continúan manejándose con términos y códigos, como así también utilizando sólo sus primeros nombres o apodos, en forma similar a la empleada años atrás por las organizaciones armadas. A la vez, el MTP ha distribuido su accionar en distintos puntos del país, contando para ello con los correspondientes responsables y zonas.

Está compuesto por una Mesa Nacional y por sectores con injerencia en otros ámbitos de la sociedad (estudiantil, gremial y religiosos), además de militantes (palabra con la cual se autodefinen sus integrantes) en cargos de apoyo, aparte de los representantes zonales.

Tal mesa nacional está integrada por:

Carlos Alberto Burgos (director de la revista ‘Entre Todos’),

Martha Francisca Fernández de Burgos (subdirectora de la publicación y abogada),

Francisco Javier Provenzano,

Manuel Justo Caggero,

Jorge Baños (abogado del CELS),

Julio Villar (ingeniero, con actual desempeño en el CONICET),

Antonio Puigjané (fraile capuchino),

Rubén Dri (ex sacerdote),

José María Serra (ex sacerdote),   [6]

Melitón Vázquez (dirigente sindical del Ingenio Ledesma, de Jujuy),

José Liñero (sindicalista)

y Hugo Guangiroli (médico psiquiatra) recientemente a la mesa nacional del MTP.

 

Otros miembros de importancia están a cargo de tareas complementarias, de apoyo, o bien como responsables de diferentes actividades del MTP, entre ellos Marcela Lareau, quien además de hacer las veces de secretaria y telefonista tiene a su cargo la agenda de Pablo Díaz (sobreviviente de la denominada ‘noche de los lápices’), que continuamente brinda conferencias a estudiantes y público en numerosos puntos del país, actividad que le representa viajar prácticamente sin descanso.

La esposa de Francisco Javier Provenzano, Claudia Lareau, hermana de la nombrada anteriormente, está encargada de las ‘relaciones’ del MTP con otras entidades vinculadas al mismo.

Fernando Dondero se ocupa a la vez de los contactos con el sector gremial y de parte de las finanzas del MTP.

Carlos Alberto García tiene a su cargo la ‘zona Capital’. Carlos José Samojedni las zonas ‘Norte’ y ‘Oeste’ del Gran Buenos Aires, y un individuo aún no identificado, de nombre Esteban, es responsable de la ‘zona Sur’ del conurbano bonaerense.

De los hasta ahora mencionados, cabe señalar que:

Francisco Javier Provenzano, Carlos José Samojedni y Fernándo Dondero, militaron como guerrilleros en el ERP, al igual que la casi totalidad de los representantes del MTP en el interior, en tanto Manuel Justo Caggero, el matrimonio Burgos, los ex sacerdotes Dri y Serra, Melitón Vázquez y Hugo Guagiroli, adhirieron o apoyaron a esa y otras organizaciones subversivas.

El MTP cuenta, en el ámbito estudiantil, con los estudiantes secundarios Pablo y Joaquín Ramos y con el universitario de nombre Fernando, quienes efectúan los enlaces con todos los adherentes de ese sector, al cual el MTP concede una gran importancia, como se detallará más adelante.

En el aspecto gremial, el MTP cuenta con la adhesión del Centro de Estudios y Formación Sindical (CEFS), ubicado en Paraná 662, piso 3º, entidad fundada en la década pasada por Alberto Piccinini, Raimundo Ongaro y Alfredo Bravo, entre otros.  [7]

Tienen principal actuación en el CEFS José Liñero (integrante a la vez de la mesa del MTP), Alberto Genoud (a) ‘El Amarillo’, Patricia Conti y el ya citado Fernando Dondero.

Otra entidad ligada al MTP es ‘Encuentro Cristiano’, sita en Bartolomé Mitre 1741, primer piso, dirigida por el ex sacerdote Rubén Dri (también integrante de la mesa nacional del MTP), a quien secundan Daniel Royano y Piera Paola Oría (posible concubina de Dri). Dicha entidad se halla enrolada en el desarrollo de la ‘teología de la liberación’ y en el establecimiento de una ‘iglesia popular’.

Tanto el CEFS como ‘Encuentro Cristiano’ desarrollan una gran actividad de difusión en cuanto a sus respectivos rubros y frecuentemente realizan ‘cursos’ de corta duración, en los que a menudo utilizan videocaseteras. Este sistema ha sido adoptado por el MTP, que en todas sus actividades (charlas, actos, festivales, etc.) proyecta videocasetes cuyo contenido varía según los destinatarios.

Por ejemplo, Pablo Díaz suele llevar para sus charlas grabaciones ‘piratas’ en video de la película ‘la noche de los lápices’; a grupos de obreros se les proyectan videos sobre la deuda externa latinoamericana editados en Cuba, que contienen el discurso de Fidel Castro, o bien uno sobre un congreso sindical que se desarrolló en La Habana; en barriadas y sectores marginales del Gran Buenos Aires son proyectados videos editados en Nicaragua, de los cuales el MTP posee apreciable cantidad, siendo algunos de sus títulos ‘Historia de un pueblo en armas’, ‘Insurrección cultural’, etc.

 Anticipos

Las actividades que encara el MTP son casi siempre anticipadas mediante afiches y/o volantes, los que son luego objeto de pegatinas o repartidos por la zona donde se llevará a cabo la actividad.

Para ello cuenta con imprentas amigas que componen el material necesario y a un costo menor que el estipulado en el mercado, habiéndose detectado las siguientes: una ubicada en Oyuela 438, Villa Domínico (Avellaneda), y otra perteneciente a Héctor López Torres, sita en Castro Barros 675, capital. También tiene vinculación con el MTP una imprenta ubicada en López y Planes 1062, Dpto.2 Lanús Este, cuyos titulares se domiciliarían en Sarmiento 1545, de la misma localidad, lugar ubicado en las inmediaciones del anterior. Dicha imprenta tendría relación con una revista titulada ‘Riachuelo al Sur’ que sería editada por los responsables de la zona Sur del MTP y destinada a los habitantes de ese sector de la ribera del Riachuelo.

Otra entidad ligada al MTP es la Fundación Kolping Argentina, cuyo nombre recuerda al sacerdote alemán Adolfo Kolping, fallecido en 1865. La misma, en la cual se desempeñan religiosos de ambos sexos, cuenta con dos locales, uno ubicado en Pinzón 341, capital y otro en Heredia 5832, Wilde. En este último funciona además un hogar denominado ‘La Paz’. Esta entidad también posee un completo equipo de imprenta en su local de Wilde (fotocomposición, fotomecánica, composer, impresión offset, etc.) si bien no sería ése el único cometido en su relación con el MTP, ya que además realizan reuniones conjuntas, desconociéndose aún la índole de las mismas.

Se estableció que hace aproximadamente un mes viajaron a Nicaragua, vía Brasil, tres monjas de la citada Fundación, haciéndoles gestiones por los pasajes un miembro de la zona Sur del MTP.

En cuanto a la revista ‘Entre Todos’, ésta ha pasado a constituirse en el órgano de expresión del MTP, y en tal sentido se le da toda la difusión posible, llegándose -tal el caso de ‘Encuentro Cristiano’ que almacena gran cantidad de ejemplares- a proveerlos a la mitad de su valor de tapa si son utilizados para la militancia y la tarea de difusión de sus ideas.

