Estás aquí
Inicio > Literatura > Autores diferentes Nacionalidades > Thomas Stearns Eliot (EEUU, 1888-1956)

Thomas Stearns Eliot (EEUU, 1888-1956)

“Ruega por nosotros ahora

y en la hora de nuestro nacimiento.”

S. Eliot – Tom…

Inicio de la trayectoria…

Su perfil juvenil…

Consejero en la editorial “Faber & Faber”……

Retrato y autorretrato…

El “otro” Thomas Stearns…

Miradas virtuales…

OBRAS…

1915: “The love song of J. Alfred Prufrock” – “Canción de amor de…”.

Eliot y… “La Figlia Che Piange”.

1920: “Poemas”…

“Gerontion”.

1922: “The Wast Land” – “La tierra baldía” o la yerma tierra……

Casi a las cinco de la tarde…

Distintas interpretaciones……

Otra mirada sobre esa “tierra yerma”…

“The burial of the dead” – “El entierro de los muertos”.

Aproximación a “La tierra baldía” en el siglo XXI…

Opiniones desde páginas virtuales…

“The Criterion”.

1925: «The Hollow Men» -“Los Hombre vacíos».

Eliot en la Editorial Faber & Faber…

1926: “Sweeney entre los ruiseñores”.

Más… acerca de “La tierra baldía”.

1930: “Miércoles de ceniza”.

1932: Conferencias y tés… en Harvard.

1934 : “La roca”.

1935: “Murder in the Cathedral” – “Asesinato en la Catedral”.

Selección de Poemas.

1936: encuentro con Muñoz Rojas…

1939: “Reunión de familia”.

Eliot entre los gatos y las familias…

1940: “East Coker” – Adicto oriental……

1942: “Four Quartets” – “Cuatro Cuartetos”.

«The dry Salvages» – «Little Gidding».

Símbolos en los “Cuatro Cuartetos”…

Más “fragmentos” de los “Cuatro cuartetos”…

Otras traducciones de “Cuatro Cuartetos”…

Mirada actualizada sobre “Usk”… el poema de Eliot.

1948: “Premio Nobel de Literatura”.

1949: “The Cocktail Party” – “El cóctel de recepción”.

Eliot… y la poesía.

Eliot, el maestro…

1965: Eliot y… su Último Vuelo.

2003: Ecos…

Agosto de 2003: otra interpretación del poema “Usk”.

 

 “Time present and time paspast

Are both perhaps present in time future,

And time future contained in time past.”

  1. S. Eliot –“ Cuatro cuartetos”

“El tiempo presente y el tiempo pasado

Son ambos quizás presente en tiempo futuro,

Y tiempo futuro contenido en el tiempo pasado.

                                   (Traducción: N.O.de F.)

 

Inicio de la trayectoria…

El 26 de septiembre de 1888 nació Thomas Stearns Eliot, en Saint Louis -Missouri, Estados Unidos-; sus padres pertenecían a distinguidas familias de la Nueva Inglaterra: Henry W. Eliot -un hombre de negocios– y Charlotte Chaucey, autora de un drama poético – Savaranola- publicado con prólogo escrito por su hijo.

Tuvo la posibilidad de cursar estudios universitarios en la Universidad de Harvard (1910); después ingresó en París en la Sorbona (1911) y luego en Oxford.  Desde 1915 decidió vivir en Londres; al año siguiente empezó a trabajar como profesor y completó sus primer poema titulado «Canción de amor de J. Alfred Prufrock«.  En 1919 fue empleado bancario, dictó conferencias y fue subdirector de la revista literaria  Egoist.  Ese año se casó con Vivien Haigh-Wood, matrimonio disuelto en 1933 tras el deterioro físico y mental de su esposa, situación que provocó la inmediata internación en un hospital.

Su perfil juvenil…

Mientras estudió en Harvard, Eliot cooperó en la edición de la revista “Advocade” y años después, “sus antiguos condiscípulos recordaron a Eliot como lo habían conocido en sus días de estudiante”.  Sabían que había sido un “alumno brillante, pero reservado. Ya en aquella época era aficionado a los poetas franceses y jamás asistía a los famosos cursos sobre el drama moderno dictados por el profesor George P. Baker.”

Tenía la costumbre de fumar en pipa y poco le importaba la ropa que usaba, consumía pocas bebidas alcohólicas y en su tiempo libre prefería jugar al ajedrez, el reconocido “juego ciencia” por todas las combinaciones que se van resolviendo durante una partida.

Consejero en la editorial “Faber & Faber”…

En 1916 completó su tesis doctoral, también dirigió un diario; fue consejero de la casa editorial “Faber & Faber” y necesitó expresar tales contrastes en su poema titulado Mélange Adultère de Tout escrito en francés, donde con sutileza expresa:

 

“En Amérique, profesor; “En América, profesor;
 En Angleterre, journaliste;  En Inglaterra, periodista;
 C’est à grands pas et en seuer Sólo a grandes pasos y con sudor,
que vous suivrez à peine ma piste” Ustedes podrán seguir mi pista.”

 

Thomas Eliot, con precisión describió los avatares que vivió cuando comenzó su Camino

Retrato y autorretrato…

Sabido es que Eliot de una revista literaria expresó su interpretación acerca de “La Condición del Hombre Contemporáneo”.  También se ha difundido una descripción del escritor inglés J. B. Holdin: «…un hombre alto, delgado, ligeramente inclinado, con una nariz aguileña que da a su rostro el aspecto de un inmenso pájaro que hubiera retornado de un vuelo distante y se hubiera detenido a reposar».  Al mirar a cualquier persona, interesa la expresión de su boca y según Eliot, ese escritor articulaba una “sonrisa como volteriana” y por sus testimonios -orales y escritos-, demostró que su mirada  tendía a detectar las señales necesarias  y que estaba “habituado al análisis profundo de las cosas, a situarlos en su debida perspectiva, ojos que son como instrumentos de precisión y, ocasionalmente, como vigilantes que guardan el secreto de hondos sentimientos y emociones tempestuosas.”

Eliot aún cuando necesitaba describir algo real no podía eludir la incorporación de sus íntimas percepciones y así tanto sus personajes como las personas que intentó retratar necesariamente han estado bajo ese influjo natural e insondable…

Entre sus “Poemas Menores”, el talentoso T. S Eliot dejó trazado un autorretrato irónico y  mordaz:

 

“How unpleasant to meet Mr. Eliot! Que molesto es encontrarse con el señor Eliot!
With his features of clerical cut, Con su presencia de corte clerical
And his brow so grim y su rostro adusto
And his mouth so prim y su boca estirada
And his conversation, so nicely y su conversación, tan refinada,
Restricted to What Precisely limitada a Qué Precisamente
And If and Perhaps and But. a Sí, a Tal vez y Pero.
How unpleasant to meet Mr. Eliot! ¡Qué desagradable es encontrar al señor Eliot,
With a bobtail cur con un rabón perrito callejero,
In a coat of fur en abrigo de piel,
And a porpentine cat y un gato ‘porpertino’
And a wopsical hat: y un extraño sombrero:
How unpleasant to meet Mr. Eliot! ¡Qué molesto es encontrarse con el señor Eliot!
(Whether his mouth be open or shut!)” Sea que su boca esté abierta o cerrada!”

 

(De Five-Finger Exercises.)

Lectura y traducción: N. O. A. de Fontanini.

 

El “otro” Thomas Stearns…

Se ha reiterado que en 1927, fueron evidentes los cambios manifestados por Thomas Stearns Eliot: adoptó la ciudadanía británica y se convirtió a la religión católica, publicó algunos ensayos con el título «For Lancelot Andrews».  En ese tiempo se declaró “…‘anglo-católico en religión, clasicista en lo literario y monárquico en lo político’.”

En sus desarrollos literarios ha destacado la importancia de sus lecturas, todas las advertencias, mensajes y conclusiones de expresadas por distintas personas, publicadas por diferentes autores.  Resulta así razonable decir que era un experto en el arte de vivir y convivir

Miradas virtuales…

En una de las tantas páginas de la red de redes que es algo así como un inmenso Paraíso virtual -si se tiene en cuenta que Jorge Luis Borges dijo algo así como que imaginaba el Paraíso con forma de biblioteca– hay incontables notas y comentarios acerca de la trayectoria de Thomas Eliot.    Así es posible saber que tras la lectura de sus libro, alguien necesito expresar: “ …el autor, insospechadamente, parece un hombre normal, en el sentido menos favorable de la palabra. Un norteamericano atildado, religioso, conservador, empleado en un banco, casado, sin hijos. Vive en la Inglaterra postvictoriana de entreguerras, todavía el país más poderoso del mundo. /…/ No es un bohemio, no vive en una buhardilla pasando hambre y frío. No es un revolucionario, ni un excéntrico a la manera de Wilde” –Oscar-. “Su nombre es T. S. Eliot… fundamentalmente poeta, y en menor medida ensayista. En sus principios, escribe sobre la vulgaridad del mundo que le rodea. Personifica la mediocridad en un personaje repetido en sus poemas, llamado ‘Sweeny’…” que “es el ciudadano medio, vulgar, sin sensibilidad”…

(Por algo las abuelas decían –y decimos- que…

              ¡todo depende del cristal con que se mire!…)

OBRAS…

1915: “The love song of J. Alfred Prufrock” – “Canción de amor de…”

Este primer libro terminado de escribir en 1912, fue publicado tres años después en la revista norteamericana Poetry. Impactó por sus metáforas y por sus sutiles ironías.   Eliot lo dedicó a “»Jean Verdenal 1889- 1915, muerto en los Dardamelos» y se ha reiterado que produjo reacciones semejantes a las de Las flores del mal de Beaudelaire porque describía hechos urbanos: la vida en buhardillas o cafés barriales; establecía puentes entre el pasado y el presente, mostraba las aristas grotescas de la sociedad.

