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17-07-1952: Ramón Juan Doldán y su siembra.

“La conciencia de haber hecho algún bien

vale más que todos los tesoros del mundo.”

                                San José de Calasanz (1557-1648)

 

(Es oportuno destacar que en el Boletín Nº 13  de Abril de 2002, el Ministerio de Educación de la Provincia de Santa Fe informó que al Calendario Escolar 2001 incorporaba otras conmemoraciones, entre ellas el 17 de julio: cincuentenario del fallecimiento de Ramón J. Doldán por su destacada labor educativa.

En ese tiempo, en la sede de la “Biblioteca Municipal” de Santa Fe, se concretó un homenaje y fueron expuestas páginas de diarios, fotografías y notas sobre sucesivas etapas de su trayectoria.)

 

17-07-1952: Ramón Juan Doldán y su siembra.

Acerca de sus convicciones y servicios…

Ramón Juan Doldán, escritor.

Imposición de su nombre en la primera biblioteca escolar…

ACTO…

La Biblioteca de la Escuela Nº 7 “Pte Beleno”.

RAMÓN J. DOLDÁN..

El Consejo General de Educación, en 1925.

Actitud coherente…

Creación de las primeras bibliotecas infantiles en Escuelas.

PRIMERA INICIATIVA DE DOCENTES DE LA ESCUELA PTE. BELENO..

Objetivo en la creación de la Biblioteca.

El gesto del presidente D. Ramón Doldán.

Los discursos tradicionales.

Discurso de una maestra de la Escuela Beleno.

Mensaje de D. Ramón J. Doldán en la primera biblioteca infantil que funcionó en Santa Fe.

Si se avanza un poco en la investigación…

  1. “Misión del Bibliotecario”.

1925: Encuentro con escritores santafesinos.

Los Reyes Magos.

“Plan de orientación educacional” en 1925.

Reglamento para el funcionamiento de Bibliotecas Infantiles.

La celebración del “Día del Libro”.

Los días de lectura.

Los libros de lectura aprobados en 1925.

Aquí, ahora, otro gesto de DON RAMÓN JUAN DOLDÁN..

Páginas en el Boletín del Consejo General de Educación 1925-26.

Memoria de Ramón J. Doldán.

“Dos palabras”.

Deuda del Consejo a la Junta de Jubilaciones.

Sueldos de maestros y administración.

Plan de Estudios.

Palabras del Inspector General Justo Deheza.

Homenaje a Miguel Bouvier.

La obra escolar.

El presupuesto.

El escalafón – Inspectores.

Bancos Escolares y Visitas.

Reconocimiento en diarios.

“Homenaje del Magisterio de la Provincia”.

12-10-1926: Discurso de Ramón Doldán.

 

Acerca de sus convicciones y servicios…

Tras el último desprendimiento de don Ramón Juan Doldán, el 17 de julio de 1952, en la edición del día siguiente del diario vespertino “El Litoral” de Santa Fe de la Vera Cruz (capital de la provincia de Santa Fe, República Argentina), destacaron parte de su trayectoria:

“…Pertenecía a un viejo hogar santafesino, y por sus condiciones personales, su larga pública vida pública y su estrecha vinculación con los sectores católicos de la ciudad, merecía el respetuoso afecto de sus conciudadanos, correligionarios y amigos.  Hombre de actuación en la Unión Cívica Radical, C. Nacional, lo era a la vez de los centros católicos, pues su fe religiosa y su cristianismo constituían, tal vez, el rasgo más definido de su espíritu.”

“…Actuó en el periodismo y en las letras.   Tenía talento y vocación literaria, y así, además de sus colaboraciones en este diario, La Mañana de Santa Fe, Nueva Época, Los Principios de Córdoba, El Pueblo de Buenos Aires, publicó varios libros y fue director en 1905, de la revista Vida Intelectual, de El Heraldo de esta capital y en 1922 del Diario Nueva Época.  A comienzos de siglo publicó Jurisprudencia Civil y Comercial, en 1906 Primeras campañas, Fuego graneado y En el surco en 1907, los trabajos presentados en el Congreso Nacional Católico, frente al problema y el problema de la vivienda obrera.  En 1914:  Yo también soy socialista.  Actuó en el Foro como Procurador, y en la Justicia como Secretario de la Suprema Corte.  Sus cargos honoríficos fueron numerosos y en todos ellos actuó con responsabilidad…, la vida de D. Ramón J. Roldán estuvo siempre inspirada por la moral cristiana”.

“…Encargado del registro de embargos e inhibiciones en 1893.  En 1905, a raíz de la gran inundación que tanto afectó a esta capital, fue designado miembro de la comisión de auxilio a los damnificados. …Jurado en los juegos florales celebrados en 1908, de los cuales tantas gratas memorias quedan.  En 1916, designado secretario de Justicia e Instrucción Pública.  Tomó así contacto con la vida escolar… en 1918 fue nombrado Presidente del Consejo de Educación de la Provincia.  En 1923 actuó como miembro de la Comisión Organizadora del Congreso del Trabajo y en 1926, miembro de la Comisión Nacional pro monumento a Avellaneda.  Desde 1911 actuó en los centros católicos y en 1921 presidió el comité de Acción Católica y fue miembro consejero del Magisterio Católico”.

“…En 1924 volvió a presidir el Consejo General de Educación, actuando este año como delegado al Congreso Internacional de Economía Social.

Vocal del  Comité Nacional pro-centenario del Pacto Federal, miembro del Tribunal Arbitral del Colegio de Procuradores y miembro del Segundo Congreso Provincial del Niño en 1935, actuó con singular tacto y eficacia”.

…Integró en varias oportunidades “la Comisión Honoraria pro nuevo Seminario metropolitano; la Comisión de homenaje al primer obispo de Santa Fe, monseñor Dr. Boneo,  y apadrinó la bendición del edificio social Hogar del Magisterio”.  “Pertenecía además a la Junta Provincial de Estudios Históricos de la Provincia”.

“…Actuó al servicio de sus ideales con dedicación y extrema generosidad… Lo mismo presidía un círculo de obreros católicos que asistía a los Juegos florales, llevando siempre el entusiasmo y la amplitud intelectual necesarios para hacer de la convivencia social un ejercicio amable y elevado.

Se extingue así, con la vida de don Ramón J. Doldán, la de un santafesino respetuoso de las normas de vida, animoso y emprendedor, dado a la actividad social con ancho espíritu y al mismo tiempo con ese decoro particular que parece distintivo de los hombres con raíces patriarcales”.

“…En la ceremonia de inhumación, realizada en el cementerio municipal a las 15.30… despidieron sus restos por el Consejo de Educación el Inspector Principal d. Víctor R. Piérola; por el Sindicato de Procuradores el Señor Ernesto Fontanarrosa y el Sr. David Giosa por el Colegio de Procuradores… Del Sindicato de Procuradores: “se expresa que ‘habiendo fallecido sin tacha, como miembro del foro santafesino… se nombra una comisión compuesta por los procuradores Guillermo Aranda, Luis Stellachi, Florentino Cena y José Ghío, para que asista al velatorio… al presidente para que hable en el sepelio, y nota de pésame a la familia.”