La revista cuenta con un depósito, presumiblemente para almacenamiento de ejemplares sobrantes, en Humahuaca 3333/35, capital, y además de ser codirigida por Carlos Alberto Burgos (a) Quito y su esposa, Martha F. Fernández, figuran en su staff otros elementos que en su momento estuvieron detenidos, como el encargado de distribución, Rodolfo Omar Rodríguez (a) Rody, ex guerrillero del ERP liberado en 1984 o Carlos Corbellini (a) ‘Fanfán’.

El MTP trabaja estrechamente con otras entidades, cuyos integrantes ya mantenían vínculos en la década pasada, tanto por razones profesionales como ideológicas, a saber:

El Instituto de Relaciones Internacionales (IRI) dirigido por los abogados Eduardo Luis Duhalde, Carlos González Gartland y Rodolfo Aurelio Mattarollo.  [8]

El Centro de Investigaciones y Estudios de la Realidad Argentina (CIERA), con oficinas en Talcahuano 638, planta baja ‘F’, capital, dirigido por el licenciado Néstor Momeño (ex asesor en 1973 del Frejuli), a quien secunda Manuel Justo Caggero (también integrante de la mesa nacional del MTP).

En ese último lugar funciona además la Fundación Manuel Ugarte, a cargo de Caggero.

El Movimiento Todos por la Patria está basando actualmente su accionar en los ámbitos político, estudiantil, juventud gremial, presos políticos, y a la vez estrechando vínculos y contactos en el orden internacional, según se detalla a continuación:

 Ámbito político

Los integrantes del MTP ponen de manifiesto su entusiasmo por las expectativas que el mismo está generando a pesar de su creación tan reciente. A la captación creciente de adherentes en sectores de la población, en especial en algunas provincias, está sumando la absorción de disidentes de otras fuerzas políticas. Está efectuando trabajo de captación que considera satisfactorios en Tucumán (zona del Valle), Salta, Jujuy y Córdoba, además de zonas de Gran Buenos Aires. Estos trabajos son centrados principalmente a nivel barrial, donde encuentran mayor receptividad.

Existen fluidos contactos entre algunos miembros del MTP y Julio Fernández, asesor del diputado intransigente Miguel Monserrat. Inclusive, Fernández habría participado en una reunión de la comisión política del MTP realizada el pasado 11 de diciembre de 1986. Existen por otra parte, muy buenas relaciones entre el MTP y el PC.

Estos vínculos habían comenzado a establecerse hace algunos meses, al iniciar de común acuerdo un intercambio de reuniones integrantes de la mesa nacional del MTP y el entonces director del semanario del PC ‘Qué Pasa’, Patricio Etchegaray, a quienes secundaban otros miembros de ese partido, como Roberto Vallarino y Eduardo Duschatzky.

Al XVI congreso del PC en Parque Norte fueron invitados miembros de la mesa del MTP, y concurrieron Carlos Alberto Burgos y Francisco Javier Provenzano.

También hay contactos entre el MTP y algunos dirigentes de la Juventud Radical (JR) principalmente Hernán Lombardi y Pablo Batalla. Este último incluso ha escrito artículos para la revista ‘Entre Todos’.

El MTP concede gran importancia a las tareas de captación. Para ello basa principalmente su actividad en el poder de convocatoria de Pablo Díaz, presentado como único sobreviviente de lo que dio en llamarse ‘la noche de los lápices’, aprovechando la promoción alcanzada por el libro y la película del mismo nombre. Díaz viaja constantemente por todo el país y a cada regreso brinda un informe sobre la cantidad de nuevos adherentes logrados para el MTP.

 Escuelas

Recientemente se detectó una actividad destinada a sectores docentes, iniciada por el representante del MTP en Rosario, Gerardo Mugica (a) Oso, ex integrante de la agrupación universitaria Franja Morada. El mismo interés que a los estudiantes es otorgado por el MTP a la juventud en general; y un ejemplo lo constituye la actividad desarrollada en las postrimerías del año 1986.

En un lugar destinado a retiros espirituales, encuentros, etc. denominado Cura Brochero y ubicado a unas ocho cuadras de la estación Bosques, cercana a La Plata, se realizó entre el 19 y el 21 de diciembre de 1986 un encuentro juvenil, a la manera de campamento o jornada de convivencia. Al lugar, que cuenta con comedor y capacidad para 200 camas, concurrieron alrededor de 150 jóvenes provenientes de Capital Federal, Gran Buenos Aires y el interior, quienes fueron tomados por los responsables del MTP según su especialidad para las charlas a impartir, conformando grupos a tal efecto (ámbito secundario, universitario, gremial, barrial, etc.) Fueron proyectados videos de variado contenido, entre ellos algunos sobre la actualidad en Nicaragua y otros sobre el Che Guevara.

 Ámbito gremial

En este ámbito el MTP cuenta con varios contactos y adherentes ubicados en distintos gremios o lugares de trabajo. Uno de ellos es Alberto Piccinini dirigente de la UOM de Villa Constitución y uno de los fundadores del Centro de Estudios y Formación Sindical (ya mencionado). Entre otros contactos de importancia pueden citarse a Germán Abdala (ATE), Fernando Montero (FOETRA), Marisa Vilo (Caja Nacional de Ahorro y Seguro) y un integrante del Sindicato de la Sanidad, de nombre César, quien se desempeña en el Hospital Pedro de Elizalde (ex Casa Cuna).  [9]

Por su parte Melitón Vázquez (de la mesa nacional del MTP), desarrolla una gran actividad como dirigente sindical en el Ingenio Ledesma de Jujuy. Fue importante su actuación en la marcha de protesta que realizaron entre el 29 de agosto y el 2 de setiembre de 1986 los obreros de esa empresa, a la que se sumaron además del MTP que viajaron para brindar su apoyo y a la vez efectuar una tarea de captación entre los manifestantes.

Los detalles de esta protesta fueron grabados en videocasete y al mismo tiempo se difundieron en noticieros y programas periodísticos de las radioemisoras Belgrano y Excelsior. También el MTP logró la adhesión de un grupo de empleados del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) que se desempeñan en el local de la Av. de los Constituyentes y Av. Gral. Paz; Eduardo Cabrera, José Luis González, Mirta Nadales, Marcelo Chico y Daniel Irrazábal, quienes se pusieron a disposición para difundir al MTP en ese ámbito e incluso ocasionalmente proyectaron videocasetes provistos por el Movimiento.

El MTP suele efectuar las que denomina reuniones sindicales en su sede, o bien en el CEFS, y además dictar cursos de formación en el sindicalismo para elementos jóvenes, tarea que está a cargo, según el local dónde se realice, de Carlos Alberto Burgos y Martha F. Fernández, o bien de integrantes del CEFS.

 Presos políticos

Al igual que los organismos defensores de los derechos humanos y las fuerzas políticas de izquierda, el MTP define como presos políticos a los 12 elementos que aún permanecen detenidos y que por la mayor gravedad de sus causas no pudieron obtener aún el mismo beneficio de los ex guerrilleros liberados en 1984 mediante el sistema de doble cómputo aplicado a sus condenas.

Si bien el MTP concede gran atención a la situación de los presos políticos, su actuación en este sentido se ha incrementado notablemente, en especial a partir de dos factores: el no tratamiento de una ley en el Congreso que contemplaría la libertad de los últimos detenidos, cuyo estudio por el parlamento se esperaba para los últimos meses de 1986, y la sanción de la ley que dio en llamarse de punto final.