…………………………………………………………………………

“No puedo creer que cantaron para mí.

Las vi cabalgar sobre las olas hacia el horizonte,

Peinando las blancas crines desgreñadas

Cuando el viento soplaba las aguas blancas y negras.

Nos hemos retrasado en las cámaras del mar

Junto a sirenas ceñidas con algas rojas y amarillas.

Eliot y… “La Figlia Che Piange”.

(Lectura posible en “Freeservices”, en internet)

O quam te memorem virgo…

{Oh como te recordaré, doncella…- Eneida, I, 327}

 

“Yérguete en el más alto rellano de la escalera

apóyate en un ánfora de jardín

teje, teje la luz del sol en tu pelo

aprieta tus flores contra ti con sorpresa dolorida

tíralas al suelo y vuélvete

con una fugaz ofensa en los ojos:

pero teje, teje la luz del sol de tu pelo.

Así le habría hecho yo marcharse a él,

así le habría hecho a ella quedarse y afligirse,

así la habría dejado él

como el alma deja el cuerpo, desgarrado y arañado,

como la mente abandona el cuerpo que ha usado.

Yo encontraría

algún modo incomparablemente leve y hábil,

algún modo que ambos entendiéramos,

sencillo y sin fe como una sonrisa y un apretón de manos.

Ella se apartó, pero con el tiempo otoñal

obligó a mi imaginación muchos días,

muchos días y muchas horas:

el pelo por los brazos y los brazos llenos de flores.

¡Y me pregunto cómo habrían estado ellos juntos!

Me habría perdido un gesto y una actitud.

A veces estas vacilaciones aún asombran

la turbada medianoche y el reposo de mediodía.

Una dedicatoria a mi mujer

A quien debo yo el deleite que salta

y aviva mis sentidos cuando despertamos

y el ritmo que gobierna el reposo de nuestro dormir,

el respirar al unísono

de amantes cuyos cuerpos huelen el uno al otro

que piensan los mismos pensamientos sin necesidad de lenguaje

y balbucean el mismo lenguaje sin necesidad de significado.

Ningún maligno viento invernal congelará

ningún torvo sol tropical marchitará

las rosas del rosedal que es nuestro y sólo nuestra

pero esta dedicatoria es para que la lean los demás:

éstas son palabras privadas que te dirijo en público.”

1920: “Poemas”…

En “el Parnaso” se destaca que esta edición “contiene poemas de dos libritos anteriores. Los poemas son reflexiones irónicas, mordaces, de un hombre tímido y  sensible, consciente de la monotonía de la vida, de su falta de significación; reflejan un mundo mecanizado, materialista, desorientado, sin valores espirituales, cuyos dos polos son Prufock –hombre de la clase acomodada, tímido, cohibido, asustado por sus propias emociones, y que desea poder cambiar la vida- y Sweeny -hombre sensual, de aspecto repelente, enteramente entregado a los placeres de la carne”.  Sopena/72, p. 428

“Gerontion”

Ese sugerente título orienta hacia el ocaso de la tarde o casi al final del Camino donde es posible una aproximación al monólogo escrito por Eliot como introducción al poemario publicado en 1920.  Como suele suceder, el artista debió crear un personaje para que fuera el transmisor de sus convicciones: sus frustraciones, su melancolía, el rechazo al materialismo circundante, la incertidumbre al transitar por la cornisa de la des-esperanza…

En ese ámbito de la postguerra, Eliot escribió con su singular estilo algunos versos aparentemente incoherentes como resulta ser todo lo que no se alcanza a aprehender en su totalidad.  Ese monólogo es el develamiento de una confluencia de decepciones –aun en lo sexual-; debido a determinados excesos en las conductas personales que producen fastidio o repugnancia;  evasiones ante la imposibilidad de comprender las inevitables limitaciones del ser humano; creencias fantasmales y supersticiones que casi inconscientemente, contribuyen a cercenar la imprescindible libertad que hace posible avanzar un poco más allá de las apariencias y de lo banal hasta lograr otra aproximación a lo verdadero y a la Verdad.

Tres versos -de aquellos cuatrocientos treinta que integran Gerontion-, han de servir para saber algo más acerca del sentimiento de culpa según las conclusiones de Eliot, que era un poeta, un ensayista, no un siquiatra tampoco un sicoanalista:

 

“Ni el miedo ni el valor nos salvan.

Vicios desnaturalizados

Son engendrados por nuestro heroísmo.”

 

1922: “The Wast Land” – “La tierra baldía” o la yerma tierra…

A fines de la segunda década del siglo veinte, T. S. Eliot intensificó sus percepciones acerca de los conflictos que acosaban a las sociedades humanas y comenzó a elaborar un desarrollo estético titulado «The Wastland» donde también aparecen las limitaciones y los miedos que acosan al hombre, manifestados en una sucesión de metáforas que en vano se intentarán traducir en otros lenguajes.

Terminó siendo un extenso poema de cuatrocientos treinta y tres versos, que fueron traducidos al castellano por Ángel Flores y editados con el título La tierra baldía.

Esa amarilla niebla que casi borra los nítidos perfiles de las personas, las plantas, los animales y los objetos, propone una toma de conciencia acerca de las brumas que impiden ver la realidad tal cual es: el continuo desplazamiento de los gatos que ambulan de casa en casa, del tapial al patio o la vereda, de la vereda a la calzada y a algún balcón, tiene bastante similitud con el hombre que durante el siglo veinte evidentemente también tendría que vivir a los saltos, buscando su lugar para seguir viviendo tranquilo.

 

(Si Eliot hubiera podido dialogar con Rubén Fernández Gil, seguramente habrían intentado entenderse hablando de algo más que de un dolor de muelas, aunque se expresaran en distintos idiomas…

Rubén suele decir que es estomatólogo -odontólogo…- y trabaja en la consulta porque necesita comer, y que juega al golf porque necesita vivir.  Del invisible arcón de sus refranes, suele regalar al aire matinal, del mediodía o a la penumbra vespertina, está ligera advertencia:

               “Gato tranquilo, busca lugar tranquilo”…

                                                             y por algo será…)

Casi a las cinco de la tarde…

En el poético relato de T. S. Eliot, aparecen algunos ritos de la media tarde -o de cualquier momento-, cuando se impone la necesidad de “comer una tostada y beber té”…  Asoma así la comparación con “el tonto del rey Lear” que no lo era tanto… si se logra interpretar su misterioso universo lúdico y lúdrico. Eliot fiel a su estilo, presentaba sus composiciones artísticas en distintas formas; incluía escasas rimas y prefería los temas literarios y religiosos, oscilaba entre la palabra y la Palabra.

A fines de la segunda década del siglo veinte, necesitó expresar sus conclusiones acerca del compromiso de los críticos y presentó El bosque sagrado, destacando que para tan significativa misión crítica también era imprescindible, analizar el contexto histórico en que había desarrollado determinada obra artística.

Distintas interpretaciones…

La interpretación de cualquier texto se complica, si no se dispone de las imprescindibles señales y clavesAlgo así sucede al leer los poemas de Eliot, porque hay versos henchidos de simbolismos y también frases de anteriores escrituras, conclusiones de distintos autores que habían impresionado su memoria.

Desde el punto de vista de Wladimir Weidle, el poeta aludió a “todo un mundo en escombros” y otra mirada revela que alude a la intrincada red de vanidades tras vanidades que aún suele ser una de las características de diversas comunidades aún en el tercer milenio.  Eliot, mediante ese trabajo logró reflejar sus conmociones internas durante sucesivas jornadas.  A partir de sus vivencias y de sus lecturas, necesitó incluir la Palabra en alguna reiteración del Eclesiastés o evocando las Confesiones de San Agustín-; también rememoró las palabras que lo impactaron al leer algunos argumentos de Dante; Shakespeare, Milton, Verlaine, Herman Hesse…

Sobresale un personaje: Tiresias, un andrógino ciego, visionario…  En el discurso poético se reconoce a todas las mujeres en una sola y los dos sexos, se funden…

 

“I Tiresias, though blind, throbbing between two lives /” “Yo Tiresias, a pesar de la ceguera,

vibrando entre dos vidas /”

 

(Interpretación-traducción– de N.O.A. de F.)