…Del Colegio de Procuradores, que había presidido en el período anterior al Sr. Giosa: “ha servido lealmente a la justicia y ha contribuido al mejoramiento de la educación y el progreso técnico de la enseñanza, se resuelve ponerse de pie…, designar a los socios Carlos A. Murúa, Eduardo de la Peña, Héctor P. Casola, Hugo Croci y Mario R. Bianchi, para que asistan al velorio”, palabras del presidente Sr. Giosa y nota a la familia”.

…Del Comité Provincial de la Unión Cívica Radical: “Designar a los Dres. Julio J. Busaniche y Romeo Bonazzola  y Sr. Salvador Damiani, para que asistan al velatorio… enviar nota de pésame a la familia…”

…Queda aquí esbozado el perfil trascendente de DON RAMÓN JUAN DOLDÁN…, y que sean año tras año, los niños y jóvenes santafesinos, quienes investiguen acerca de su inolvidable personalidad, porque se impone conocernos para reconocernos.

Ramón Juan Doldán, escritor.

Hasta fines de la década del ’30, había logrado editar algunos libros y textos de diversas conferencias:

  • “El problema social” (Primera campaña) – Libro.
  • “En el surco” – Libro.
  • “Fuego graneado” – Libro.
  • “Yo también soy socialista” – Libro.
  • “El problema social y sus remedios” – Conferencia en el Congreso Nacional de los Círculos de Obreros de Córdoba.
  • “Sobre la muerte del Coronel Yalcan”.
  • “Sobre edificación de casas para obreros y colonias agrícolas del Estado”.
  • “Luchas ideales” – Libro a publicarse.

(Constancia en pág. 36 de la cartilla titulada “Mi paso… 1925-1928”.)

 

* * * * * * *  * * *

Imposición de su nombre en la primera biblioteca escolar…

La recopilación de diversa información acerca de sucesivos proyectos de política educativa en la Provincia de Santa Fe, permitió conocer parte de las obras de Ramón J. Doldán, destacado educador profesional santafesino y saber que la primera biblioteca escolar infantil que integraba también a las familias de los alumnos, se puso en marcha en la Escuela Nº 7 Presidente “Juan Beleno” (ex presidente del Consejo General  de Educación).

Desde el SEPA (servicio de educación por el arte de vivir y convivir), en 1961 comencé a difundir la obra de destacadas personalidades mediante dictados en clases o propuestas de ejercitación, promoviendo el Diario Mural para que los alumnos pudieran informarse acerca de efemérides, avances científicos y técnicos, arte… o instalando la biblioteca del aula con libros donados, que en la mayoría de los casos eran luego un ejemplar disponible definitivamente en sus hogares…

A fines de 1986 fui convocada para dirigir la centenaria Biblioteca de la Legislatura de Santa Fe y presenté un anteproyecto del Plan Cultural a desarrollar –jerarquizando la biblioteca como centromultimedios al servicio de la comunidad-. Fue inmediatamente aprobado y asumí esa responsabilidad al comenzar enero de 1987.  En el contexto de la educación permanente -integrando la colaboración de legisladores, asociaciones intermedias, escuelas de gestión oficial y privada…- en el plan elaborado a fines del año siguiente, incluí para 1989 la iniciativa de proponer a la Escuela Nº 7 de Santa Fe, que se concretara la aspiración de los maestros de 1925: imponer el nombre “Ramón J. Doldán” a la primera biblioteca infantil que funcionaba en la capital de la provincia de Santa Fe.

La Comisión Bicameral aprobó el proyecto y también las autoridades de la Escuela.

 “En Septiembre – Mes de la Educación”, en el patio techado de esa escuela, sesenta y cuatro años después de aquella iniciativa de las maestras, en el acceso a la Biblioteca fue descubierta una placa de bronce que identifica ese “lugar de sosiego y asombro”…   NOF.

 

ACTO…

Día Viernes 22 de setiembre de 1989.

Hora: 16,15

 

La Biblioteca de la Escuela Nº 7 “Pte Beleno”

Tendrá su nombre:

RAMÓN J. DOLDÁN

* * * * * *

  • Recepción de autoridades, invitados especiales y padres.
  • Presentación de las Banderas de Ceremonia.
  • Himno Nacional Argentino.
  • Programa radial a cargo de alumnos de Periodismo Escolar.
  • Descubrimiento de una placa recordatoria.
  • Palabras de agradecimiento a la Directora de la Biblioteca de la Legislatura, a cargo de los alumnos de la Comisión Infantil de Biblioteca.
  • Actuación del Coro de Niños del Liceo Municipal.
  • Retiro de las Banderas de Ceremonia.

 

* * * * * *

(En esa oportunidad, ingresaron a la Biblioteca Infantil Escolar, obras donadas en memoria de la Bibliotecaria Sra. Blanca Aparo de Campana.)

El Vicegobernador de la Provincia de Santa Fe

DON ANTONIO ANDRÉS VANRELL

Presidente de la Cámara de Senadores.

 

Ha donado la placa de bronce destinada a la

BIBLIOTECA INFANTIL “DR. RAMÓN JUAN DOLDÁN”,

Coincidiendo con el pensamiento del Presidente

de la Nación Dr. CARLOS SAÚL MENEM:

                  “La función pública es una función eminentemente de

                  servicio”. ¡Argentina, ahora o nunca!, con Fe en Dios

                  y con Esperanza.

PALABRAS NECESARIAS…

Estar en una biblioteca, permite un encuentro con libros y documentos, si existe predisposición para la lectura, si interesa el conocimiento del pasado para comprender el presente y poder imaginar…o soñar con el futuro.

En la Biblioteca de la Legislatura de Santa Fe, organismo que desde 1987 funciona como Centromultimedios de la comunidad organizada, con sede en calle 25 de Mayo 1908, teléfono 22254, en la ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz; es posible consultar Diarios de Sesiones, valiosa bibliografía y diverso material informativo.  Allí surgió la idea para la elaboración de esta cartilla.  La lectura de una publicación oficial del primer cuarto del siglo -1925-, estimuló la comunicación y en los momentos libres, estas páginas acumularon datos y referencias, para que los niños -y los adultos-, conozcan una parte de la gestión del Consejo General de Educación, cuando D. Ramón  J. Doldán, ejerció la Presidencia, en el primer período como titular, a partir de 1925.

Como adhesión a la X Feria Exposición de Libros para Niños y Jóvenes, organizada por la señora María del Carmen Villaverde de Nessier,  Jefa de la División Literatura Infantil, dependiente de la Secretaría de Cultura y Comunicación Social, este documento será entregado en esa oportunidad, a la citada División, a las primeras bibliotecas escolares de la Provincia: “Domingo Guzmán Silva” en la Escuela Nº 1 “Domingo Faustino Sarmiento” y la inaugurada el mismo día, 22 de setiembre de 1925, en la Escuela Nº 7 “Presidente Beleno”, ésta de anterior organización y con el propósito de ser denominada “D. RAMÓN J. DOLDÁN”, hecho que se concreta en 1989, por iniciativa del SEPA (Servicio de Educación por el Arte), idea y realización de la autora de esta recopilación.