A ello se suma el hecho de que algunos de los aún detenidos son compañeros de lucha de buena parte de los integrantes del MTP, quienes como ya se adelantara pertenecieron al ERP. Los detenidos que mantienen contacto con el MTP son:

José Martín Cuesta (a) Pino, alojado en la U-2 (Devoto),

su esposa Hilda Nava de Cuesta (a) Lili, alojada en la cárcel de Ezeiza,

y Juan Tejerina.

El primero es quien se contacta más asiduamente con la sede del MTP, no sólo a través de las visitas que recibe, sino también telefónicamente, ya que les es permitido hacer llamadas al exterior desde su unidad de reclusión, en tanto su esposa, lo hace por intermedio de su abogado, Jorge Baños (también de la mesa nacional del MTP y otros visitantes).

Por otra parte la figura de Hilda Nava de Cuesta viene siendo muy promocionada en los distintos actos y marchas que se realizan en oposición al punto final, y además a través de un libro de reciente edición titulado ‘Lili, presa política’ cuyos autores son Ulises Gorini y Oscar Castelnovo, ambos miembros del PC y del semanario ‘Qué Pasa’, quienes basaron el contenido del libro con reportajes a la citada detenida; Jorge Baños coordinó la publicación y presentación del mismo.

El MTP ha conformado un grupo, cuyas reuniones y actividades son coordinados por Marcela Lareau y tiene la finalidad de organizar marchas y actos de protesta a favor de los presos políticos, además de contactar a otras entidades con el mismo fin, integrado por:

Jorge Baños,

Marcela Lareau,

Hugo Soriani (a) Biafra,

Carlos Viñas, Carlos González (a) Ghandi,

Graciela Morales y otros

 Contactos internacionales

En este ámbito, los contactos del MTP se dan fundamentalmente con Nicaragua.

En primer lugar, son frecuentes las visitas de Manuel Justo Gaggero al embajador nicaragüense. Asimismo, Gaggero tiene estrecha relación con miembros de la cúpula sandinista, algunos de los cuales visitaron recientemente Buenos Aires, como Carlos Nuñez y Bayardo Arce, vínculos iniciados probablemente cuando Gaggero residió en Managua antes del retorno desde su exilio al país en 1984.

Se ha comprobado también que insistentemente Francisco Javier Provenzano se ha puesto en contacto con Carlos Ochoa, funcionario de la Secretaría del Interior con quien mantiene un trato amistoso requiriéndole una entrevista con el doctor Facundo Suárez Lastra, alegando que ya consiguió las cosas que éste último le había pedido y que al mismo tiempo espera respuestas de su parte.

Asimismo, hubo contactos del MTP con Jorge David, asesor del diputado de la UCR por Santa Fe Luis ‘Changui’ Cáceres. Dichos contactos fueron sugeridos por Jorge Baños a fin de encarar también por ese lado el tema de los presos políticos habiendo considerado que David y Cáceres están muy receptivos a ese problema.  [10]

 Apreciación

De lo expuesto puede afirmarse que el Movimiento Todos por la Patria -como estructura política- se ha fortalecido durante 1986 en lo que hace a su nivel organizativo, ampliando su radio de acción.

Su intento de alianzas políticas explica que ex integrantes de la citada organización armada aparezcan hoy en una nueva estructura partidaria como es el MTP. Sin embargo, esta diferencia aparece como táctica, en tanto la misma no se manifiesta en el terreno ideológico.

En lo que hace a lo metodológico, aparentemente coinciden en las formas de captación y de organización, en tanto conservan una estructura celular y un sistema de códigos que permiten su comparación con los que utilizaban las organizaciones armadas.

Respecto a la actividad de captación, cabe tener en cuenta la importancia dada a la conservación de la ‘memoria histórica’ – partir de la cual reivindica lo actuado por la guerrilla-, mereciendo subrayarse que esta tarea está siendo llevada a cabo en sectores juveniles de nivel secundario, porque por razones evolutivas pueden ser permeables a propuestas de hechos combativos.

Dados ciertos indicios -las tareas de captación que realiza y los niveles a quien van dirigidas, el material utilizado, los apoyos externos y la predisposición manifiesta de la mayor parte de sus adherentes- no se descartaría una inclinación el MTP a participar más activamente, durante el año en curso, en luchas mas frontales por ‘reivindicaciones’ (sociales, laborales, libertad a presos políticos, etc.) para lo que cuenta con una importante inserción de adherentes en medios estudiantiles, gremiales, lugares de trabajo clave, etc.

Por las mismas causas apuntadas y sumando a ello el grado de reserva y encubrimiento con que sus miembros suelen desenvolverse y/o encarar algunas de sus actividades o reuniones, tampoco sería descartable que, si sus intereses así lo impusieran, el MTP considere un eventual retorno a la lucha armada, habiendo asumido ya errores y experiencias anteriores.”

(Hasta aquí, lo anotado a mediados de la década del ’90, aún con-movida por aquella jornada de horror y por esa información que revelaba una vez más las sutiles redes de la telaraña del terrorismo

Se produjeron después dos atroces atentados: el 17 de marzo de 1992 contra la sede de la Embajada de Israel.

Durante el lustro siguiente, escribí:

“…se derrumbó la sede de la Embajada de Israel. Tras la fuerte explosión los caminantes de la zona observaron la tragedia: una nube de polvo; lamentos, heridos y veintiséis muertos.

En abril de 1996 el expediente reunía aproximadamente ocho mil fojas y la Corte Suprema de Justicia de la Nación insistió en la necesidad de evaluar nuevamente algunas pruebas:

Se habían desarrollado varias hipótesis, entre ellas la teoría de la implosión, sin descartar la de doble explosión como resultado de la colocación de un cochebomba frente al edificio y algún otro explosivo cerca de su interior, teniendo en cuenta que estaban reparando la construcción y esos movimientos podrían haber facilitado la acción terrorista.

El 18 de julio de 1994, lograron concretar el atentado en la sede de la AMIA: murieron 86 personas… y si aún perduran las imágenes en la memoria de quienes observamos por televisión, no es necesario un esfuerzo de imaginación para interpretar lo que significó esa tragedia en quienes estuvieron colaborando para sacar a sobrevivientes o cadáveres… incluso familiares y amigos.

Sabido es que no hay palabras para aludir a las ausencias definitivas…)

Comentarios periodísticos…

En diversas circunstancias, Alejandro Carlos Biondini habló acerca de aquella trágica jornada en el Regimiento 3 de Infantería de la Tablada y debió declarar ante la Justicia.  Presentó una declaración testimonial que está disponible para los lectores que se acercan a la biblioteca virtual, que en realidad, es una “biblioteca real”… donde la hemeroteca acumula documentos mediante procesos de informática y las páginas de los libros reflejan los últimos adelantos tecnológicos.

Una pausa en ese camino, permite saber que Biondini habría aportado sucesivos datos acerca de las personas vinculadas con el “Movimiento Todos por la Patria”: el militante de la Unión Cívica Radical Federico Storani (relacionados desde 1972); el Premio Nobel por la Paz Adolfo Pérez Esquivel, quien suele expresar sus puntos de vista desde el “Servicio de Paz y Justicia”; Néstor Vicente (del Frente Amplio de Liberación, fuerzas para la liberación); el radical Javier Provenzano (“radical, afiliado desde el 6-6-84) y su compañera Mónica Lareu (Partido Demócrata Cristiano, desde el 7-7-1983).