 

Tales percepciones del poeta identifican a Tiresias como “la substancia del poema”, que concluye con una desintegración tras sucesivas derrotas. Se derrumba finalmente el puente de Londres y Eliot necesitó expresar:

“These fragments I have shored against my ruin /»

…y entiendo: Estos fragmentos debí soportar  contra mi ruina­.

También se ha traducido “Estos fragmentos he reunido a pesar de mi ruina”.

Eliot luego reiteró la invocación budista:  «Shantih, shantih, shantih» como alusión directa al Final inexorable

(No ha sido por casualidad que en el Parnaso se haya destacado que “frases tomadas de otros poetas forman juntas el grito de Eliot desesperado por el espectáculo de una tierra yerma, sin esperanzas de salvación”…

Por algo se ha reconocido que “en Tierra baldía, Thomas Stearns Eliot exhibe su vasta cultura y sus conocimientos de lenguas extranjeras, evoca o adapta más de treinta y cinco autores distintos e intercala pasajes en seis idiomas diferentes, incluso en sánscrito.”Parnaso Sopena, p.431

No ha sido por casualidad que desde La Fogata, el 20 de febrero de 2003, el poeta argentino Juan Gelman -exiliado en México-, haya informado que en veinte días -tras la invasión de tropas estadounidenses con apoyo británico y adhesión del gobierno español-, “9600 poetas escribieran 10.817 poemas y comentarios condenando la guerra contra Irak”, como ha sido posible leer en una página virtual de la red de redes…

Tampoco fue por causalidad que Alice Benedict Richmond, desde California haya necesitado expresarse en tres versos de diecisiete sílabas, en otro tradicional haiku -herencia de la literatura japonesa-, tras percibir la magnitud de esa masacre:

“Cráteres de bombas

sangrando oro negro.

El calor».

………………………………………………………………………………

Se impone el respetuoso silencio para meditar…)

Otra mirada sobre esa “tierra yerma”…

La argentina Verónica Abdala desde Buenos Aires ha destacado que en La Tierra baldía, el poeta “sugiere que entre los aspectos más condenables y característicos de la experiencia humana, se destacan el artificio y la vanidad, y la superficialidad que muchas veces define las relaciones humanas, sobre todo entre el hombre y la mujer. Cuestión que le preocupaba particularmente, acaso porque como escribió otro gran poeta, Juan Gelman, Eliot ‘fue el poeta en lengua inglesa más preocupado por el sexo y su misterio’.”  [1]

“The burial of the dead” – “El entierro de los muertos”

 

En el primer movimiento, Eliot necesitó insertar una cita en latín y en griego, enseguida una dedicatoria: “Para Ezra Pound / il miglior fabbro.”

 

“Abril, el más cruel entre los meses,

Hace que nazcan lilas en la tierra muerta,

Mezcla recuerdos y deseos, sacude

Raíces perezosas con lluvias primaverales.  [1]

El invierno nos puso los abrigos, cubriendo

La tierra de olvidada nieve, alimentando

Una mezquina vida con inertes tubérculos.”

Nos sorprendió el verano, soltándose sobre el Stambergersee

Con un chubasco; hicimos alto en la columnata

Y cruzamos después el Hofgarten, bañados por el sol.

Y tomamos café y platicamos una hora.

Bin gar keine Russin, stamm’ aus Litauen, echt deutsch.

Y de niños, de paso por la casa de mi primo el archiduque,

Él me sacó en trineo.

Yo tenía miedo. Me dijo: Marie,

Marie, cógete bien. Y nos deslizamos cuesta abajo.

En las montañas, allá sí que nos sentimos libres.

Leo casi la noche entera y en el invierno parto hacia el sur.

¿Cuáles son las raíces que prenden, qué ramas

Brotan de este cascajo? Hijo de hombre,

Tú no puedes decirlo, ni imaginarlo, pues sólo conoces

Un cúmulo de imágenes donde reverbera el sol.

El árbol seco no cobija, el grillo canta monocorde,

La estéril piedra no mana agua. Sólo

Hay sombra bajo esta roca roja.

(Ven a la sombra de esta roca roja),

Voy a enseñarte algo diferente

De tu sombra que marcha a largos pasos contigo en la mañana,

O de tu sombra, irguiéndose al ocaso para ir a tu encuentro;

y a enseñarte lo que es el miedo en un puñado de polvo.

Frisch weht der Wind

Der Heimat zu

Mein lrisch Kind,

Wo weilest du?

“Me diste los primeros jacintos hace un año;

“Me llamaban la niña de los jacintos.”

-Pero cuando volvimos, ya tarde, del jardín de los jacintos,

Tus brazos tan cargados, tu cabello tan húmedo, no pude

Hablar, y se apagaron mis ojos, no estaba

Vivo ni muerto, no sabía nada

Mientras veía el corazón de la luz, el silencio.

Oed’ und leer das Meer.

Madame Sosostris, famosa clarividente,

Pescó un resfriado, sin embargo.

Se le considera la mujer más sabia de Europa

Con un vicioso mazo de naipes. Aquí, dijo ella,

Está su carta, el Marinero fenicio que murió ahogado.

(Estas perlas fueron sus ojos. ¡Fíjese!)

Aquí está Belladonna, la Dama de las Rocas,

La dama de los sinos.

Aquí está el hombre de los tres bastos, y luego la Rueda,

Aquí el mercader tuerto, y esta carta en blanco

Es algo que lleva a cuestas

Y no puedo mirarlo. No encuentro

Al Colgado. Tema la muerte por agua.

Veo una muchedumbre formando corro.

Gracias. Si ve usted a la estimadísima señora Equitone,

Dígale que yo misma le llevaré el horóscopo:

Hay que ser tan precavida en estos días.

Ciudad irreal,

Bajo la parda niebla de una alborada de invierno,

Tal multitud cruzaba por el Puente de Londres,

Que nunca hubiera yo creído que fueran tantos los que la muerte se

llevara.

A veces emitían breves suspiros,

Cada quien con la vista clavada delante de sus pies.

Cuesta arriba, luego calle King William abajo,

Hacia donde Saint Mary Woolnoth santifica las horas

Con un sonido al final de la novena campanada.

Allí vi a un conocido, y lo detuve gritándole: “iStetson!”

¡Tú, que estabas conmigo en los barcos de Mylae!

¿Aquel cadáver que plantaste el año pasado en tu jardín,

Ha comenzado a retoñar? ¿Florecerá este año?

¿O la inesperada escarcha remueve su arriate?

Oh, aparta de allí al perro, que es amigo de los hombres,

Pues si no, ¡lo desenterrará de nuevo con sus uñas!

¡Tú, hypocryte lecteur! -mon sembable- mon frère!”

III. EL SERMÓN DEL FUEGO

El pabellón del río fue plegado, los últimos dedos de las hojas

Quieren asirse y se hunden en la mojada orilla. El viento

Cruza la tierra parda, sin ser oído. Las ninfas se marcharon.

Manso Támesis, boga quedamente hasta que termine mi canción.

El río no transporta botellas vacías, papeles de bocadillos,

Pañoletas de seda, cajas de cartón, colillas de cigarro

Ni otras huellas de noches de verano. Las ninfas se marcharon.

Y sus amigos, golfos herederos de administradores municipales,

Se fueron sin dejar sus nuevos domicilios.

A la orilla del Leman me senté y lloré…

Manso Támesis, boga quedamente hasta que termine mi canción,

Manso Támesis, boga quedamente, pues yo no hablo mucho ni en voz alta.

Mas, a mi espalda, en el gélido golpe del viento escucho

Crujidos de esqueletos y risas ahogadas.

Una rata ha cruzado furtivamente la hierba

Arrastrando su panza viscosa por la orilla

Mientras yo pescaba en el estancado canal.

En una noche de invemada detrás de la fábrica de gas,

Pensando en el naufragio de mi hermano rey

Y en el fallecimiento anterior de mi padre rey.

Blancos cuerpos desnudos sobre la tierra baja, apenas húmeda.

Y huesos abandonados en un mezquino desván de techo bajo,

Tan sólo removidos por el paso de las ratas, año tras año.

Sin embargo, a mi espalda, a veces oigo

Bocinas y autos, que han de conducir a Sweeney

En primavera adonde vive la señora Porter

Oh, la luna lucía tan radiante sobre la señora Porter

y sobre su hija.

Ellas se lavan los pies con agua de seltz

Et O ces voix d’enfants, chantant dans la coupole!

Twit twit twit

Jug jug jug jug jug jug

forzada tan violentamente.