Sea un reconocimiento a los educadores profesionales que han pasado y que sirven, en las escuelas santafesinas.  Un evocación emocionada para al Sra. BLANCA APARO DE CAMPANA, bibliotecaria en la década del 70 en la Escuela Beleno, colaboradora en la educación de nuestros hijos…

Quizás sirva para avanzar en la investigación, y estoy convencida de que allí reside el único y significativo valor.

Nidia Orbea de Fontanini

18-09-89

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La historia, suele estar escrita y son los documentos, los que permiten una mayor aproximación a los hechos y actos del pasado.

Con ese propósito, es posible explorar en los anaqueles de archivos oficiales y privados, en bibliotecas públicas y privadas, y específicamente en los centros de documentación de las Legislaturas de las provincias.

Este trabajo, es el resultado de lecturas en el Centromultimedios “Biblioteca de la Legislatura de Santa Fe”, en el otoño de 1989, con la intención de contribuir al conocimiento de la historia de la educación en la ciudad de Santa Fe, a partir del aporte de las dos primeras bibliotecas infantiles que comenzaron a funcionar en 1925, cuando el Gobernador D. Ricardo Aldao ejercía la primera magistratura de la provincia, asumida el 9 de mayo de 1924.

 

(Es oportuno mencionar algunas referencias que aporta José Rafael López Rosas, en el suplemento cultural que dirigió en el Diario “El Litoral”, el 7 de abril de 1984, al recordar “el tiempo político” de Ricardo Aldao. “…La candidatura de don Ricardo fue impuesta desde Buenos Aires por el caudillo de Balvanera, quien tenía una singular simpatía y confianza por el político santafesino”, reelecto en 1928.  Vicegobernador: Juan Cepeda, caudillo del Sur; contemporáneos del escritor y político Alcides Greca, defensor de la libertad y de la justicia, con testimonios en diarios de sesiones que debieran ser leídos por los estudiantes argentinos, para conocer la verdadera historia).

El Consejo General de Educación, en 1925.

Creado por Ley del 25 de noviembre de 1886, el Consejo había sido presidido desde el 28 de abril al 10 de mayo de 1920, por el Señor RAMÓN J. DOLDÁN con carácter interino, y desde el 10 de febrero de 1925, como titular.  En el boletín de Educación, 4ª época, año 1925, siendo el órgano oficial de la Dirección Gral. de Escuelas -ejercida por el presidente-, se registran notas desde distintas procedencias, destacando la labor del distinguido docente santafesino.

 

Como ejemplos, servirán estos conceptos escritos por Luciano Peña, Director de la Escuela Nº 158 de Villa Regules, donde alude a “la circular Nº 8 del 25 de agosto, que comunicaba lo decidido en sesión del 8 del mismo mes: ‘instituir la Semana del Maestro’ a celebrar los días 11 al 16 de setiembre de cada año”.  Destacaba el Director que esa decisión, conmueve por “los valiosos sentimientos de moralidad y justicia que encierran, y porque ellos contribuyen a levantar el espíritu y a honrar y engendrar el valor moral del maestro y de la escuela”, bases que “guardarán un recuerdo imperecedero en el seno del Magisterio de la Provincia”.  Así fue recibida la conmemoración en Firmat, y en las otras localidades.  Es que se impone reconocer la importancia de los educadores profesionales, que complementan la acción educativa de la familia y lamentablemente, en algunos casos deben suplirla, para instruir y formar a niños y jóvenes, promoviendo vocaciones y estimulando el autoperfeccionamiento.

Desde el Departamento Gral. San Martín, el Dr. Torcuato Arzeno, ex Fiscal de Estado y Jefe Político en ese departamento, escribió a D. Ramón Doldán desde San Jorge: “He sido siempre parco en felicitaciones, cuando ellas no están plenamente justificadas”, y concluye recociéndole: “…tus amigos tenemos forzosamente que sentirnos ampliamente satisfechos al ver que no desmientes tus antecedentes”.

 

Actitud coherente…

Un ejemplo, que será oportuno analizar.

La actitud generosa del nieto de D. Ramón J. Doldán, D. Carlos Alberto López Doldán, permitió conocer un documento publicado poro el ex–Presidente del Consejo Gral. de Educación citando hechos y documentos que reflejan su PASO como funcionario.  En treinta y seis páginas, editadas en Castellví Hnos. de Santa Fe, especifica lo que fue solo un proyecto, y lo realmente aplicado.  La comunidad organizada, hoy, necesita predicadores de la justicia, que impone como prioridad en la persona humana, capacidad de autocrítica y responsabilidad.

 

En un anexo, están discriminadas los hechos más relevantes, salvando la omisión por desconocimiento al 19-09-89.

Creación de las primeras bibliotecas infantiles en Escuelas.

PRIMERA INICIATIVA DE DOCENTES DE LA ESCUELA PTE. BELENO

El 2 de setiembre de 1925, la Directora de la Escuela “Presidente Dr. Juan P. Beleno”, de Santa Fe, Sra. ERNESTINA F. LAJE DE LÓPEZ, comunicó al Presidente del  Consejo Gral. de Educación (CGE, en lo sucesivo para este trabajo y para abreviar), D. RAMÓN J. DOLDÁN, “que el personal directivo y docente de la Escuela había resuelto inaugurar la Biblioteca Infantil el día 10 de setiembre en curso y darle a la misma el nombre de ‘Biblioteca Infantil Presidente don Ramón J. Doldán’, honrando así a quien consideraban que había interpretado los intereses generales de la educación de la provincia, llevándolo a la práctica”, así como el nombre de otro presidente del Consejo distingue a la Escuela, por cuanto el Dr. Juan P. Beleno ejerció la Presidencia del organismo desde el 7 de abril de 1906 al 10 de mayo de 1920.

Objetivo en la creación de la Biblioteca.

Expresaba la Sra. de López, que con la creación de la Biblioteca, se podría “en parte cumplir nuestra misión de maestros, enseñando a la niñez que ha de pasar por ella, que es necesario ser ciudadanos honrados y funcionarios honestos y patriotas, para hacerse acreedor a la perpetuidad de la memoria entre sus conciudadanos”.

El gesto del presidente D. Ramón Doldán

La lectura de ese ofrecimiento, conmovió al maestro, y tres días después, contestó la nota expresando: “He sentido en mi espíritu, como un viento fresco de renovación que me invitara al trabajo y a la lucha por la cultura pública, venido de allá, del seno del magisterio, donde se lucha y se forma la gran democracia del mañana”.  Declinó el gesto de distinción por sus méritos, con la humildad que pertenece a los maestros ejemplares, ratificando su voluntad de ser un maestro más, “sólo el primero en el trabajo, en la dignificación del maestro y en la lucha por el progreso de la cultura argentina”.

El tiempo, permite valorar objetivamente este gesto, de un maestro que honró su jerarquía de Presidente del Consejo General de Educación, sirviendo, sin servirse.

Los discursos tradicionales

El 22 de setiembre de 1925, primero se dejó inaugurada la Biblioteca Infantil “DOMINGO GUZMÁN SILVA” en la Escuela Nº 1 “Domingo Faustino Sarmiento” de Santa Fe.

En presencia del Sr. Gobernador -D. Ricardo Aldao- y de las autoridades educativas, la Directora de la Escuela Sarmiento, Sra. ANGELA S. de DURÁN, expresó:

“Nada más acertado y halagador que conmemorar el segundo día de la triunfal primavera, dando forma al pensamiento de crear una biblioteca infantil”.