Refiriéndose al acto realizado el 22 de agosto de 1973, al conmemorarse el primer año de la trágica jornada de Trelew, habría reiterado que habló Gorriarán Merlo frente al Congreso Nacional y que en ese acto también estuvieron Federico Storani y Leopoldo Moreau, con otros militantes de la Coordinadora Radical (y con tantas personas como las que siguen interesándose por la historia de los argentinos, desde la multiplicidad de opiniones y el propósito de encontrar puntos de coincidencia para avanzar hacia la justicia como medio fundamental para la paz..

Reiteró Biondini que Gorriarán Merlo publicó en 1985 el libro “Gorriarán: Democracia y liberación” y que en 1988, Julio Santucho -hermano de Mario, quien fuera jefe del ERP-, había publicado “Los últimos Guevaristas – Surgimiento y eclipse del ERP”.

El dirigente radical y legislador César Chacho Jarovslasky -de Victoria, Entre Ríos-, en diversas oportunidades desmintió las declaraciones que vinculaban al radicalismo con ese movimiento de todos por la patria.

Expresó también siguiendo el texto de la declaración  difundida por internet, que con el propósito de lograr el indulto de Gorriarán Merlo, habrían intervenido algunos familiares y el dirigente radical Federico Storani.

En los diarios de sesiones del Congreso Nacional, están registradas las manifestaciones de los legisladores que propusieron interpelaciones a los ministros Federico Storani y Dante Caputo, el estudioso que pasó por la Universidad de la Sorbona y en ese tiempo se vinculó con Regis Debray -amigo de Ernesto Guevara de la Serna, “el Che”-, quien estuvo preso en Bolivia…

También están reproducidas las manifestaciones del vehemente César Jarovslasky oponiéndose a ese propósito, porque desde su punto de vista no había una causa que lo justificara.

Semana de Mayo de 1995: Gorriarán, sin arrepentimiento…

El 17 de mayo de 1995 Gorriarán Merlo reivindicó por televisión, sin arrepentirse, todo lo sucedido en La Tablada.

Expresó que: “…los carapintadas preparaban una sublevación y los propósitos eran la renuncia de Alfonsín, para lograr la libertad de los comandantes, ganar el control del Ejército y ubicarse como principal factor de poder”.

Dijo también Gorriarán Merlo refiriéndose a los hechos de La Tablada, que como ellos sabían “que no se iba a poder cumplir con ese objetivo” lo único que hicieron “fue parar la sublevación, en el marco de un fracaso general del plan y a un costo tremendamente grande”.

Tras aquellos cruentos enfrentamientos durante 31 horas, los terroristas denunciaron que habían sido fusilados algunos de sus combatientes y que dos, habían desaparecido..

28-10-1995: Gorriarán Merlo detenido en México…

El sábado 28 de octubre de 1995 Gorriarán Merlo -de 53 años-, fue detenido en la ciudad de México por violación a las leyes de migración -carecía de documento- e inmediatamente el presidente Ernesto Zedillo dispuso su expulsión.

Desde el 9 de julio de 1989, el doctor Carlos Saúl Menem era el presidente de la Nación Argentina. En un operativo conjunto de autoridades mexicanas y con controles del Servicio de Inteligencia del Estado cargo del Brigadier Andrés Antonietti, fue trasladado en un avión privado que aterrizó a las 22:40 en el aeropuerto de El Palomar.

A partir de ese momento hubo custodia de personal de la Policía Federal que conducía el comisario Adrián Pelacchi y vigilancia de Gendarmería Nacional.

Después de un examen médico, quedó alojado -incomunicado- en Campo de Mayo estando previsto que la jueza de Morón Raquel Morritz Dooglatz lo indagara el martes 31, presumiéndose que cuando concluyera el juicio se dictaminaría la prisión perpetua por los delitos de “asociación ilícita calificada, homicidios múltiples y lesiones agravadas” cometidos durante el copamiento a La Tablada.

El equipo de abogados defensores de Gorriarán Merlo gestionó ante la Corte Suprema de Justicia que se dispusiera el retorno a México y en apenas unas horas la Corte decidió rechazar los argumentos de la defensa. .  Otra alternativa era que lo trasladaran a la Cárcel de Caseros para que estuviera cerca de los terroristas detenidos en La Tablada, entre ellos el sacerdote Antonio Puigjané.

Mayo de 2003: Gorriarán y su huelga de hambre…

Al comenzar la segunda quince de mayo, mientras en la ciudad de Santa Fe la tercera parte de la población estaba soportando desde el 29 de abril de 2003 el avance del río Salado sobre el sector oeste buscando su curso y arrasando viviendas, provocando muertes y desolación en las familias de menores recursos, desde la capital federal también se movilizaron para colaborar en esa emergencia.  Viajaron ministros, la diputada María del Carmen Alarcón una vez más estuvo cooperando con los grupos que recibían las donaciones y en otro ámbito, eran otras las expectativas.

En la cárcel de Caseros Enrique Gorriarán Merlo -de 62 años-, anunció que empezaba su huelga de hambre.  Distintos medios aludieron a esa circunstancia.

Indultos

Evidentemente, en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos aceleraron el trámite del Expte. 134.208/02…

(Leo el nombre asignado a ese ministerio y desde mi punto de vista hay una redundancia, porque si hay justicia lógicamente están implícitos los derechos humanos, incluso los de los animales reconocidos como irracionales, porque hay una ley que los protege desde la época del maestro sanjuanino Faustino Valentín Quiroga Sarmiento, más conocido como Domingo Faustino Sarmiento.

También es un acto de justicia preservar el equilibrio ecológico

Por algo, mientras tantas personas insisten en que son peronistas y hablan de la justicia social, aún sintiendo latente la prédica del coronel que habló tanto de JUSTICIAlismo…; vislumbro la diferencia en la valoración del “concepto” que es precisamente -como decía también el general– el punto de concordancia inicial y fundamental para que haya coherencia en la acción…)

El ministro de Justicia, Juan José Álvarez coincidía con el presidente provisorio doctor Eduardo Duhalde, acerca de la necesidad de promover “la unidad nacional” y transcurría la última semana de gestión, porque el 25 de mayo asumiría el doctor Néstor Carlos Kirchner.

El 22 de mayo se conmemoraba el 194º aniversario del movimiento de 1810 que ha sido reconocido como el Cabildo Abierto, el momento en que los vecinos se reunieron en la plaza principal para opinar acerca de la libertad… aunque sin animarse a expresar opiniones contrarias a Fernando VII que estaba casi aniquilado su poder.

Entre los documentos a la firma del doctor Eduardo Duhalde, estaba el referido a las personas que cumplían condenas de acuerdo a la Causa 19.208, del Juzgado de 1ª Instancia de Azul.  Era el Decreto Nº 1230 /2003 que otorgaba el beneficio del indulto a Enrique Haroldo Gorriarán Merlo y a otras personas, que habían sido juzgadas por los hechos y las consecuencias del ataque al Regimiento de La Tablada, el 23 de enero de 1989. Lo firmaron el presidente provisorio Duhalde y el ministro Juan José Álvarez; como corresponde fue publicado en el Boletín Oficial.

En el tercer considerando, los firmantes habían ordenado escribir que concretaban ese acto administrativo teniendo “en cuenta razones humanitarias y el respeto por la dignidad de las personas”; conforme a lo establecido en el “Art. 99 inc. 5 de la Constitución Nacional.”