Tereo

Ciudad irreal,

Bajo la parda niebla de un mediodía de invierno

El señor Eugenides, comerciante de Esmima

Sin afeitar, la bolsa llena de pasas de Corinto

        1. a. g. Londres: documentos a la vista,

Me invitó ern francés demótico

A merendar en el Hotel Cannon Street

Y a pasarme el fin de semana en el Metropole.

A la hora de color violeta, cuando del escritorio alzamos los ojos y

                                 las espaldas,

Cuando la humana máquina aguarda

Cual taxímetro en marcha,

Yo, Tiresias, aunque ciego, palpitando entre dos vidas,

Anciano de arrugadas tetas, puedo ver

A la hora de color violeta, a esa hora de la tarde que nos conduce

Camino del hogar y la mar trae de vuelta a su casa al marinero;

Y la mecanógrafa, para tomar el té de la tarde, recoge las sobras del

desayuno, calienta

La estufa y prepara su comida a base de conservas.

Fuera de la ventana, puestas peligrosamente a secar, cuelgan

Sus prendas íntimas, manoseadas por los últimos rayos del sol.

Sobre el sofá (que le sirve de cama por la noche) se amontonan

Medias, chinelas, chambras y sostenes.

Yo, Tiresias, anciano de arrugadas tetas de mujer

Vi la escena y predije lo demás.-

Yo también esperaba la ansiada visita.

Él, joven carbuncoso, llega,

Secretario de un agente de una pequeña firma comercial, de mirada

imprudente,

Uno de esos bribones en quien el descaro se ensarta

Como chistera en la cabeza de un millonario de Bradford.

La hora es favorable, y tal como él se figurara,

La cena ha terminado, ella está aburrida y cansada,

Él trata de envolverla con caricias

Que, si bien consentidas, no son deseadas,

animoso y resuelto, él la asalta sin demora;

Sus manos acuciosas no encuentran resistencia alguna,

Su vanidad no necesita respuesta,

Y hasta recibe con agrado tal indiferencia.

(Y yo, Tiresias, he permitido todo

Lo que ocurriera en este mismo sofá o lecho;

Yo, que estuve sentado bajo los muros de Tebas

Y anduve entre lo más bajo de los muertos).

Le da un condescendiente beso postrero

Y baja a tientas por la escalera sin luces…

Ella se vuelve y contempla un instante al espejo.

Sin preocuparse de su amante que se ha ido;

Su cerebro formula a medias un vago pensamiento;

“Bueno, asunto arreglado, me alegra que haya pasado ya”.

Cuando una mujer hermosa se entrega a tales locuras

Y vuelve a pasearse, a solas, por su cuarto,

Se alisa los cabellos de un modo automático

Y pone un disco en el gramófono.

“Esta música me condujo despaciosamente sobre las aguas”.

Y a lo largo del Strand, calle Reina Victoria arriba.

Oh, ciudad, ciudad, a veces puedo escuchar

Al pie de un bar de la Lower Thames Street,

La dulce queja de una mandolina

El barullo y la charla que sale del interior

Donde los vendedores de pescado descansan al mediodía; donde los

muros
De Magnus Martyr confinan

Inexplicable esplendor de oro y jónica blancura.

El río suda

Aceite y brea

Los lanchones derivan

Con la marea

Rojos velámenes

Desplegados

A sotavento, se columpian en las baritas.

Las barcazas

Transportan leños

En dirección de Greenwich

Más allá de Isle of Dogs.

Weialala leía

Wallala leialala

Elizabeth y Leicester

Al compás de los remos

La popa era

Casco dorado

Dorado y rojo

La efervescente oleada

Rompió en las dos orillas

El viento del sudoeste

Aguas abajo arrastró

El doblar de campanas

De las torres blancas

Wialala leia

Wallala leialala

“Tranvías y polvorientos árboles.

Highbury me vio nacer. Richmond y Kew

Me sepultaron. Al pasar por Richmond alcé las rodillas,

Acostada boca arriba en el fondo de un estrecho bote”.

“Mis pies están en Moorgate, mi corazón

bajo mis pies. Después de lo ocurrido

Él lloró. Me prometió ‘empezar de nuevo’

No dije nada, ¿Por qué habría de tomárselo a mal?

“Sobre Margate Sand.

Nada puedo asociar

con nada.

Rotas uñas de manos sucias.

Mi gente, tan humilde,

No espera nada”.

la la

Luego vine a Cartago

Anhelando tan viva vivamente

Oh, Señor, tú tiras de mí

Oh, Señor, tú me halas

Anhelando muy vivamente.

(Traducción: José Luis Rivas.)

Aproximación a “La tierra baldía” en el siglo XXI…

El español J. M. Valverde, tradujo de The burial of the dead -“El entierro de los muertos”-, con otra sonoridad:

«Abril es el mes más cruel

criando lilas de la tierra muerta, mezclando

memoria y deseo, removiendo

turbias raíces con lluvia de Primavera»

Opiniones desde páginas virtuales…

En las páginas virtuales de internet, refiriéndose a Eliot se trasmite: “En 1922 escribe su obra maestra: «The Waste Land». En ella se perciben residuos de este desprecio por el «hombre medio», así como la aversión al amor físico que caracterizan su obra, y su vida. Cada poema cuenta de alguna manera una historia. Encuentros tristes de personas vacías alternan con personajes repetidos: la adivinadora, el marinero fenicio muerto y perdido en un interminable naufragio …”

“La obra en muchos aspectos es oscura y difícil. El propio autor nos obsequia con algunas interpretaciones y claves, que son innecesarias y frecuentemente pedantes. /…/ No recomiendo a nadie que las lea, la clave del poema está en su poderosa belleza, en sus imágenes, en la poesía pura que lo conforma. no hacen falta interpretaciones.”

“Como su poema prefigura, fue tan estéril como esa tierra baldía.

Nunca pudo tener hijos.”

“The Criterion”

Thomas Eliot en 1922 necesitó fundar The Criterion y durante diecisiete años aportó datos y conclusiones de significativo valor para los escritores contemporáneos.

1925: «The Hollow Men» -“Los Hombre vacíos»

Tras su conversión al cristianismo y la decisión de adoptar la ciudadanía inglesa, T. S. Eliot publicó otro libro con el poema titulado Los hombres vacíos…- y desde el epígrafe deja señales insoslayables: «Mistah Kurtz… he dead» –Mistah Kurtz ha muerto” –una reiteración de lo expresado por Joseph Conrad en “el corazón de las Tinieblas.  Si Eliot no aporta sus claves, la interpretación de sus poemas no alcanza la dimensión estética y ética que él imaginó, sintió e intentó esbozar en su literatura.

Thomas –Tom, como lo nombraban sus amigos, entre ellos Grouch, necesitó escribir:

«We are the follow men Somos nosotros los admiradores
We are the stuffed men Somos hombres materialistas
Learning together Juntos aprendiendo
Headpiece filled with Straw. Alas! Yelmos llenos de hojarasca ¡Ay!
Our dried voices, when Áridas nuestras voces , cuando
We whisper together Juntos murmuramos
Are quiet and meaningless». Tranquilos e insignificantes.

 

(Así lo he sentido con los limitados conocimientos idiomáticos y en internet se difunde otra aproximación al significantesignificado– emitido por el poeta Eliot: “Somos los hombre vacuos – De viento y hojarasca rellenados. – Cual un haz de muñecos desatado! – Al balbucir juntos son quietas nuestras secas voces – Y carecen de significado.”  En cualquiera circunstancia, los conocimientos y las intuiciones se complementan…)

Eliot en la Editorial Faber & Faber…

A mediados de la década del ’20, Eliot dirigió la editorial Faber and Faber y desde ese lugar logró fortalecer algunos vínculos con poetas ingleses.  Día a día fue madurando su propósito de gestionar el otorgamiento de la ciudadanía británica y lo logró dos años después de su ingreso en aquella empresa comercial.

1926: “Sweeney entre los ruiseñores”

 

Se ha destacado que el fragmento de ese poema publicado en 1926-1927, intenta expresar las vivencias del antihéroe moderno: “el contraste entre la imaginación y la realidad con todo éxito, en toda su trágica intensidad” y aparece en forma de libro con el título Sweeney Agonistes.

“Introduce temas que reaparecerán en Tierra baldía, pasajes como:

 ‘Soñáis que os despertáis a las siete,

en medio de la bruma y la humedad, en el alba y las tinieblas

y esperáis que alguien llame a la puerta y haga girar la llave,

porque sabéis que el verdugo os espera

y quizás estéis vivos, quizás estéis muertos’.”

Y… “el coro final se compone de diversos protagonistas individualizados que necesitan unirse para comprender el mensaje lacónico de Sweeney:

‘La vida es la muerte…

nacimiento, copulación y muerte, eso es todo…

Nada más.”

Desde distintos puntos de vista, se ha aludido a las poéticas confesiones de Eliot y el crítico literario Stephen Spender ha afirmado que La tierra baldía “es una especie de poema póstumo escrito para una civilización muerta”… ¡debilitada, extenuada, desfallecida!…

Más… acerca de “La tierra baldía”.