 

Destacó la Sra. Directora, que el Sr. Presidente del CGE, “inspirándose en los más nobles sentimientos de gratitud, ha resuelto dar a esta biblioteca, en nombre de ‘Domingo Guzmán Silva’, todo enseñanza y ejemplo.  Domingo G. Silva, llegó a la cumbre desplegando todas las energías de su corazón tenaz y la luz de su fecundo cerebro, porque fue hijo de sus propias obras y a fuerza de inteligencia y de fe, venció al destino hasta llegar a la cima, tronchando todos los obstáculos del camino”.

Advirtió luego que “sus servicios serán de óptimo florecer si vosotros niños y maestros, le prestáis vuestro apoyo entusiasta y decidido, a vosotros cumple el deber de propiciar y asegurar el engrandecimiento, cultivándola con afán, que cuanto mayor sea vuestro empeño, mejores frutos dará en beneficio de la escuela.  Que quede aquí para siempre la biblioteca infantil Domingo Guzmán Silva, sostenida por el estudio, el amor y el respeto de todos los niños de esta casa de educación”.

 

El Presidente del CGE Sr. Ramón J. Doldán, dijo:

“El más profundo sentido de la enseñanza está en preparar al niño en las verdades experimentales, con las cuales se ha de enfrentar luego en la vida”.

Agregó:

“Hay dos conceptos que no pueden discutirse: entre un ignorante bueno y un pillo instruido, la elección no es dudosa.  Entre no saber leer, pero saber trabajar, es preferible lo último.  De esas dos conclusiones, surge todo un programa de enseñanza y es que primero debemos educar y luego instruir,  y que también debemos dar las aptitudes necesarias para el trabajo, porque la instrucción intelectual no basta, hay que educar conjuntamente los sentimientos, el cerebro y el brazo.  Sólo así haremos cosa integral de facultades y de vida.  Ese es el verdadero concepto de la escuela activa y de la escuela popular.  El niño debe pensar, el niño debe ejecutar, el niño debe tener iniciativa, pero estimulado y dirigido por el maestro.  En la escuela activa, es la espontaneidad y la acción del niño lo fundamental, por eso el maestro debe dirigir, corregir y ofrecer oportunidades para que la acción del niño se manifieste y sea no solamente dirigida científicamente, sino noblemente inspirada.  Los educadores no deben olvidar nunca que así como en las manualidades es la ejecución continuada la que da la aptitud y asegura el aprendizaje, así el bien practicado sistemáticamente llega a constituir el hábito moral, que es el fin de la pedagogía”.

Afirmó luego que “la educación moral funda la educación social, desde que de ella derivan todas las demás virtudes individuales y colectivas”, y “no hay que olvidar que una educación sin base práctica ética, no responde a las mejores aspiraciones ideales, porque no cincela acabada y armoniosamente la personalidad humana.  Así como debe haber armonía entre el cerebro que piensa y la mano que ejecuta, así debe existir lo bueno y la voluntad de realizarlo, entre el sentimiento que la determina y la acción que la ejecuta, entre la energía moral y la actividad funcional que la exterioriza.

Si la escuela y el maestro llegan a constituir ese estado de ánimo, ese nombre concepto de la vida, habrán realizado estable y fecunda obra educativa.

Ésa es a mi juicio, la verdadera senda de la educación popular.

La escuela debe entonces afirmar su propósito educativo, ratificar su credo espiritualista y poner fe en las almas, energía moral en las voluntades, semillas de ideal en las inteligencias y sobre todo, conciencia de los problemas reales del espíritu, para que ilumine el difícil sendero de la vida, un luminar de fe que proyecte irradiaciones de consolación y de esperanza en la noche sin estrellas de la adversidad.

Destacó luego el Sr. Doldán, que “ninguna obra mejor, ninguna concurrencia más eficaz que la acción del libro, que la obra activa de las bibliotecas, donde el niño encentra sendas de saber, motivos de grato solaz, medios de completar las enseñanzas recibidas, y más que todo, el hábito de la lectura, el amor al libro, la noble disciplina del estudio.

Reconoció el Presidente del Consejo, la obra de los maestros y la “acción de progreso” que constituía la creación de la biblioteca infantil y exaltó la personalidad de “Domingo G. Silva, maestro sin título, pero figura descollante en la enseñanza de la Provincia y que llegó a las cumbres, precisamente porque amó el libro y las bibliotecas, donde nutrió su espíritu en el saber y donde aprendió las grandes orientaciones de la escuela popular que era uno de sus mejores anhelos de maestro.  Bien está entonces aquí su nombre, como un ejemplo, y también como justísima consagración  su labor fecunda de educador”.

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Discurso de una maestra de la Escuela Beleno

Señorita Amparo Espino.

Las primeras palabras de la Srta. Espino, confirman la real situación de funcionamiento anterior de la biblioteca infantil en la Escuela Beleno, con inauguración prevista para el día diez de setiembre, por iniciativa documentada en la nota del dos de setiembre.

La Directora Sra. Ernestina F. Laje de López, adoptó la decisión de que fuera una maestra la que representara a todos los autores de la iniciativa de creación de la biblioteca escolar, tal vez todavía algunos ex-docentes y ex-alumnos, recuerden el momento, y si así fuera, se emocionarán como en aquel lejano 22 de setiembre de 1925.

Reconoció la distinguida Srta. Espino, que “en el poco tiempo que este salón lleva habilitado, han podido vislumbrarse ya los frutos óptimos que en un futuro cercano está llamado a producir; es algo que encanta y que emociona, al ver el interés con que niños de pocos años se preocupan de inquirir acerca de la clase y el carácter de los libros que descansan en los anaqueles, y, una vez obtenido el que desean, se engolfan en su lectura, o bien lo dejan a las pocas páginas, con lo que se erigen, sin saberlo, en críticos imparciales y sinceros de tales producciones.  Sería interesante para los sicólogos hacer un estudio acerca de las inclinaciones y de los gustos literarios de los niños, tomando como base las obras de su predilección.  Con bibliotecas de la índole de la que hoy se inaugura, tienen sus auspiciadores la sana intención de arrebatar víctimas a la calle -esa devoradora de inocencias-, y con ello reducir la población de cárceles, asilos y hospitales”.

Al referirse a las actitudes generosas que hacen posible el funcionamiento de bibliotecas, la Srta. Espino destacó “la perseverancia y un desinterés digno de elogio del personal de la escuela”, y advirtió que eso “no basta: debemos contar además, con la constante buena voluntad de los poderes políticos, cuya valiosa cooperación moral y material no podrá faltarnos en ningún momento,  ya que habrán de sentirse, forzosamente, solidarios en esta labor humanitaria y filantrópica”.

Concluyó dirigiéndose a los niños, “el punto de mira de nuestras preocupaciones, y que únicamente anhelamos, robustecer vuestros cerebros y vuestros corazones para que la República tenga hijos grandes, no sólo por su talento sino también por sus virtudes”.  “Modestamente, sin aparatosidades que nada significan, se inaugura hoy oficialmente la Biblioteca de la Escuela Presidente Beleno…, y cuando con el tiempo veamos el camino recorrido, en lugar de sentirnos fatigados, una voz interior de orgullo -la satisfacción del deber cumplido- nos incitará a no desmayar y seguir marchando firmes, decididas y resueltas, con la mirada fija en el porvenir”.