En el citado decreto 1230/2003, también fueron incluidos los nombres de cinco personas que estaban cumpliendo las respectivas condenas:

      1. Acosta, Claudia Beatriz.
      2. Aguirre, Miguel Ángel
      3. Felicetti, Roberto
      4. Fernández, Isabel Margarita
      5. Mesutti, Gustavo Alberto
      6. Moreyra, José
      7. Motto, Carlos Ernesto
      8. Paz, Sergio Manual
      9. Ramos, Luis Darío
      10. Ramos, Sebastián Joaquín
      11. Rodríguez, Claudio Néstor
      12. Veiga, Claudio Omar
      13. Puigjané, Juan Antonio
      14. Sívori, Ana María
      15. Molina, Dora Ester

(¡Misión cumplida!… habrán sentido Duhalde y Álvarez, porque en sus declaraciones posteriores, demostraban estar convencidos de haber hecho lo que debían hacer… aunque desde diferentes sectores sociales opinaran lo contrario.)

El santacruceño Néstor Carlos Kirchner dijo ante los periodistas que no compartía ese criterio y rememoró que también se había opuesto a los indultos otorgados por el doctor Carlos Saúl Menem.

Memoria insoslayable…

En una breve entrevista con periodistas en Rosario, el 30 de septiembre de 1989 el presidente Menem antes de iniciar el acto de homenaje al Brig. Juan Manuel de Rosas -repatriación de sus restos-; anticipó que recién a fines de octubre difundirá su resolución sobre el indulto. Inmediatamente comenzaron las críticas de los opositores, entre ellos grupos de bancarios comunistas que intentaban recoger «un millón de firmas contra el indulto» en la esquina de Florida y Corrientes, pleno centro porteño.  El Partido Comunista protestó porque fueron obligados a retirarse con exhibición de armas de fuego.

De acuerdo con una estadística del Ejército, durante una década (1969-1979) los guerrilleros concretaron 1748 secuestros, 1501 asesinatos, 145 copamientos -80 fábricas, 20 localidades, 45 unidades militares-; 3000 robos de vehículos y armamentos.:: y con esos datos ese sector de las fuerzas armadas recordaba cuál había sido su responsabilidad al ponerse en marcha el Operativo Independencia. Consecuencia de los excesos en la represión y por las torturas, en 1984 comenzaron los juicios contra los militares,  dispuestos durante la presidencia de Alfonsín y aproximadamente 833 testigos declararon ante dos fiscales, seis jueces y veinte defensores.  En el día del maestro -Sarmiento-, el 11 de septiembre de 1985 los militares lucieron sus uniformes para escuchar los alegatos de la Fiscalía: primero entró Massera, de la Marina y el último fue Videla, del ejército.  Tres meses después conocieron las sentencias:

Videla, Jorge Rafael Homicidios Priv. libertad

con violencia

Tormentos Tormentos

seguidos de muerte

Robos
Reclusión perpetua.

Inhabilitación absoluta perpetua

66 306 93 4 26

Massera, Emilio Eduardo

Prisión perpetua.

Inhabilitación absoluta perpetua

3 69 12 ninguno 7

Viola Roberto                  17 años de prisión (ningún homicidio y delitos similares).

Lambruschini, Armando     8 años de prisión (ningún homicidio y delitos similares).

               Agosti, Orlando                                4 años de prisión (ningún homicidio y delitos similares.)

Los demás comandantes fueron absueltos por ser insuficientes las pruebas de los denunciantes.

Desde otra perspectiva, en agosto de 1989 distintos medios difundieron lo expresado por Jorge Born, uno de los hermanos secuestrados por los montoneros:

‘…Yo estoy dispuesto a perdonar.  Creo que lo que hay que hacer es una amnistía amplia y total, que incluya a los comandantes, que incluya a los combatientes de izquierda…’

Sin nombrarlos, se refería a quienes también les exigieron 60 millones de dólares como rescate.

(Es oportuno recordar que tiempo después, tras una denuncia relacionada con un programa de televisión, distintos medios informaron lo que en algunos ámbitos financieros era sabido: entre los socios en una reconocida empresa de comunicaciones, estaban Jorge Born  y Rodolfo Galimberti –el loco Galimba como lo nombraban sus compañeros montoneros-, integrante del grupo que lo había secuestrado junto a su hermano.

1989-1990: otro “escenario”…

Al orientar el análisis en esa dirección, hay que distinguir los momentos en que se cometieron los actos de terrorismo: hasta principios de la década del ’80 estuvimos soportando una guerra civil no declarada, escuchábamos comentarios sobre “partes de guerra” o leíamos esas noticias en las revistas exhibidas en los kioscos; desde diciembre de 1975 sabíamos que el gobierno nacional y el Congreso habían ordenado a las fuerzas armadas de la Nación:  aniquilar la subversión

El ataque al “regimiento 3 de La Tablada” fue a principios del último año de gobierno del doctor Alfonsín, elegido por la mayoría de los ciudadanos argentinos.

El cruento alzamiento militar dirigido por el coronel Mohamed Alí Seineldín, el 3 de diciembre de 1990, se concretó diecisiete meses después de asumir el doctor Carlos Saúl Menem con un alto porcentaje de votos a su favor, y el coronel fue condenado en primera instancia a reclusión por tiempo indeterminado, por el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas.  Luego la causa pasó a la Cámara Federal de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal y la sentencia fue también por reclusión perpetua.

22-08-2004: Gorriarán Merlo, en la lucha…

El 23 de agosto de 2004 desde el Diario “La Nación” de Buenos Aires, informaron que el día anterior, al conmemorarse en Rosario (provincia de Santa Fe), el 32º aniversario de la tragedia en Trelew, se realizó un acto en el Centro Cultural “La Toma” y habló Enrique Gorriarán Merlo, indultado durante la semana de mayo de 2003, por el presidente provisorio Dr. Eduardo Duhalde.

En esa crónica reiteran lo expresado por Gorriarán:

“…Desde que salí de la cárcel traté de ir a la mayor cantidad de lugares para escuchar las opiniones de la gente.”

Expresó que sentía la necesidad de “luchar por los objetivos, por los compañeros que cayeron, entre ellos los de Trelew”.

Aludió a su causa, que “era la mayor equidad posible”…

Manifestó también:

“Lógicamente, trabajaríamos para una organización política que persiguiera ese objetivo.”

(Lecturas y síntesis: Nidia Orbea de Fontanini.)

 

[1] El Litoral. Santa Fe, viernes 3 de noviembre de 1995, p. 1.

[1] En una declaración escrita, Alejandro Carlos Biondini reiteró que en 1986 –un año antes de ese informe-, en el Banco Hipotecario Nacional dirigido por Aníbal Reinaldo (UCR), le habían otorgado el “Crédito 1032” para la adquisición de una vivienda, apoyado en ese trámite por el diputado Julio Corzo –el tantas veces visto y escuchado mientras hablaba a los jubilados desde un canal de televisión-.