Una mirada hacia la historia de la Historia permite imaginar las características de la sociedad que conoció -e integró- Thomas Eliot.  En esa dirección, se ha expresado que en aquella época, “la humanidad y su cultura se pervertían en una vorágine lujuriosa y banal e infructuosa de vanagloria y destrucción. Es cuando aparece como un caballero quijotesco para salvaguardar el ideal o como un cruzado fervoroso por recuperar el santo Grial con la sangre de la regeneración. Eliot tuvo la lucidez de revolucionar la palabra poética para lograr, con fiereza e impiedad, desbaratar los conceptos anquilosados de una civilización en decadencia. Y el caballero de la irónica y sarcástica armadura al circundar la geografía humana y no encontrar la floresta, trazó el pavoroso retrato de una tierra baldía, de una conciencia colectiva eriaza. Y en ese reino devastado sobre cuya lápida inscribió este epitafio: Y el viento dirá: ‘Aquí yace gente decente y sin Dios; / su único monumento es el camino de asfalto / y un centenar de pelotas de golf perdidas’.”

1930: “Miércoles de ceniza”

Con el título Miércoles de ceniza, Eliot difundió un extenso poema religioso publicado ya en 1927 –Salutación– donde empezó a revelar sus convicciones religiosas tras convertirse al cristianismo y sus tendencias políticas, declarándose monárquico.  El poema es impersonal y el poeta logra conducir por un itinerario místico hasta producir el misterioso encuentro con  Dios y la Virgen, y la Iglesia en contraste con el mundo sensorial y visible, cargado de incertidumbres y ruinas.

……………………………………………………………………………………………………….

¿Qué mares, qué riberas, qué rocas grises y qué islas,

qué susurrantes aguas en la proa

y fragancia de pino y el zorzal gorjeando a través de la niebla.

Qué imágenes retornan

¡oh hija mía!

Los que aguzan el colmillo del perro con voluntad del colibrí con voluntad de muerte,

los que se sienten en el prostíbulo de la complacencia con voluntad de

muerte,

los que sufren el deliquio de los animales con voluntad de

muerte

se han tornado inmateriales y el viaje ha disipado su sustancia,

el vaho del pinar y el silvestre gorjeo de la niebla,

la gracia los ha disuelto y cambiado de sitio.

Qué faz, qué faz es esta menos clara y más clara,

este punto en las venas menos fuerte y fortísimo.

¿Es propio o es ajeno y en prenda sólo dado?…”

 

(Al comenzar la tercera década, T. S. Eliot elaboró poemas para lectores infantiles que se adaptaron al teatro musical…)

1932: Conferencias y tés… en Harvard.

Como suele suceder, T.S. Eliot regresó en 1932 a su país natal y  dictó clases en la Universidad donde completó sus primeros estudios académicos.  Esa circunstancia fue propicia para incorporar más anécdotas en su interesante trayectoria.  Como lo impone la tradición sajona, cuentan que en varias oportunidades el poeta y ensayista invitó a los profesores de Harvard a compartir momentos de ocio creador y a beber té

Se ha reiterado que tras aquellas experiencias confesaba: «Tengo la tendencia a quedarme dormido en los sillones de los clubes, pero creo que mi cerebro funciona tan bien como siempre, después de haber bebido mi té».

1934 : “La roca”

Eliot logró editar La roca” ¿¿¿

 

1935: “Murder in the Cathedral” – “Asesinato en la Catedral”

Eliot escribió ese drama en verso y lo tituló “Murder in the Catedral” -luego traducido como “Asesinato” o “Crimen en la Catedral”-, conmovido por la tragedia vivida por “el Primado de Inglaterra”, el arzobispo de Canterbury Thomas Becket, asesinado por los caballeros del Rey en 1170, cumpliendo así sus órdenes.  Ese libro fue editado en 1943.

Eliot, prefirió escribir en prosa el sermón del Arzobispo pronunciado durante la misa matinal de aquella Navidad que se transformó en día de mortandad

El poeta utilizó un lenguaje de fácil comprensión . La obra fue dirigida por primera vez por Martin Browne y durante tres años -según se ha reiterado- se concretaron aproximadamente ochocientas funciones en Gran Bretaña; luego fue traducida al francés y después a otros idiomas.

Selección de Poemas

Entre los poemas escritos desde 1909 hasta 1935, fueron elegidos los que integrarían la Selección de Poemas que se editó en aquel tiempo y al final está reconocido que en esa obra está implícita la confluencia de lo leído sobre “la leyenda del Santo Grial” escrito por Miss Jessie L. Weston -titulado «From Ritual to Romance» – Del Ritual al Romance).

1936: encuentro con Muñoz Rojas…

Meses antes del inicio de la guerra civil española, José Antonio Muñoz Rojas (n.en Antequera, Málaga, el 9 de octubre de 1909, abogado), viajó a “Cambridge y visitó en su residencia londinense de Russel Square a T. S. Eliot”; luego regresó a su tierra natal y fue detenido junto a su hermano, logró por algunas amistades que lo liberaran y volvió a Cambridge donde fue nombrado “lector español”  y dedicó su tiempo libre al estudio de la poesía inglesa, incluyendo las obras de Juan Ramón Jiménez, de Vicente Aleixandre, de su amigo Eliot. [2]

(Es interesante reiterar algunas conclusiones de Muñoz Rojas:

 “Nadie sabe las palabras

que caben en un silencio.

Silencio: lengua del alma.”)

1939: “Reunión de familia”

Este libro relata historias familiares que suelen ser semejantes aún en la actualidad. Lady Monchensey es una mujer autoritaria, viuda, necesita festejar su cumpleaños reuniendo a toda su familia. Controla a sus hermanas –Ivy, Violet y Aghata- y convive con Mary, persona de escasos recursos que “Amy” ha amparado con el propósito de lograr que sea la segunda esposa de Harry, su hijo mayor, quien después de siete años de matrimonio perdió a su mujer en altamar.  Hay otros personajes –cuñados de Lady Monchensey-, personas agregadas a la familia, “un Coro y las mudas Euménides, las deidades Esquilianas del remordimiento”.

  1. S. Eliot, esbozó así aquel conflicto familiar:

 «You are all people

to whom has happened, at most a continual impact

of external events. You have gone through life in sleep.

Never woken to the nightmare. I tell you life would be

[unendurable

If you were wide awake. You do not know

The noxious smell untraceable in the drains,

Inaccesible to the plumbers, that has its hour of the night;

[you do not know

the unspoken voice of sorrow in the ancient bedroom

at three o’clock in the morning. I am not speaking

of my own experience, but trying to give you

coparisons in amore familiar medium. I am the old

[house

Whith the noxious smell and the sorrow before morning,

In wich all past is present, all degradation

Is unredeemable»

 

Traducido al castellano, desde la interpretación de un lector, es algo así

“Vosotros sois seres a los que nada ha ocurrido, excepto el choque incesante de los acontecimientos exteriores. Habéis pasado la vida en un sueño. Ninguna pesadilla os despierta. Os digo que la vida sería intolerable si despertaseis. Vosotros no conocéis el pernicioso olor que no emana de ninguna alcantarilla, inaccesible a los plomeros y que sólo es percibido de noche; Vosotros no conocéis la voz muda del dolor en la habitación en ruinas a las tres de la madrugada, No hablo de mi propia experiencia, sino que intento daros comparaciones que os sean familiares. Yo soy la vieja casa en que todo pasado está presente y ninguna degradación es redimible.”

Luego el discurso se desarrolla entre los vericuetos de la realidad y la ficción, Harry confiesa que él arrojó a su esposa al mar y ninguno le cree.  Imaginan que está delirando por su excesivo cansancio pero hay un antecedente que inquieta a su tía Ágata porque ella sabe que cuando su cuñado la amó, había pensado en matarla para poder casarse con ella, pero demostró no ser un asesino porque murió antes que Amy.

Después, Harry necesitó retornar a su Camino y seguir buscando lo que es difícil hallar en un lugar determinado porque los hombres somos seres limitados, temporales…

Como suele suceder, esa ausencia debilitó las ganas de vivir de su madre y siguiendo la tradición se creyó que fue la causa de su muerte. Quedan las dos hermanas con la posibilidad de obrar sin excesivos controles y es como si por arte de magia se hubiera desatado el nudo gordiano de la obsesiva opresión y dependencia

Eliot entre los gatos y las familias…

En 1939, T. S. Eliot publicó El libro práctico de los gatos y terminó de revisar sus ensayos publicados al año siguiente con el título La idea de una sociedad cristiana.

A fines de aquella década, el poeta ya considerado británico, era reconocido con honores en la estadounidense Universidad de Harvad donde había sido discípulo de Bertrand Russell el destacado escritor que recibió el “Premio Nobel de Literatura” en 1950 y es oportuno tener en cuenta, que también había estudiado con Henri Bergson en París, otro galardonado con ese Premio en 1927.