                   (La constante buena voluntad de los poderes políticos cuya valiosa cooperación moral y material no podrá faltarnos en ningún momento…, es el eco de la voz de la maestra… de todos los tiempos…, en consonancia con el clamor de las nuevas generaciones, que en igualdad de oportunidades con la niñez de otras latitudes, desea y espera que la escuela disponga de lo indispensable para asegurar la calidad en la educación, como única y verdadera forma de efectivo logro.)

Mensaje de D. Ramón J. Doldán en la primera biblioteca infantil que funcionó en Santa Fe.

Los documentos aproximan a la realidad, sea pasada o presente.  Este trabajo está apoyado en la publicación oficial del Consejo Gral. de Educación de la Provincia de Santa Fe, en 1925/26, a través de sus Boletines.

En 1989, la primera biblioteca infantil santafesina, continúa sin nombre, porque la actitud del Sr. Ramón J. Doldán, humilde y responsable, prefirió eludir los honores e impulsar primero, la inauguración de la que llevaría el nombre de Domingo G. Silva, en la escuela Sarmiento.

Cuando concluyó el discurso la maestra Srta. Amparo Espino, dijo el Presidente del Consejo Gral. de Educación en la Escuela “Presidente Juan P. Beleno”:

“Celebremos en este momento la fiesta del libro, del libro redentor de pueblos, del libro que ha hecho los grandes maestros y las grandes democracias, del libro donde vemos y palpamos los sentimientos, las ideas, las virtudes y la ciencia de nuestros antepasados, del libro que une lo que con lo que existe y el presente con el porvenir; del libro que es altar donde se realiza la comunión ideal de los espíritus y donde vamos todos a beber el agua cristalina de la ciencia, junto a las enseñanzas novísimas de los grandes ciudadanos del ayer.

Bienvenidas sean entonces las bibliotecas, honor a los maestros que las propician, sabiendo que el libro es el pan espiritual del pueblo, el del hombre y la idea exacta de la riqueza moral de nuestras tradiciones, el único que sí solo puede desgajar loso vicios y los odios y sembrar de ideas, de doctrinas y de nobles ejemplos el surco abierto de la democracia en marcha.

No olvidéis, vosotras, maestras, lo poderosa y eficaz que es el factor alegría en la vida de los niños.  No lo olvidéis en las aulas y también al fundar estas bibliotecas.  Haced que el libro sea atracción y el contento de los niños.  No olvidéis que él tiene, por lo general, predilección por las pequeñas cosas.  Estudiad bien su sicología y veréis que con cualquier obsequio puede contentársele, cuando se le entiende y se le ama.  El regalo más pequeño, un cuentito, una florecita, hasta un trozo de pan, puede hacer feliz a un niño cuando se le da con cariño y sencillez.

…Un error imperdonable de los maestros es el de no apreciar bastante la importancia de la bondad y de la alegría, como auxiliares de la obra difícil de la educación y de la instrucción.

…Todos los seres en su iniciación requieren sólo calor, y ese calor para el ser humano es el amor, la bondad y la alegría.  Ellos son los que despiertan las facultades del niño como rayos de un sol naciente y como centro de gravitación espiritual, donde florecen todos los sentimientos nobles.

…Es por la formación consciente de hábito virtuosos, como se llega al fondo mismo de la educación y como se transparenta el verdadero mérito del maestro. Enseñad entonces a los alumnos a ser buenos y alegres y habréis asegurado lo mejor de vuestra cosecha.

…Sembrando ideales buenos, poniendo de cimiento un buen libro y la alegría en las almas, habréis puesto la base del palacio fuerte de la vida, inaccesible a todo infortunio, superior a toda borrasca y capaz de toda resistencia.

La presencia en este acto del Señor Gobernador y sus ministros, importa por sí solo todo un estímulo a vuestra eficaz preocupación por el éxito en la enseñanza, la que no dudo se ha de traducir en una mayor suma de esfuerzos, porque conozco los valores morales que animan el espíritu noble, entusiasta y digno del magisterio, que pone todo su saber, su  civismo y sus mejores años de vida al servicio del niño y del progreso de la Escuela.

Recibid Señora Directora, por esta feliz iniciativa el aplauso del Consejo que me honro en presidir, haciéndolo extensivo al personal docente que os acompaña en tan noble tarea constructiva.

He dicho.

 

* * * * * * * * * * * * *

 

Terminados los discursos, en la Escuela Beleno -como había sucedido en la Escuela Nº 1-, se desarrolló un “breve y atrayente programa a cargo de los alumnos”, tal como consta en las páginas XXV y XXVI, del Boletín del 1º de octubre de 1925, acervo de la Biblioteca de la Legislatura de Santa Fe, creada en 1882 y desde 1987, funcionando como centromultimedios al servicio de la comunidad, en 25 de mayo 1908, 3000 Santa Fe, República Argentina.

Si se avanza un poco en la investigación…

…es posible:

   …sorprenderse con los logros en 1925…;

   …comprobar la vigencia de cuentos y poemas;

   …valorar silenciosamente los esfuerzos…

            y con entusiasmo asumir el desafío actual.

En 1989 , TODOS, UNIDOS CON SOLIRIDARIDAD, EN UNA ACCIÓN EDUCATIVA

Que genere la CULTURA DEL TRABAJO,

      …CONCIENCIA ECOLÓGICA,

      …FRATERNIDAD CRISTIANA,

      …“POR DIOS Y POR LA PATRIA”…

      en el hogar, en Argentina, en Latinoamérica.

 

En ese tiempo, se desarrolló una intensa campaña para prevención de enfermedades, y en un propósito de lucha antialcohólica, una asociación intermedia le propuso al Presidente Doldán “organizar en la Capital de la provincia, un comité de Templanza, que sin ningún compromiso de orden financiero pero sí unido por la comunidad de ideales”, coopere en la obra en bien de los hogares y de la Nación.  El programa del Consejo Gral. de Educación fue apoyado por la Dirección General de Administración Sanitaria -Manuel A. Echagüe- y por la Asistencia Pública -Dr. Atilio Tiscornia-, que proveyeron quinientos afiches con leyendas alusivas y láminas con recomendaciones para combatir insectos -moscas-, y para “precaverse de la fiebre tifoidea que tantas víctimas hace, sobre todo en la campaña, en donde se carece de aguas filtradas”.

Han pasado más de sesenta años, y la mayor parte del territorio sigue sin disponer de aguas filtradas.  Son las lecturas que hay que hacer de la realidad, porque no sólo se leen las palabras, el obrar es mucho importante y también requiere visión, percepción, comprensión y comparación para extraer conclusiones.