[2] Sabido es que la revista “Entre todos” expresaba “Los que queremos la liberación”… Era el órgano periodístico del “Movimiento Todos por la Patria” y en la Dirección estaba Carlos Alberto Burgos -luego prófugo-; en aquel tiempo ya vinculados con jóvenes integrantes de “Franja Morada”, una de las ramas del bosque de la Unión Cívica Radical en los tiempos del doctor Raúl Ricardo Alfonsín, Enrique –Coty– Nosiglia, Federico –Fredy– Storani, Aníbal Reinaldo, Luis –Changui– Cáceres…

[3] Entre los que fueron liberados, han mencionado a Oscar Ciarlotti , viudo de María Magdalena Nosiglia, la hermana de Coty que integró el grupo armado autodenominado “ERP 22 de agosto” -ejército revolucionario del pueblo- identificado con esa fecha que necesariamente genera la evocación de los sucesos en Trelew, ese día de 1972, cuando fueron asesinados los guerrilleros que habían escapado de un penal con el propósito de viajar a Chile y no alcanzaron a concretar ese propósito.   Hay otro dato que es oportuno tener en cuenta: el 25 de mayo de 1973 asumió el presidente de la Nación Argentina Dr. Héctor José Cámpora –“El presidente que no fue” como escribió Miguel Bonasso en su libro dedicado a una parte de ese período de la historia de los argentinos- y estuvieron presentes varios presidentes, entre ellos el chileno Salvador Allende Gozens.  Sabido es porque fue trasmitido por radios y televisión, que en el Palacio de la Moneda de Santiago de Chile, sede del gobierno nacional, el 11 de septiembre de 1973 ingresaron las fuerzas al mando del general Augusto Pinochet Ugarte y asesinaron al presidente Allende.  Asumió el gobierno el General que para algunos era un tirano -como sucedió con Juan Domingo Perón, aunque había sido electo dos veces por la mayoría de los ciudadanos argentinos- y para otros “el artífice de la liberación” como lo han demostrado en sucesivos actos, los últimos en los primeros años del siglo veintiuno, cuando tras estar detenido en Inglaterra fue extraditado; también en las siguientes manifestaciones en la capital chilena mientras siguen los juicios, denuncias y defensas. Aquel 11 de septiembre de 1973, un mes antes de la asunción de Juan Domingo Perón en su tercera presidencia y día del maestro, en homenaje al polémico Faustino Valentín Quiroga Sarmiento, más conocido como “Domingo Faustino Sarmiento”-, varios grupos de exiliados argentinos necesitaron refugiarse en la Embajada argentina en Santiago de Chile.  Uno de los primeros en asilarse en la Embajada enseguida de asumir Pinochet, fue Dante Caputo (hasta ese momento, uno de los asesores de Salvador Allende), en la década siguiente Ministro de Relaciones Exteriores designado por el presidente Dr. Raúl Ricardo Alfonsín (10 de diciembre de 1983 al 9 de julio de 1989, ya que renunció cuando el caos se manifestó en las calles con protestas y saqueos en distintas ciudades), mientras era casi incontrolable la hiperinflación y se habían denunciado sucesivos hechos económicos que perjudicaban a los intereses del Estado. // En ese tiempo, liberado su cuñado Oscar Ciarlotti, Coty Nosiglia promovió su nombramiento en el Ministerio de Salud y Acción Social y la designación Hilda N. de Cuesta en el Plan de Alfabetización, impulsado por Catalina Nosiglia, otra de las hermanas del Ministro.  // Alfonsín entregó el mando al electo por amplia mayoría: doctor Carlos Saúl Menem (La Rioja, nacido el 2 de julio de 1930 en Anillaco, residente en Santiago de Chile (2003-2004), casado con la periodista chilena Cecilia Bolocco, padres de Carlos Máximo Menem Bolocco.) Los diarios de aquella segunda semana de septiembre de 1973, informaron que aproximadamente ciento diez personas estaban protegidas en la embajada Argentina:  varios periodistas: Horacio Verbitsky, Tomás Eloy Martínez; Rodolfo Ortega Peña; Gregorio Klimovsky, Oscar Sbarra Mitre, Ricardo Puiggrós; Ricardo Moner Sáenz, los talentosos Ernesto Roque Sábato, Osvaldo Soriano;  Ricardo Halac y Fernando Pino Solanas, Francisco Paco Urondo… Nombro a una perseverante y coherente  mujer: Chunchuna Villafañe; porque también estaba en esos momentos en esa embajada, y sigue la lista que identifica a ciento diez personas…

[4] Rubén Dri fue uno de los sacerdotes que integraron ese movimiento, dedicado intensamente al periodismo colaborando en la revistas “De Frente” y en el diario “La Voz”, relacionados con diversos funcionarios del gobierno del doctor Alfonsín porque era uno de los treinta y tres que con algunos colaboradores, participaban en la edición del semanario “El Periodista”; donde también publicaba otro tercermundista: Gustavo Gutiérrez; el autor de varios libretos y libros Horacio Verbitsky; el humorista Hermenegildo Sabat; Juan Carlos Escudero -trabajador en Rusia en  1971, luego integrante de las FAR –fuerza armada revolucionaria-, PRT –partido revolucionario de trabajadores- y en el ERP -ejército revolucionario del pueblo-; durante la presidencia de Alfonsín por sus relaciones con Coty Nosiglia fue nombrado Asesor sanitario del P.E.N; Se ha destacado que fue redactor del Proyecto Nacional de Salud  cuya sanción intentó lograr por intermedio del doctor Rolando Víctor García; también del proyecto de Seguro Nacional de Salud y la ley de Medicamentos…  noticias difundidas tras las declaraciones de Alejandro Carlos Biondini -dicen “ex-peronista”; presidente del Partido “Nuevo Triunfo” ubicado por otros periodistas como “nacional, socialista” y por otros  como “neonazi”…