1940: “East Coker” – Adicto oriental…

Tras sucesivas buscas ha sido posible leer este fragmento y será interesante compartir tal traducción:

«En mi comienzo está mi fin, en sucesión se levantan y caen casas, se desmoronan, se extienden, se las retira, se las destruye, se las restaura, o en su lugar hay un campo abierto, o una fábrica, o una circunvalación. Vieja piedra para edificio nuevo, vieja madera para hogueras nuevas, viejas hogueras para cenizas, y cenizas para la tierra, que ya es carne, piel y heces, hueso de hombre y animal, tallo y hoja de maíz. Las casas viven y mueren, hay un tiempo para construir y un tiempo para vivir y engendrar, y un tiempo para que el viento rompa el cristal desprendido y agite las tablas del suelo donde trota el ratón de campo, y agite el tapiz hecho jirones con un lema silencioso. En mi comienzo está mi fin. Ahora cae la luz a través del campo abierto, dejando la hundida vereda tapada con ramas, oscura en la tarde, donde uno se apoya contra un lado cuando pasa un carro, y la vereda hundida insiste en la dirección hacia la aldea, hipnotizada en el calor eléctrico. En cálida neblina, la sofocante luz es absorbida, no refractada, por piedra gris, las dalias duermen en el silencio vacío, esperad el búho tempranero (…)

Llevando el compás, marcando el ritmo en su danzar, como en su vivir en las estaciones vivas, el tiempo de las estaciones y las constelaciones, el tiempo de ordeñar y el tiempo de segar, el tiempo de aparearse hombre y mujer y el de los animales, pies subiendo y bajado, comiendo y bebiendo, estiércol y muerte. La aurora apunta, y otro día se prepara para el calor y el silencio. Mar adentro el viento de la aurora se arruga y resbala. Estoy aquí, o allí, o en otro lugar, en mi comienzo.»

 

1942: “Four Quartets” – “Cuatro Cuartetos”

A partir de 1935 y durante siete años, T.S. Eliot escribió Cuatro Cuartetos titulados: Burns Norton, East Coker, The Dry  Salvages y Little Gidding. Intentó desarrollar algunas de sus conclusiones en torno al universo del consciente y del subconsciente. Aparecen en esa composición los cuatro elementos simbólicos: tierra, agua, fuego, aire…  Si se tiene la posibilidad de leer distintas traducciones, se comprenderá que esa obra ha sido interpretada de diferentes maneras, como sucede con la música, con la observación de un cuadro, con la mayoría de los poemas que no son tan lineales y para lograr una plena identificación exigen una elevación hacia planos donde intuiciones y sugerencias juegan roles significativos.

«The dry Salvages» – «Little Gidding»

Suele suceder que los autores necesiten describir el lugar donde han vivido y convivido; aun con matices ficticios con frecuencia relatan sus experiencias personales –reales u oníricas- y los hechos protagonizados por personalidades destacadas en la historia de la Historia de la Humanidad o vivencias de vecinos y amigos.  Así es como se ha reiterado que Eliot describió “una mansión en Gloucestershire donde él vivió por un tiempo” y que “East Coker”… “es una aldea, una aldea de Somerset que fue hogar de Sir Thomas Elyot y de sus antepasados ingleses. The Dry Salvages, que algunos traductores denominan en castellano «Los Salvamentos en seco», es un grupo de rocas situada en Cape Ann, Massachusetts, en los Estados unidos; y Little Gidding fue una comunidad religiosa establecida por Nicholas Farrar.”

Símbolos en los “Cuatro Cuartetos”…

Entre las diferentes interpretaciones –traducciones­- que se han logrado a partir de los poemas de Thomas Eliot, se ha reiterado -incluso por internet- que “Patrick Dudgeon lo ha hecho como sigue: «Fuego, Agua, Tierra. Cada persona representa el Fuego; Burnt Norton, el Aire; East Coker, cuyo escenario es la casa señorial y el pueblo, la tierra; The dry Salvages, donde la escena es el río y el mar, el Agua.  Eliot coloca al final, muy apropiadamente, el Fuego, primero y más importante de los elementos en la filosofía de Heráclito.”  En tales desarrollos, cuando Eliot alude al Polvo se interpreta que: “Polvo es todo lo que queda del hombre y de sus obras. El Agua es la muerte de la Tierra.  La Tierra del Agua, el Fuego del Agua».  Abarcar esos simbolismos exige una fértil pausa.  Se ha reiterado también que el eje temático en los Cuatro Cuartetos es “el Tiempo, no el tiempo humano de los relojes y del acontecer histórico, sino el tiempo como lo comprende el místico, ‘en el punto muerto en torno al cual gira el mundo’.”

Será interesante leer este fragmento y tal vez, transformar tal traducción en concordancia con íntimas percepciones

«Time present and time past El tiempo presente y el tiempo pasado
are both perhaps present in time future, están ambos quizás presentes en el futuro
and time future contained in time past. y el futuro está contenido en el pasado.
If all time is unredeemable. Si todo tiempo es irredimible
What might have benn is an anstraction Que por fuerza sería una abstracción
Reamaining a perpetual possibility Subsiste una perpetua posibilidad
Only in the world of speculation». Sólo en el mundo de la especulación.

 

En aquellas circunstancias, la humanidad soportaba las consecuencias de desastres naturales y de conflictos internacionales.   Ahora se ven las batallas desde las pantallas de la televisión, pero la distancia impide percibir con la intensidad que se logra cuando quien relata ha estado viviendo en el escenario de los hechos.  Eliot sintió cómo bombardeaban la isla, como se derrumbaba una parte de Londres…  Necesitó expresarlo y desde entonces, han aparecido uno tras otro, incontables traductores.

Eliot en un verso nombra a la Paloma –y se puede intuir que sería la paloma de la paz, el ave que con un laurel en el pico anunciaba el fin de la tormenta…   Intuyo que el poeta reconocía a… “el Pacifista” que se debate “entre vanidad de vanidades”, entre “intereses creados”

Leamos… hasta dónde podamos…

 

«The Dove descending breaks the air Rasga el aire el Pacifista al descender
With flames of incandescent terror Inflamado de terror incandescente
Of wich the tongues declare Cual lenguas que declaran
The one discharge from sin and error. Una descarga lejana de pecado y error.
The only hope, or else despeair La única esperanza, sino desesperación
Lies in the choice of pyre or pyre Tiende a elegir la hoguera del sacrificio
To be redeemed from fire by fire Ser redimidos desde el fuego por el fuego.

 

Esa canción de amor… induce a pensar que en aquellas circunstancias, el autor interpretó desde su punto de vista, la manera de vivir del hombre que habitaba en las ciudades e intuyó que carecía de propósitos porque se ataba a banalidades. En su itinerario casi mágico, aparece el hombre de la calle con sus rutinas -con sus defectos, aun los físicos, mencionados no por falta de misericordia sino como un oportuno llamado de atención-  y se refleja su tránsito por lugares donde está instalado el tedio, el aburrimiento como consecuencia de una excesiva malicia o malevolencia.

Más “fragmentos” de los “Cuatro cuartetos”…

 

 “El tiempo y la campana han enterrado al día.

La negra nube arrebata el sol.

¿Se tornará hacia nosotros el girasol, la clemátide

se doblará, inclinándose hacia nosotros; se asirán, se adherirán

las ramas y los zarcillos?

¿Los gélidos

Dedos del tejo se ensortijan curvándose

Hacia nosotros. Después que el ala del martín-pescador

Ha respondido luz a la luz, y ha callado, la luz está inmóvil

En el inmóvil punto del mundo que gira.”

        1. S. Eliot; «Burnt Norton» (en Cuatro cuartetos)

…………………………………………………………………………………………………..

Explorar la matriz, o la tumba, o los sueños; todo eso son usuales

Pasatiempos y drogas, y rasgos de los periódicos;

Y siempre lo serán, especialmente algunos

Cuando hay naciones en peligro y perplejidad

En las Costas de Asia, ya en el Edgware Road.

La curiosidad del hombre escudriña pasado y futuro

Y se adhiere a esa dimensión. Pero aprehender

El punto de intersección de lo intemporal

Con el tiempo, es ocupación para un santo—

Y tampoco ocupación, sino algo que se da y se toma

En la muerte de una vida pasada toda en amor.

Ardor, altruismo y autorrenuncia.

Para la mayoría de nosotros sólo existe el inesperado

Momento, el momento en y fuera del tiempo,

El acceso de distracción, perdido en un dardo de luz solar,

El invisible tornillo silvestre, o el relámpago invernal,

O la catarata, o la música tan profundamente escuchada

Que no se la escucha en absoluto, sino que vosotros sois la música

Mientras la música dura. Sólo hay insinuaciones y conjeturas,

Insinuaciones seguidas de conjeturas; y el resto

Es oración, acatamiento, disciplina, pensamiento y acción.”