La lectura del Boletín de 1925/26, revela otros datos interesantes.  Existían en Santa Fe, una Escuela para Niños Débiles, dirigida por la Sta. Laura Rodríguez Reinares. (Luego Sra. de Cámara, que culminó su carrera como Vicedirectora de la Escuela Nº 1 “Domingo Faustino Sarmiento” de Santa Fe, y en este paréntesis, corresponde un reconocimiento a quien con generosidad escribió en el álbum de una egresada de sexto grado:

“Te marchas de esta escuela como el pajarillo alegre ante la inmensidad del espacio, dejando en mis oídos el murmullo de tu voz que impulsada por tu cerebro, fluía como vertiente inagotable de palabras y de ciencia.  Estudiosa y ejemplar, llevaste siempre en tu rostro, la dulce serenidad que otorga el deber cumplido.  Te abraza Laura R. de Cámara, nov. 20-1945”.

La lectura de un estímulo, significa más tesón y mayor esperanza.  Los maestros lo tienen en cuenta, porque con ello apuntan al futuro.  Un dato que no puede ser comparado, es el referido al trámite del Exp.739R, gestionado por la responsable Directora de la Esc. de Niños Débiles, que en noviembre de 1925, con cargo rendición de cuentas recibió 100,08$ m/n. “importe de artículos alimenticios consumidos en la escuela”, de acuerdo con un detalle -como en la actualidad-, obligado para autoridades escolares.

(Sesenta años después, poco han cambiando estas situaciones, basta con leer los diarios y escuchar radio o ver televisión.)

 

En ese Boletín, algunas informaciones demuestran la previsión de los conductores de ese tiempo.  Tenía impulso el CINE educativo, y no sólo en las ciudades importantes, y se inauguraron las dos primeras bibliotecas infantiles.  No es novedad que EL DIARIO VA A LA ESCUELA, iba en 1925 a través del boletín del Consejo que incluía publicaciones de “La Nación”, para conocimiento de todos los docentes santafesinos.  Tal una reproducción acerca de ‘Misión del Bibliotecario’, en octubre de 1925.

1925.  “Misión del Bibliotecario”

“La misión del bibliotecario no debe limitarse a saber de memoria el índice de las obras que se encuentran en los anaqueles de la biblioteca, sino también, a conocer dentro de su mejor criterio, el valor literario o filosófico de cada volumen, con el fin de orientar por el buen gusto de la literatura, el espíritu de cada niño concurrente.

La misión del bibliotecario es grande y noble, como la del maestro, que en el aula pone todo su afán en la lucha continua por la educación e inteligencia del alumno; su obra es tan grande o igual, por cuanto de la lectura de un libro, puede surgir en el pequeño lector, el genio, que en el mañana rinda a la patria su fruto, para bien de todos.  Por ello cada uno de los encargados de estos establecimientos, ha de tratar de conocer a fondo lo que contiene su biblioteca, como también, -sin que esto sea exigir de él, un psicólogo- tiene la obligación moral de profundizar de inmediato la psicología de cada niño, para conocer la forma debida la inclinación de cada uno, y, aprovechar con ello el mayor rendimiento en su buena obra.

El bibliotecario o bibliotecaria, tratará a los niños con la familiaridad del amigo y el respeto del padre; enseñará el amor a los libros, sin retóricas ni palabras que dejen entrever por su rudeza un poco de severidad en sus consejos.  Para ello, bastará hacer un pequeño esfuerzo de buena voluntad y poner un poco de corazón en su tarea; al principio encontrarán, quizá, ciertas dificultades para convencer a aquellos más despiertos, más audaces, que indebidamente algunos llaman traviesos, etc., pero luego se verá con agrado que entre los más audaces,  -a que me he referido- se encuentran casi siempre los de más pasta, los de más inteligencia, y que sabiéndoles guiar son de ellos que se puede sacar mayor provecho; la realidad lo ha confirmado muchas veces, por cuanto nadie ignora que los grandes hombres de ésta u otra época, al leer su bibliografía, encontramos que siempre fueron los más traviesos cuando pequeños.

Y después de lo dicho, solo me resta repetir, que la obra del encargado de custodiar una de nuestras bibliotecas infantiles, no debe limitarse a conocer de memoria los índices de la misma, sino,  conocer también el valor literario o filosófico de cada volumen con su constante estudio, a fin de orientar lo mejor posible a nuestros pequeños lectores”.

Eduardo Rodríguez

(Bcl.11, 01-02-25, LII.CGE)

* * * * * * * * * * * * *

1925: Encuentro con escritores santafesinos.

Las publicaciones del Consejo General de Educación, revelan la preocupación de sus autoridades para difundir la literatura santafesina.  La incorporación de poemas y cuentos en los Boletines que se enviaban mensualmente, hacía posible que en todas las escuelas se dispusiera de material indispensable para conocer y reconocernos.

(Como un aporte al conocimiento de la literatura santafesina, está trascripto el cuento “Los Reyes Magos” de Marcos, P. Rivas, publicado en el Boletín Nº 11, 1º de Febrero de 1926, LIII y siguiente.

  1. P. Rivas, publicó Poesía: “Las Horas Huérfanas”, “La Ruta incierta” “Facundo” –libro agotado-; Psicología: “Los problemas de la inteligencia” –ag.- Didáctica: “La ortografía den la Escuela Primaria” 2ª edición; Historia: “La Guardia del Carcarañá”, “Historia del Fuerte de Melinkhué”, 3ª edic. ag., “Historia de San Lorenzo”, “Sarmiento, Mito y Realidad”, ag., “El Misterio de las Ruinas de Tiwanaku”, “Historia de Guardia de la Esquina”, “El Oratorio de Morante”, entre otras…

Los Reyes Magos

Por Marcos P. Rivas

 

                                          -¡Papá, esta noche vendrán los reyes magos!

Voy a limpiar mis alpargatas ¡están tan sucias y

tan rotas! ¿Verdad que a tan augustos viajeros les

gustará ver el calzado bien limpio?

El robusto obrero abandonó sobre la mesa el

diario que leía, levantó el rostro contraído en un

gesto de desagrado, miró fijamente a su hijo a la

luz mortesina de la lámpara, y le contestó rudamente:

        -¡Reyes magos!… Patrañas que yo no sé quién

se las enseña.  Es una mentira, una superstición, una

ignorancia; cuentos de burgueses para llenar de golosinas

a sus hijos.  Cuando sepas trabajar y ganar algo,

tendrás lo que no te darán esos señores. ¡No hay tales reyes!

        Y recalcó brutalmente las últimas palabras.

        Sin embargo… mamá solía decirme… -replicó tristemente

el niño, calzándose las rotas alpargatas.

        Al día siguiente, en la escuela, durante el recreo,

la maestra conversaba a solas y en voz baja con un alumno.

        ¿Verdad, señorita, que los reyes magos ya no pasan?,

¿o solamente para los niños ricos y olvidan a los pobres?

        La bondadosa maestra miró dulcemente al niño y le contestó

con una voz que en aquella alma pequeña debió sonar como un

arrullo.

            -Para los niños pobres, igual que para los seres buenos

y virtuosos hay muchos reyes magos en la vida. Como la estrella

que en un tiempo les guió a Belén ya no aparece, les orienta

ahora el destello de las puras.  Es necesario tener fe.

            Los pálidos labios del niño dibujaron ese gesto que provocan

la alegría o el acíbar.

* * * * * * *

Es media noche.

            Un silencio solemne reina en el suburbio dormido.

            En la ventana descolorida de una casita humilde hay

dos alpargatas roídas con cordones azules, que parecen

dos palomas enfermas y cansadas, con una cinta atada al cuello.