[5] Estoy intentando terminar de leer el libro Recuerdo de la muerte -Edic. Bruguera, Buenos Aires, marzo de 1984, tres meses después de asumir el presidente Alfonsín en la capital argentina-, escrito por Miguel Bonasso; diputado nacional desde diciembre de 2003, presidencia del doctor Néstor Carlos Kirchner –de Santa Cruz-, a partir del 25 de mayo de ese año, quien aunque fue segundo tras el resultado de la elección pasó directamente a ser el titular del Poder Ejecutivo Nacional porque el doctor Carlos Saúl Menem –estadista y en consecuencia hábil estratega- optó por no presentarse en la segunda vuelta porque como lo reiteró en varias oportunidades –y hechos posteriores lo demostraron-, la consigna de sus opositores en ese momento era “todos contra uno”…  // Bonasso dedicó ese libro: “A los presentes para siempre” y en la página siguiente, una cita de Francisco de Quevedo y Villegas, Salmo XVII: “…Y no hallé cosa en que poner los ojos que no fuese recuerdo de la muerte.” (Intuyo que así vivirán hasta el momento del último desprendimiento, quienes hayan estado en el cruento escenario de la guerra civil argentina -no declarada-, desarrollada a partir del 16 de septiembre de 1955 y ¿hasta el 10 de diciembre de 1983?…  En la última página de su libro, Miguel Bonasso escribió: México, setiembre de 1983. Dividió esa novela evidentemente histórica y autobiográfica, en tres temporadas que van revelando tres etapas en el desarrollo de la guerra civil no declarada entre los argentinos con diversos matices de espionaje y contraespionaje… La primera, es “Temporada en el Infierno”.  Incluye pinceladas con rasgos y signos del tiempo del general  San Martín y avanza hacia la época de Hipólito Irigoyen. Habla de Buenos Aires y de “el Almirante” y “el Tigre”  con descripciones que coinciden con personas –o personajes- de la historia de los argentinos.  Nombra a Miguel Ángel Benazzi, Teniente de Navío (p.9). Armas y “expresiones cuarteleras” se suceden en todas las “temporadas”.  Uno de los protagonistas es nombrado con una letra y un punto: “C.”, otro es “R. El viajante”…; relata lo sucedido con la “señora Elena Holmberg Lanusse”, quien “aparecía flotando en el Delta del Río Paraná con un alambre en el cuello”. (p. 15) Destaca que “la presa más codiciada era el Secretario General, Mario Firmenich, que en esos días cumplía treinta y un años”. (p.16)  Describe vivencias de personas que estaban lejos de Buenos Aires, lejos de la República Argentina, “exiliados”…  conspirando. Relata: “Todos, en mayor o menor medida, habían sufrido la represión en carne propia. Adriana Lesgart tenía apenas treinta años, pero aparentaba muchos más; había perdido dos compañeros y parte de su familia en la guerra; María Antonia Berger era uno de los tres sobrevivientes de la masacre de Trelew, en 1972.  Una cicatriz en la mandíbula recordaba el tiro de gracia con que creyeron ultimarla en la base aeronaval Almirante Zar. /  Gregorio Levenson, tenía dos hijos muertos y su mujer secuestrada.  Al poeta Juan Gelman le habían secuestrado un hijo y su hija Nora había sido liberada por milagro”.  (Agrego fue detenida, estaba embarazada y producido el nacimiento, desaparecieron ambos, el recién nacido fue entregado a otra familia y lograron identificarlo a fines del siglo veinte tras sucesivos trámites. )  Siguió escribiendo Bonasso: “Fernando Vaca Narvaja había perdido a su primera compañera, a su padre (un ex ministro del gobierno de Frondizi) a su hermano mayor Hugo, a quien el general Menéndez, jefe de la guarnición Córdoba le había aplicado de la ‘ley de la fuga’ junto con otros dos prisioneros desarmados. / Arnaldo Lizaso pertenecía a una vieja familia peronista de la zona norte del Gran Buenos Aires, que había sido prácticamente diezmada.  El primero, el joven Carlos Lizaso, fusilado en la masacre de José León Suárez en 1956; los últimos Miguel y Jorge, caídos en combate veinte años después.” /…/ “Los había buscado la Alianza Anticomunista Argentina” –la Triple A, sigla AAA en diversos comunicados-; “el Comando de Libertadores de América, la Policía Federal, el Ejército, la Aeronáutica, La Marina y la infinita variedad de organismos de seguridad legales y clandestinos que fueron surgiendo como hongos en las dos últimas décadas.  / Los dirigentes del MPM habían sido citados por el Secretario general a reunión del Consejo Superior y llegaban de todas partes. Unos de España, otros de Francia o de Suecia.  Varios de México” (agrego, donde estuvo exiliado el doctor Cámpora -y su familia., hasta su fallecimiento después de padecer el acoso del cáncer); “Varios también de la Argentina, en la que habían permanecido durante los años más duros.  Algunos sabían que era difícil que regresaran enseguida al país.  Otros pensaban que deberían hacerlo.  Algunos preferían la clandestinidad y el terror al exilio.  Otros temían vivir acorralados como fieras y se resignaban al destierro. La mayoría estaba dispuesta al sacrificio. La mayoría confiaba aún ciegamente en la Conducción y en el triunfo cercano de la revolución.” (p. 17) Al aproximarnos al primer capítulo, titulado “Lejanías” Buenos Aires, junio de 1955, Bonasso  escuchando sus voces interiores, dejó estos signos: “Aquel 16 de junio pudo haber sido un día de invierno como tantos, de no haber mediado algunas circunstancias  especiales que lo convirtieron durante algo más de seis horas en una versión circunscripta y criolla del Apocalipsis. / El señor Dri Subrayado aquí había viajado desde Chajarí, el pueblo donde se había establecido con su familia, a la Capital, para hacer unos trámites en la Secretaría de Hacienda.  Era una sombra más entre miles de argentinos anónimos que deambulaban aquel mediodía por ese cuadrilátero del poder que se llama Plaza de Mayo.”  (p. 27) /…/  “El señor Dri vivía una contradicción dada su doble condición de católico y peronista. Había sido de los que apoyaron sin reservas el idilio inicial entre la Iglesia y el peronismo y ahora insistía con pena y desconcierto al divorcio que cada vez se tornaba más violento.  / ‘No –solía pensar-, la cosa no camina.  El gobierno está lleno de vivos y alcahuetes que sólo buscan llenarse de oro’.  Como mucha otra gente, pensaba que Perón había hecho un gran primero gobierno pero la estaba pifiando en el segundo.  Intuía que la muerte de Evita había sido realmente una gran pérdida, no solamente por ‘todo lo que había hecho por los pobres’, sino porque era una vigorosa personalidad que tenía a raya a los oportunistas, impidiendo que el gobierno popular se empezara a pudrir como el pescado, por la cabeza.  Para colmo habían concluido los grandes años de bonanza que siguieron al fin de al guerra y la Argentina tuvo que comenzar a ajustarse el cinturón y comer pan negro.” (p. 27-28) /…/ “El señor Dri no pensaba. Registraba los accidentes exteriores con una pasividad de espectador cinematográfico. Sin poder sacar conclusiones, como si esos hechos no le incumbieran.  Al comenzar a bajar las escaleras del subte casi los aplasta contra la pared un grupo tumultuoso que venía llevando un herido.  En el primer rellano un niño pequeño lloraba abrazado a su madre.  La visión lo retrotrajo a Chajarí y el señor Dri se acordó de su familia. Una nueva sensación de abandono y autocompasión lo acompañó unos instantes mientras descendía los peldaños y descubría aterrado que la bocamanga de su pantalón estaba empapada de sangre.  Instintivamente se palpó la pierna para ver si estaba herido y luego comprendió que era la sangre del cadáver con el que había tropezado.  / En el acceso al gran salón donde estaban las boleterías y los molinetes de entrada, en un ángulo, había una mujer sentada sobre unos diarios con la pierna derecha desecha por la metralla  El hueso estaba expuesto y astillado y podía moverse entre las hilachas de carne sanguinolenta. Lo que más impresionó al señor Dri fue que la mujer, una mujer sencilla que vestía un abrigo basto de franela marrón, apenas se quejaba, como si temiera molestar; se limitaba a mostrar con la mano lo que había quedado de su pierna.  A su lado un hombre gordo y sanguíneo clamaba por un médico.  /  En esos primeros instantes la solidaridad no se había organizado Sólo se veían grupos incipientes que superando el estupor y el pánico levantaban a los heridos, guiaban a los más débiles, comenzaban a impartir órdenes, practicaban curas de emergencia improvisando torniquetes con pañuelos, imponiéndose con su presencia de ánimo a los que habían sido desbordados por la historia.  A esa clase de líderes naturales pertenecía el melancólico.  A él le debió el señor Dri la primera confortación, el primer gesto humano que lo regresaba, en medio de la tragedia,  # Esta lectura generó la evocación de experiencias personales: al anochecer del 27 de febrero de 1960 –día de Carnaval-, accidentalmente las llamas casi me desnudaron, enseguida me tiré sobre el piso y mi amado amante me cubrió con una frazada. Sólo dije ¡Tranquilos mis amores, estoy bien! y veía cómo Dudy -o Edu, nuestro primogénito Eduardo Carlos Manuel de 5 años saltaba y saltaba aterrorizado mientras Ricky -Ricardo Marcelo Gabriel, de tres años miraba y empezaba a llorar. //  Dije sólo “¡Ya está, tranquilos, ya me até…” cuando después de un choque de frente con otro automóvil, como consecuencia de la ruta mojada por la lluvia y embarrada, quedó la rótula desprendida de todos los tendones y ligamentos y con el cinturón del vestido hice un torniquete –no sé como pude..- apreté un poco diez centímetros arriba de esa herida. Pesaba cuarenta y siete kilos, tenía veintiocho años –ahí puede haber algún indicio sobre aquella inmediata reacción-; en el asiento de atrás viajaba nuestra amiga del alma, a perpetuidad Lidia Foremny y nuestros hijos Ricardo (10 años), Nidia Marta Susana (5 años) y Gustavo José María (4 años); Edu con sus compañeros quedaron en La Falda porque era el viaje de 7º  grado y regresábamos, el 15 de noviembre de 1967. /  Estaba el 25 de junio de 2002 en Lloret de Mar (cerca del Mediterráneo, Gerona, España), en el hogar de nuestros hijos Martita y Rubén Fernández Gil, de nuestras nietas Josefina (n. 1986) y Lucía (n. 1989), había viajado con nuestra primera nieta Graciela María Marta Fontanini Leonhardt (n. 01-07-1979) y después de varios días compartidos con alegría recorriendo distintos pueblos, después de ver al inquieto e inquietante David Bisball en la televisión, una hemorragia que no había advertido desde el día anterior, provocó una crisis y mientras el blanco toallón era insuficiente para absorber los reflujos y coágulos, sólo dije: ¡Tranquila Martita, estoy bien!  Ella, contestó: “Sí mami, sí, yo estoy tranquila, vos quedate tranquila. Yo estoy preparada para lo peor…” Así sucede ante lo sorpresivo y por lo trágico, casi inabarcable… Sigo agradeciendo a quienes me asistieron en ese lugar y me trasladaron en ambulancia, aunque no sé sus nombres; al personal de Hospital Comarcal de la Selva -en Blanes, al doctor Xavier Mira Alonso, médico que concretó el diagnóstico: “Hemorragia digestiva alta. Esofagitis por reflujo Grado IV. Paciente de 70 años de edad, que ingresa en Urgencias por epigastralgia y hematemeseis con sintomatología vegetativa de 24 horas de evolución.” (La ficha, impresa en idioma catalán, como corresponde, ya que desde 1939 hasta la muerte de Franco, el 20 de noviembre de 1975 allí también, establecieron “el idioma oficial” y siguió vivo en los hogares, el de las generaciones que los precedieron…) #   Ahora, miro hacia otras señales en el escorzo de la historia de la Humanidad.   Necesito expresar que no fue por casualidad que el general Perón haya difundido el Plan Económico 1952 al momento de asumir la segunda presidencia, el 4 de junio de ese año, cuando Evita ya estaba en sus últimos días y participó de todos los actos, produciéndose su tránsito a la inmortalidad el 26 de julio de 1952 a las 20:25.  Tampoco fue por casualidad que antes de antes de anunciar el Segundo Plan Quinquenal haya reunido a todos los ministros para explicarles las dificultades sociopolíticas y económicas existentes, destacando los Deberes de los Funcionarios de la Administración Pública, en un extenso discurso que luego fue impreso en el Ministerio de Salud y Bienestar Social de la Provincia de Santa Fe y entregado en todas las reparticiones.  Hay que admitir que hay “historias de puro cuento” y “cuentos que son historias”; “relatos de puro verso” y “versos que son relatos históricos”… Entre esas coordenadas, tres palabras esenciales: Fe, Esperanza, Caridad –virtudes insoslayables-  y la Palabra: “Amaos, los unos a los otros”