                                             (T.S.Eliot, “The Dry Salvages», fragmento.)

Sabido es que distintos traductores logran textos semejantes o dispares, cada uno con su valor estético.  El escritor español Luis Ruiz de Gopegni es un experto en astronáutica y en su libro Hombres en el espacio ha incluido este poético fragmento:

“No cesaremos en la exploración

y  el fin de todo nuestro explorar

será llegar a donde empezamos

y conocer el lugar por primera vez

a través de la desconocida, recordada puerta

cuando lo último que queda en la Tierra por descubrir

sea lo que era al principio.”

(Fragmento de “Cuartos Cuartetos”…)

Otras traducciones de “Cuatro Cuartetos”…
“Y todo lo que hayamos conquistado
con strenght y submission, todo habrá sido descubierto.
Una o dos veces, o severalveces, bvay men whon one
Cannot hope To emulate pero no hay competición.
Hay sólo figt to recover whith has been lost
Y encontrar y lost de nuevo, y de nuevo: y ahora bajo condiciones
Tan seem imprpitious.”
T.S. Eliot. Four Quartets

 

……………………………………………………………………………………………

“Al girar hacia tierra, y la gaviota.

Y bajo la opresión de la niebla silenciosa

El redoble de la campana, tañida sin prisa

Por la ola que se hincha allá en el fondo,

Mide el tiempo, no nuestro tiempo

Sino un tiempo más antiguo

Que el tiempo de los cronómetros, más antiguo

Que el tiempo medido por las mujeres que en su angustia y su

                                                                                            insomnio

Calculan el porvenir, tratan de destejer, devanar, desenredar

Y remendar pasado y futuro,

Entre la medianoche y el amanecer,

Cuando es engaño ya todo el pasado,

El futuro no tiene porvenir,

Antes de que amanezca y cambien la guardia,

Cuando el tiempo se detiene,

Y el tiempo no acaba nunca,

Y la ola que se hincha en el fondo

Y es y era desde el principio

Hace sonar la campana.

                                             Traducción: José Emilio Pacheco.

 

(Esta información está disponible en sitios de la biblioteca virtual.  Los fragmentos pertenecen a “Burnt Norton» y «The Dry Salvages» en Four Quartets, copyright 1943 de T. S. Eliot, reproducido con el permiso de Harcourt Brace Jovanovich, Inc., y Faber y Faber Ltd.” Y aquí como un homenaje al autor y con fines de divulgación cultural. Consta que para los poemas de Eliot se ha utilizado la traducción de Vicente Gaos pertinente al libro titulado “T. S. Eliot – Cuatro cuartetos, edición Rialp de Madrid, 1951 (Adonais), autorizada por T. S. Eliot.”  Aquí se repite la información sólo con fines de divulgación cultural, como herramienta didáctica para la educación permanente por el arte de vivir y convivir…)

Mirada actualizada sobre “Usk”… el poema de Eliot.

Martín F. Yriart (nacido en Buenos Aires en 1942) es profesor de Periodismo Literario y director del Laboratorio de Medios de la EDLDM -Escuela de Letras de Madrid).  El 7 de agosto de 2003 publicó una nota acerca de “el enigma” pertinente a los versos escritos por el talentoso e irónico Eliot hace siete décadas:

“A 70 años de la publicación de Usk, el hermético poema de T.S. Eliot, que ahora ha dado la vuelta al mundo, con motivo de la afirmación de un profesor de literatura retirado de que finalmente ha descifrado su verdadero significado, cabe preguntarse cuál era la intención estética de su autor, al construir un enigma impenetrable, si es que es eso lo que se propuso. Reitera que “Philip Edwards, profesor retirado de Literatura Inglesa de la Universidad de Liverpool, en una entrevista con el diario británico The Guardian (que reproducimos en otro lugar de Actualidad Literaria) afirma que Usk, el poema de Eliot considerado indescifrable por sus críticos, en realidad se refiere a The White Hart Inn, un pub del pueblecito galés que dio nombre al poema, y que Eliot visitó en 1947.”  Señala luego que “Eliot jugó con la polisemia al nombrar al pub sin decirnos que lo estaba haciendo. Los nombres de las cosas no son las cosas mismas, como apuntaría Ferdinand de Saussure. El ciervo blanco es un inaprensible animal fabuloso de la mitología galesa.”

Admite que “…cabe pensar que el poeta es deliberadamente hermético, para demostrar al lector dónde está el límite de la individualidad; hasta dónde puede pretender el lector penetrar en los significados que el poema tiene para su autor; hasta dónde debe el lector realizar el trabajo de crear por sí mismo los significados que caben en el poema.”  Desde su punto de vista, “Eliot fue un poeta escéptico e irónico, y profundamente preocupado por los valores de la estética literaria, lo que emerge claramente del catálogo de la editorial Faber & Faber, en los años en que él la dirigió, y de sus ensayos sobre crítica y poética. Pero también fue poco inclinado a facilitar a sus lectores la identificación de las innumerables alusiones y referencias, eruditas y no eruditas, incluidas en sus poemas.

Algunos de sus contemporáneos lo calificaron de «elitista» o «snob», y lo acusaron de menospreciar a sus lectores, escribiendo una literatura deliberadamente «difícil» para demostrar su superioridad intelectual. Este es un cargo insostenible, si se leen sus obras de teatro (The Cocktail Party, por ejemplo) o se tiene en cuenta su actividad como crítico”…

Reitera otra traducción de aquel poema:

“No rompas bruscamente la rama, ni

Esperes hallar

El ciervo blanco detrás de la fuente blanca.

Mira de soslayo, no por lance, no desveles

Antiguos encantamientos. Deja entonces dormir.

‘Moja suavemente, pero no muy hondo’,

Alza tus ojos,

Donde los caminos bajan y suben los caminos

Busca sólo allí

Donde la luz gris se encuentra con el aire verde

La capilla del ermitaño, la plegaria del peregrino.”

Quien concretó esas valoraciones, finalmente escribió:  “Por mi parte, me animo a sugerir que la rama que menciona Eliot en el primer verso, es el aureus ramus del Canto V de la Eneida, con la que Virgilio simboliza la inspiración divina que guiará a Eneas, en su largo peregrinaje, hasta encontrar el sitio establecido por el destino para la fundación de Roma.”

(Intuyo que ese dilema estético no ha sido resuelto…)

1948: “Premio Nobel de Literatura”

Eliot fue declarado Doctor Honoris Causa en las Universidades de Harward y Princeton en 1948, ya había recibido diecisiete premios en distintos  países y ese año se difundieron sus Notas para la definición de la Cultura

En Estocolmo -en 1948-, le otorgaron el Premio Nobel de Literatura y se ha reiterado que tal distinción no sorprendió a quienes reconocían su trayectoria: era uno de los mejores poetas de aquel tiempo y durante la segunda guerra mundial pronunció conferencias en ciudades escandinavas con el auspicio del Consejo Británico.

1949: “The Cocktail Party” – “El cóctel de recepción”

En 1949 se estrenó “The Cocktail Party”, en el Festival Teatral de Edimburgo y al año siguiente en Nueva York, con la dirección de Martin Browne.  Es una comedia que aproxima al dilema de la Salvación espiritual y desde entonces Eliot siguió escribiendo obras de teatro con orientaciones y conclusiones acerca de lo religioso y lo moral.  Cinco años después presentó El secretario particular y en 1958 El viejo estadista.

Hasta ese momento, el poeta y dramaturgo T. S Eliot era considerado uno de los críticos más autorizados de Inglaterra. Lo mejor de su producción ha sido recopilado en «Selected Essays: 1919- 1932», en «The Uses of Poetry» (Los Usos de la Poesía) y en «After Strange Gods» (Tras Dioses Extraños). En uno de los ensayos de este último volumen, intenta una definición de la Poesía y Belleza: «Sé que por belleza queremos significar toda suerte de cosas», dice. «Pero la ventaja esencial del poeta no consiste en tener un mundo hermoso que describir, sino la capacidad para ver tanto debajo de la belleza, como la fealdad; de ver el tedio y el horro y la gloria».

Eliot… y la poesía.

Desde la época de los juglares y trovadores se ha insistido en que la voz de los poetas ha conmovido a las personas y en algunos casos, logró influir sobre los pueblos.

La percepción de tales desarrollos estéticos y éticos dependerá de la capacidad personal para interpretarlos y en consecuencia, serán diferentes las valoraciones.  Entendiendo con exactitud ese lenguaje en algunos casos se podrá reconocer a un genio y en esa dirección, se podrá hablar de ciertas excentricidades que en realidad son las proyecciones que ese poeta ha logrado tras una laberíntica sucesión de experiencias personales y de observaciones de su entorno: el paisaje, sus imágenes y misterios; los hombres y sus vivencias…

No ha de sorprender que un mismo verso escrito por Eliot sea interpretado con distintas connotaciones.  Sucede con la mayoría de los poetas que suelen insinuar más que describir.