            Se oyen pasitos apresurados.  Una mujer se acerca

a la ventana humilde, introduce la blanca mano entre las rejas

y deposita unos paquetes; luego se aleja rápidamente..

            La luna emergiendo de entre un grupo de nubes,

alumbró al mundo con su resplandor de plata que parecía

el pantallazo de un reflector lejano.

                                    * * * * * *

            Con el alba se despertó Carlitos.

            Su primer pensamiento fue para los reyes magos.

            ¿Y si no habían pasado? Le estremeció la posibilidad

del terrible desengaño.

            Las palabras de la señorita martillaban su psiquis:

“Es necesario tener fe”.

            Instintivamente se echó al suelo y en puntas de

pie se acercó a la ventana.

            Sus manos temblaron al abrirla…

            Un grito inmenso, una incontenible explosión de

alegría, de locura, repercutió en la pieza.

            -¡Papá1  ¡Papá!

            El padre se despertó sobresaltado.

            -¡Papá, papá, los reyes han pasado! Mira…

            Y ante los ojos atónitos del obrero, el niño apretaba

contra su pecho los grandes paquetes atados con cintas

celestes.

            Las cortó de un tirón, rompió nerviosamente la

envoltura: había ropa, libros, juguetes,…

            -¡Papá, qué buenos son los Reyes Magos! -repetía.

            El padre bajó los ojos abrumado por el remordimiento

y la vergüenza.

            Había recibido una lección como no se le dieran

nunca los periódicos ácratas que leía, ni los oradores

incendiarios que escuchaba.

            Y la maestra abnegada había desarrollado secretamente

en una noche, el programa de moral de todo un año.

 

* * * * * * *

“Plan de orientación educacional” en 1925.

 

El Plan que impulsó el Consejo Gral. de Educación durante la gestión del Sr. Doldán, tendió a “crear en los niños el hábito de la labor constante, de amor por el libro, por la lectura…”, tal como se lee en el Boletín de Educación del 1-10-25, pág. XXIII.

Producido el ofrecimiento de la Escuela Pte. Beleno, es evidente que el acto de inauguración previsto para el día diez se posterga, concretándose el día 22, la inauguración de la biblioteca infantil en la Escuela Nº 1”Sarmiento”, y la que ya estaba funcionando en la escuela de Saavedra y Suipacha.  En los dos actos estuvo presente el Gobernador de la Provincia, D. RICARDO ALDAO, los ministros y autoridades escolares.  En la Escuela que lleva el nombre del sanjuanino, se impuso el nombre de otro destacado periodista, que ocupó la Presidencia del Consejo Gral. de Educación, estuvo a cargo de la Biblioteca de la Legislatura de Santa Fe –1888- y se distinguió por su tesón y autoperfeccionamiento en pedagogía, no obstante haber concurrido a la escuela de San José de Rincón, apenas diez meses.  Este hecho, demuestra la importancia de la lectura, de la perseverancia y de la capacidad crítica, para orientar la vida personal en una vocación que estimule para el trabajo, con responsabilidad.

Para ejemplo, DOMINGO GUZMÁN SILVA, es su nombre.

 

Reglamento para el funcionamiento de Bibliotecas Infantiles

Es indiscutible que una correcta organización, no solo facilita el funcionamiento de las instituciones, sino que favorece la continuidad de los proyectos.  A fines de diciembre de 1925, se publicó en el boletín del CGE, el Reglamento que establecía el objeto de esa creación: “dar las más amplias direcciones al alumnado, a los maestros y al público, cuando su acción se extienda fuera de la escuela y por lo tanto deberán hacer su acopio regular y sistemático de libros y revistas, artículos de diarios, láminas, etc. debidamente catalogados, que de un modo u otro puedan servir a los intereses de la educación y a la instrucción del niño, consulta de los maestros o solicitudes del público”.  En el art. 2º de eludía a la organización, con divisiones: “a) Escolar, b) Pedagogía, c) Cultura General, d) Ilustraciones, e) Museo Escolar y sección infantil que comprenderá secciones clasificadas en infantiles, medias y superiores”, según “convengan a la capacidad mental de los niños”.  A pesar de la evolución en los procesos técnicos de Bibliotecología, esa organización inicial a principios de siglo es la realidad en la mayoría de las bibliotecas escolares de la Provincia de Santa Fe.  Los sectores con mayores necesidades, continúan siendo los de menores recursos y con escasa disponibilidad de bibliografía.  Los datos de escuelas rurales, revelan que el recurso del diario, sirve como medio de información complementario.

El Reglamento de 1925, disponía la formación de una comisión interna, integrada por el Director, Vicedirector y tres maestros, presidida por el primero nombrado.  Esa comisión, debía dar el destino correspondiente a “los libros, revistas, lecturas, ejemplares del museo, etc”, que serían “ficheros y catalogados con el mayor escrúpulo”.  La biblioteca debía estar abierta media hora antes para que los maestros y alumnos retiraran el material o hicieron la consulta antes de comenzar la clase, siendo atribución de la Dirección -presidencia de la comisión interna- fijar el horario correspondiente.  La biblioteca, se regía por un Reglamento interno, que redactaba la comisión con las normas para consultas y préstamos, y estaba previsto que se colaboraría en “la propaganda de festivales indicados para sostener la institución”. En el art. 13º estaba dispuesto que en el día del libro -en ese tiempo, 11 de setiembre-, se organizara un acto cultural, en “los días de lectura para niños y para los padres y público”.  “Los días de lectura para los distintos grados de la escuela”, “uno por semana y por grado, durante las horas de clase, no obligatorios, y para el público una hora después”, demostraba la intención de lograr que las bibliotecas escolares fueran un centro de educación permanente.

La celebración del “Día del Libro”

Es indudable, que la elección del 11 de setiembre como fecha de reconocimiento al valor educativo de los libros; al coincidir con el Día del Maestro confirma la posibilidad de encontrar en ellos, a los educadores en los procesos de autoaprendizaje.

En el Art. 28 del Reglamento de Bibliotecas Infantiles aprobado por el CGE. de Santa Fe, se estableció que el día del libro, “se hará una fiesta popular, alusiva, que consistirá en lecturas, recitaciones o cualquier otro dato, de carácter cultural” y “dentro de su radio, cada escuela podrá hacer una colecta destinada a mejorar la biblioteca”. Firmaron ese Reglamento el Dr. Pío Pandolfo -Presidente- y D. José J. Boni -prosecretario-; una personalidad la del Dr. Pandolfo, que objetivamente habría valorado las posibilidades de apoyo oficial y las necesidades de apoyo de la comunidad, para sugerir que los maestros organizaran colectas de libros entre vecinos, cooperadores de las escuelas.

No ha cambiado esta situación, y en 1984-85 se concretaron campañas desde el Ministerio de Educación y Cultura, con colaboración de la Federación de Cooperadoras del Dto. La Capital -entre otras- promoviendo la entrega de un libro al ingresar a diversos actos de promoción cultural, con lo cual se concentraba a grupos con disponibilidad de recursos y lo obtenido, se distribuía en sectores de mayor necesidad.