[6] El Padre José María Serra percibió que su misión debía orientarse hacia la formación de una familia y la generación de descendencia.  En 1994, representó al Frente Grande como Convencional Constituyente y durante una de las sesiones plenarias –tratamiento del Reglamento de la Convención-, leyó unos versos del talentoso poeta español León Felipe titulado ¡Un signo, quiero un signo!… En realidad, todo un símbolo en esos días primeros días de junio, cuando monseñor Jaime de Nevares se había retirado de la Convención porque había prometido hacerlo si no se aceptaba la posición de la minoría, respecto del “Núcleo de Coincidencias Básicas” que había sido aprobado en el Congreso Nacional, texto de la Ley Nº  24.309  discutida y aprobada en ambas Cámaras. ¡Todo es historia de la Historia!… ¡Historia de los argentinos, historia de la Humanidad!

[7] Alberto Piccinini, -dirigente metalúrgico de Villa Constitución, Departamento Constitución, al sur de la provincia de Santa Fe), en la década siguiente fue diputado en la Legislatura de Santa Fe; luego diputado nacional integrante del ARI –partido político impulsado por la doctora Elisa Lilita Carrió, chaqueña, ex UCR., reconocido como “Afirmación para una Republica Igualitaria”, antes decían “Alianza para una República de Iguales).  Alfredo Bravo, diputado nacional, candidato a senador nacional siendo discutido el resultado de esa elección porque él –y quienes lo apoyaban- consideraban que era quien debía ocupar esa banca (en oposición al doctor Gustavo Béliz… ministro del Interior designado por el presidente Kirchner, hasta que renunció con manifestaciones públicas que determinaron la intervención de la Justicia y su posterior rectificación…). A los 78 años, Alfredo Bravo fue internado tras soportar un infarto y falleció al día siguiente, el 25 de mayo de 2003 a las 4. Ese día asumió el presidente Kirchner y es oportuno recordar que el maestro socialista había integrado  la fórmula presidencial Alfredo Bravo-Rubén Gustiniani, en aquellas elecciones del 27 de abril de ese año.

[8] El Dr. Eduardo Luis Duhalde en los primeros años del siglo veinte, es frecuentemente consultado por periodistas de distintos medios, acerca de temas relacionados con “los derechos humanos” y la “lucha contra el terrorismo”.  Actualmente, presidencia del doctor Néstor Carlos Kirchner desde el 25 de mayo de 2003, colabora en acciones del gobierno nacional y es reconocido profesional en la provincia de Buenos Aires.

[9] El periodista santafesino Juan Carlos Bettanín  -cercano al Partido Justicialista- fue designado por el gobernador de Santa Fe Dr. Víctor Félix Reviglio (1987-10 de diciembre-1991) como primer Secretario de Cultura y Comunicación Social de la provincia, un organismo fugaz porque no estaba incluido en el presupuesto ni lograron que lo incluyeran en las Cámaras legislativas. En consecuencia, un derroche de energía y movilización de muebles y personas con una sucesión de renuncias y funcionarios reemplazantes.  Fue Concejal durante la intendencia del Arquitecto Marcelo Álvarez y solo integró, su bloque Germán Abdala. Terminadas esas funciones declaró que seguiría dedicándose al periodismo y así es, hasta ahora… (Otoño/2004)

[10] No ha sido por casualidad que en septiembre de 2004, en las elecciones de la Unión Cívica Nacional (Comité Nacional), el sector del doctor Luis Changüí Cáceres obtuviera menos votos que los del doctor Adolfo Stubrin… (Adolfo Stubrin, siendo diputado nacional y presidente de la Comisión de Educación en 1981, participó en el acto realizado en la Escuela Nacional de Comercio “Domingo Guzmán Silva” de Santa Fe de la Vera Cruz -lugar de residencia de la familia Stubrin-, al reestablecerse el ciclo Superior ya que hasta mediados del siglo veinte, funcionaba el Curso de Contadores Públicos Nacionales: cursos regulares, plan de cuatro años de estudio, vigente hasta 1954, momento de la última promoción.  ¡Todo es historia de la Historia!… ¡de la Historia de la Humanidad!

Deja una respuesta

Top