(Intuyo que la poesía está en la intimidad del poeta y que fluye desde ese lugar espiritual con el único medio posible: la palabra, su voz… y creo que es una excepción que el poeta no esté solo durante ese mágico momento de gestación y nacimiento del poema… Será para celebrar el encuentro con el primer lector  si se logra transmitir ese poema oralmente o por escrito, a otra persona.  Percibo que ese hecho no altera lo esencial del poeta…)

Eliot, el maestro…

En distintas fuentes se ha señalado la influencia de Thomas Eliot sobre la literatura contemporánea a partir de su Poesía un tanto hermética por sus simbolismos y originales metáforas.  Se ha reiterado que Mac Leish “en una edición especial de la revista «Advocade», publicada en Harvard -de la que Eliot fue secretario en sus días de estudiante, en 1910-, ha destacado: «Nadie nos ha enseñado más que Eliot» y también “Allen Tate se une a este homenaje comentando: ‘Yo sólo he tenido dos maestros y uno de ellos es Eliot’.”

Algunos estudiosos de literatura comparada señalan que se percibe cierta influencia de Eliot “en la poesía de Pablo Neruda y de Humberto Díaz Casanueva. Este último, después de expresar su disconformidad con las ideas políticas y religiosas de Eliot, concluye: «A pesar de todo ¿cómo no confesar que me han cegado los rayos de su poesía y que su contacto es una de las experiencias más puras y profundas que yo haya tenido en mi vida?».

(Necesito expresar que he podido incluir estas conclusiones tras sucesivos avances tecnológicos porque actualmente ya se puede acceder a historias de la Historia, a textos y críticas literarios; es posible ver dibujos y pinturas y avanzar en el conocimiento de artistas de distintas latitudes, escuchar diversas melodías, si se dispone de las herramientas y recursos indispensables para navegar por la red de redes.  Una vez más se confirma que las máquinas no se oponen a la cultura del trabajo y de la solidaridad, tampoco impiden la creatividad en oportunos desarrollos lúdicos y lúdricos; son los hombres que usan tales aparatos quienes por imprudencia o ignorancia provocan desequilibrios en el contexto económico-social y político…”)

1965: Eliot y… su Último Vuelo.

Falleció en Londres el 4 de enero de 1965.

Entre tantas palabras legadas a las generaciones futuras, hay ocho que escribió en Cuatro cuartetos y que siguen provocando interiores impulsos de asombro y de curiosidad:

 

“Ser consciente es no estar en el tiempo…”

 

Somerset Maugham dijo que Eliot fue “El más grande poeta de nuestra época” entendiéndose como tal, el período iniciado con la primera guerra mundial (1914) y la segunda que abarcó desde 1939 a 1945.»  Hay que tener en cuenta que el poeta residente en la isla británica, también por la proximidad territorial y por su tendencia universalista habrá sentido los impactos emocionales generados por la guerra civil española que empezó en julio de 1936… [3]

 

2003: Ecos…

A mediados de agosto de 2003, sigue siendo noticia alguna nueva investigación literaria acerca del legado artístico de R. S. Eliot.   En las páginas web es posible encontrar traducciones de su poema elaborado acerca de cómo nombrar a un gato…  Una de ellas:

“Nombrar a un gato”…

“El nombramiento de gatos de Thomas Eliot”

El nombramiento de gatos es una cuestión difícil,

No es apenas uno de sus juegos del día de fiesta;

Usted puede pensar al principio mí es tan enojado como un hatter

Cuando le digo, un gato debe tener TRES DIVERSOS NOMBRES.

Primero de todos, hay el nombre que el uso de la familia diario,

Por ejemplo Peter, Augustus, Alonzo, o James,

Por ejemplo vencedor o Jonatán, George o la cuenta Bailey –

Todos nombres diarios sensibles.

Hay nombres más de lujo si usted piensa que suenan más dulces,

Algunos para los caballeros, algunos para las damas:

Por ejemplo Platón, Admetus, Electra, Demeter –

Pero todos nombres diarios sensibles.

Pero le digo, necesidades de un gato un nombre que sea particular,

Un nombre que es peculiar, y dignificado,

cómo puede él continuar su perpendicular de la cola,

¿O la extensión hacia fuera sus barbas, o acaricia su orgullo?

De nombres de esta clase, puedo darle un quorum,

Por ejemplo Munkstrap, Quaxo, o Coricopat,

Por ejemplo Bombalurina, o bien Jellylorum –

Nombres que nunca pertenecen a más de un gato.

Pero sobre y más allá todavía hay una izquierda conocida encima,

Y ése es el nombre que usted nunca conjeturará;

El nombre que ninguna investigación humana puede descubrir –

Pero EL CAT MISMO SABE, y nunca confesará.

Cuando usted nota un gato en la meditación profunda,

La razón, le digo que, esté siempre igual:

Su mente se contrata a una contemplación del rapt

Del pensamiento, del pensamiento, del pensamiento de su nombre:

Su effable inefable

Effanineffable

Nombre singular profundo e inescrutable.”

Agosto de 2003: otra interpretación del poema “Usk”

El jueves 7 de agosto de ese año, en una página de internet (Wimbledon – Weblong de Guillermo Piro), se reitera información que también difundió el diario español  El País y que en ese tiempo, también se reprodujo en El Litoral de Santa Fe de la Vera Cruz: Se ha informado que el estudioso filólogo inglés -–retirado- “Philip Edwards consiguió descifrar un poema de T. S. Eliot, Usk, que hasta el día de hoy resultaba incomprensible. Usk consiste en 79 palabras, y desde hace años parece que los eruditos de todo el mundo debatían su contenido. Los especialistas no sabían si en el poema Eliot se refería a un ciervo o a algo de cuatro patas al leer:

“No rompas de repente la rama o

esperes encontrar

a un ciervo blanco detrás del manantial blanco”.

Afirma: “No, nada de eso, ningún animal. Según Edwards, Eliot se refiere al pub El Ciervo Blanco, que se encuentra en Usk, una pequeña localidad de Gales que Eliot visitó en 1935, cuando tenía 47 años. Curiosamente, entonces, este poeta erudito e intelectual era prácticamente abstemio, ya que no comenzó a beber hasta después de su segundo matrimonio, en 1957. Pero lo bueno todavía no vino. He aquí la interpretación que Edwards hace del poema: “Lo que el poema le dice a la gente es que no busque milagros ni crea en cuentos medievales, porque tanto los peregrinos de verdad como el mismo Dios están al aire libre». Querido Philips, verdaderamente, para eso nos hubiéramos quedado con el misterio.

(La página de Guillermo Piro concluye con esta información: “Cable de la agencia EFE, publicado por el diario español ‘El Mundo’.”  En el diario “El Litoral” de Santa Fe de la Vera Cruz, también se reiteró esa información procedente de la misma agencia de noticias.)

Es casi irresistible la tentación de expresar una interpretación personal.  El primer verso propone evitar una acción precipitada –“no rompas de repente la rama…” y los dos siguientes, indican que no será posible hallar “un ciervo blanco detrás del manantial blanco”, en una supuesta metáfora quizás haya nombrado a “un ciervo” que en realidad simbolizaría a “un hombre”, blanco… por su piel o por sus cabeza canosa… y que no estaría oculto “detrás del manantial blanco”… porque teniendo en cuenta otros textos de Eliot, sabido es que ha percibido los grises que matizan la existencia humana en sucesivas circunstancias.    Releyendo desde el plano donde crecen las hierbas y aparecen en escorzo la imaginación y la intuición, quizás se podría tolerar que aquellos cuatro versos significaran algo así como:

 

“No desgajes impaciente la familia ni

esperes encontrar

a un hombre maduro detrás de un espacio incontaminado”.  [4]

 

(Aproximación literaria:

Nidia Orbea Álvarez de Fontanini.)

 

 

 

 

 

 

[1] La traducción del español J. M. Valverde tiene otra sonoridad: «Abril es el mes más cruel / criando lilas de la tierra muerta, mezclando / memoria y deseo, removiendo / turbias raíces con lluvia de Primavera»

 

 

[1] Comentario publicado en Página/12, el sábado 15 de septiembre de 2002 (difundido en internet).

[2] Nota de Francisco Arias Solís, publicada en la Revista Opine, martes 7 de mayo de 2002, en internet.

[3] La cita corresponde a un párrafo escrito por Maugham en su Introducción a la Literatura inglesa y americana… y la reitero sin haber leído tal libro, casi como el eco de otros lectores

[4]De: «Guillermo Piro» /  Thu, 21 Aug 2003 19:11:57 –0300 / Nidia, su versión es muy bella y, además, parece convincente. Dado que sólo son cuatro versos, no le molestaría copiármelos? No pude dar con  ellos. Gracias.

Guillermo Piro.

 

Top