Canadienses defienden su identidad cultural.
Conclusiones del filósofo Julián Marías.
Hoy, martes 19 de agosto de 2003, durante una pausa logré otra aproximación a las páginas virtuales, que son reales…
Canadienses defienden su identidad cultural.
No sorprende la pregunta que se formula un canadiense, porque se suele decir norteamericano al aludir a los estadounidenses, que lógicamente también pertenecen al sector norte del continente americano.
(Hay que tener en cuenta que la América central es una estrecha franja que se extiende en una longitud de aproximadamente dos mil doscientos kilómetros desde México hasta Colombia, entre el océano Pacífico y el mar de las Antillas en el océano Atlántico, destacándose el vasto golfo de Honduras y el archipiélago integrado por Las Grandes Antillas: Cuba, Puerto Rico, Santo Domingo -Haití y República Dominicana-, Jamaica y las Pequeñas Antillas… Desde Panamá hasta el Cabo de Hornos y las islas ubicadas más al sur, en una longitud de aproximadamente 7.800 kilómetros se extiende la América Meridional o Sudamérica.)
¿Etapa de continentalismo?…
Además, es razonable que los seres humanos sean coherentes con su nacionalidad, con su cultura y que necesiten ser reconocidos como tales. Tal vez no genere asombro la lectura de estas declaraciones:
“¿A quién le gusta ser confundido con un norteamericano?” Subrayado aquí. “A nadie. Y a nosotros, menos. Para colmo, las aerolíneas y las compañías de turismo estadounidenses recomiendan a sus ciudadanos que digan ser canadienses en el exterior, para evitar maltratos y eventuales atentados. Están arruinando nuestra reputación. En Canadá tenemos miedo de despertar y comprobar que nuestro país ha dejado de existir. Nadie lo sabrá, ni le importará, y Canadá va a disolverse en el aire. Económicamente, cada año estamos más colonizados por EE.UU. Estamos perdiendo la batalla. Tenemos miedo de perder nuestra identidad, que de verdad es muy distinta. Cada vez que nos confunden con estadounidenses, nos recuerdan que quizás este miedo es real, que quizá ya somos estadounidenses”. [1]
Algo para ser tenido en cuenta no sólo en Canadá, sino en el vasto continente americano, desde Alaska hasta las islas del Atlántico Sur… N. O. de F. / 2003.
Conclusiones del filósofo Julián Marías… |
A principios de la década del ’60, ya se difundían algunas conclusiones del estudioso español Julián Marías, en torno al continente americano y a su cultura. [2]
“El nombre ‘América’ designa la totalidad del hemisferio occidental, pero en los Estados Unidos se tiende a identificarlo con este país, y este uso empieza generalizarse fuera de él; desde luego, el adjetivo ‘americano’, sin más determinaciones, significa ya en casi todas las lenguas lo perteneciente a los Estados Unidos. Esto es abusivo, quién lo duda, e inexacto, pero no tiene buen arreglo: ‘norteamericano’ no es tampoco exacto, pues los canadienses y mejicanos tendrían igual derecho a esa denominación; de la palabra ‘estadounidense’ he dicho alguna vez, con el Capitán Centellas en el Tenorio, que ‘si es broma puede pasar’. Ese uso restringido e inexacto del adjetivo ‘americano’ (del sustantivo gentilicio) tiene una ventaja que nos llevaría a aceptar sin demasiada protesta su incontenible avance: la eliminación del adjetivo genérico ‘americano’, tan engañoso, porque no tiene sentido más que geográfico. Quiero decir que ‘América’ como unidad histórico-social no existe, y que ‘Panamérica’ solo puede ser una asociación o una alianza, no una sociedad. Si al decir ‘americano’ se piensa primariamente en los Estados Unidos, la ganancia es que cuando se quiere mentar otra porción del continente o su conjunto hay que subrayarlo de un modo expreso; por ejemplo, hay que emplear la expresión -nada inadecuada- “las Américas”. [3]
Expresa luego el investigador Julián Marías:
“En cuanto a la que comienza al sur de Río Grande y el Golfo de Méjico, las denominaciones usadas son muchas: América española, América hispánica, Hispanoamérica, Iberoamérica, América Latina, Latinoamérica, Hispanidad…”
(Se impone otra pausa porque acerca de esas culturas será posible dialogar en otro espacio.
Nidia Orbea de Fontanini.
Hoy, sábado, 13 de marzo de 2004 – Hora 20:24:00)
[1] Will Ferguson entrevistado por Mariana Enríquez (editado en el suplemento Radar, de Página/12); información desde “Wimbledon – El weblog de Guillermo Piro, en un sitio de internet.
[2] Marías, Julián. Obras VII. Madrid (España), Revista de Occidente, 1966. Incluye Los españoles -primera edición 1962; tercera 1966-; La España posible en tiempo de Carlos II –1ª ed. 1963- y El tiempo que ni vuelve ni tropieza (1ª ed. 1964, 3ª ed. 1966).
[3] Ibidem, p. 281-282.