 

Lo interesante es crear un BANCO DEL LIBRO, donde los alumnos que son promovidos o los egresados, depositen sus libros para futuros alumnos, cuando se trata de textos para grados. Las obras literarias, históricas o de otros contenidos, es recomendable sugerir a los niños que las conserven en sus hogares, por su valor para nuestras lecturas y como información en el momento necesario.

En el día del libro, se impone destacar la importancia de las bibliotecas.

Los días de lectura

En el art. 15 del Reglamento de las Bibliotecas Infantiles, se proponía que “las lecturas” fueran “dadas de preferencia por maestros, pudiendo aprovecharse las dotes de algunos alumnos o personas extrañas a la escuela”.

En 1925, se abrían las puertas de la escuela para estimular la participación solidaria de la comunidad.  Al detenerse en la semántica, puede sorprender la alusión a “personas extrañas a la escuela”, que seguramente es una forma de expresión para distinguir a las personas en relación de dependencia, en el organismo educativo y a los alumnos y a los educadores no profesionales, que son quienes están próximos a niños y adolescentes durante el proceso de formación, información y crecimiento, en todo su entorno.

En la amplitud de la propuesta en ese artículo, es lógico suponer que participarían escritores, periodistas y toda persona que interpretara la misión del hombre, como una vocación de servicio para el auperfeccionamiento -en primer término- y para el desarrollo cultural de la comunidad, en la imprescindible proyección social que valoriza el YO -personal-, con el NOSOTROS -solidario-, obrando todos para el BIEN COMÚN: promover  la igualdad de oportunidades y la justicia, como sustentos de la paz duradera.

Es imaginable el intercambio que se puede suscitar mediante encuentros convocados para la lectura. Más aún, si la lectura -del mensaje y de la realidad-, genera comentarios y provoca un intercambio de opiniones que contribuye al crecimiento personal y grupal.

Estas pautas de lectura compartida, actualmente se siguen en algunas escuelas, aunque sin participación frecuente de las familias y de vecinos. Es insoslayable la realidad social diferente, los nuevos recursos de la tecnología informática y educativa, las múltiples ocupaciones de los responsables de las familias; y no obstante, habría que rever esa iniciativa y desde las bibliotecas escolares como centromultimedios al servicio de la comunidad organizada, contribuir a la solidaridad para conocernos, reconocernos y desarrollarnos consolidando los lazos de la escuela–familia–comunidad.

Los libros de lectura aprobados en 1925

La reforma en los planes de estudio en el año 1922, suprimió los libros de lectura en sexto y séptimo grado.  Más tarde se notó que eran indispensables en la preparación de los alumnos, y para formar hábitos de lectura en el hogar, como paso necesario para continuar el autoaprendizaje.  El Presidente del C.G.E., Sr. Ramón Doldán, resuelve el 24 de marzo de 1925, aprobar los libros de lectura para el curso escolar 1926, considerando que “se completa el método activo del aula con el texto que sirve de lectura,  de mayor penetración de las materias, de intensificación de conocimientos y hasta de disciplina en el hogar; desde que la lectura es base de las futuras aplicaciones mentales del niño y hasta de la autoeducación que puede resultar del propio esfuerzo”, porque “un pueblo que lee, es un pueblo en marcha; un pueblo que estudia, es todo un exponente de civilización y a eso debe aspirar la escuela, a realizar esa bella conquista educacional”.  En ese tiempo, había visitado Santa Fe Pablo Pizzurno, y había donado sus libros al Consejo Gral. de Educación, para que se incorporaran a las bibliotecas escolares en tal carácter.

La resolución de los Inspectores, que en comisión dictaminaron acerca de esa selección de textos, incluía estos títulos:

1º grado “Pininos” de Pablo Pizzurno

2º grado”Progreso” de Pablo Pizzurno

3º grado “Prosigue” de Pablo Pizzurno

4º grado “Isondú” de A.E. de Correa Morales

5º grado “El escolar” de Pablo Pizzurno

6º grado “El Argentino” de E. Fernández Alonso

y “La Flor Humana” de C. Muniagurria

 

Se autorizaba en la misma resolución la adquisición a través de Economato del CGE, de acuerdo con lo que fije la Inspección.

En la generación actual de los abuelos, estos títulos quizás provoquen añoranzas y estimulen un diálogo evocativo y necesario.

Aquí, ahora, otro gesto de DON RAMÓN JUAN DOLDÁN

 

                                          “POR DIOS Y POR LA PATRIA”…

       porque así corresponde y los comprenden los seres ALTRUISTAS:

                                          Primero Dios… y la Patria, y en esa

       Concepción está la Creación, la Humanidad -fraternal y justa-…

       Como debió ser… en el PRINCIPIO, y SIEMPRE.

      

Páginas en el Boletín del Consejo General de Educación 1925-26

para  lectura de educadores¡para la comunidad!

 y los medios de comunicación social, que debieran destinar diariamente un espacio a la evocación de destacadas personalidades de Santa Fe… para “emprender una senda de transformación”, así

                               “escaparnos de la siesta de la mediocridad y ‘el no se puede’…”

                               “El reto es hoy, aquí y ahora”…

                               Así lo comprende la mayoría del pueblo.

 

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Memoria de Ramón J. Doldán…

Al concretarse el acto de imposición del nombre “Ramón J. Doldán” a la Biblioteca de la Escuela Primaria Nº 7 “Presidente Juan Beleno” de la capital santafesina, el nieto de aquel destacado maestro me entregó una cartilla de treinta y seis páginas, impresas en los “Talleres Gráficos Modernos de Castellví Hnos. de Santa Fe”, la legendaria librería de la calle San Martín esquina Falucho.

Título: “MI PASO por la Presidencia del Consejo de Educación”

Febrero de 1925 a 18 de Mayo de 1928.

Hechos y documentos / Santa Fe.

“Dos palabras”…

“Siempre sentí verdadera estima por el maestro. Siempre supe apreciar en su justo valor la obra social del maestro en la escuela.  Por eso, tanto como vocal como cuando ejercí el cargo de Presidente del Consejo de Educación, lo respeté en su dignidad y en sus derechos y fui más que el superior, el compañero y el amigo, en la noble tarea de adelanto y progreso de la escuela santafesina.  Ellos comprendieron la sanidad de mis propósitos, el idealismo que animaba mi espíritu y el entusiasmo que ponía en la tarea solidaria de bien público que se me había confiado, y con una elevación de alma digna del magisterio de mi provincia, me acompañaron con fé y con dedicación meritoria y exitosa, en la tarea de trabajo, de mejoramiento y de adelanto de la escuela en que estábamos empeñados, para honra de la provincia.

Mi preocupación diaria fueron los maestros y el progreso de la enseñanza y allí concentré todo mi empeño y toda mi labor, sin cuidarme de sacrificios ni de horas de trabajo.

Mi conciencia me dice que cumplí con mi deber y esa íntima satisfacción es la mejor recompensa a que podía aspirar como ciudadano y como funcionario.

Yo fui el animador; los maestros, los ejecutores de la obra realizada, con todo entusiasmo y con toda elevación de espíritu.

Es de justicia reconocerlo así.”

 

A partir de la página cinco, reproduce “documentos y datos” acerca de su desempeño en la Presidencia del Consejo porque consideraba que así “dirán si ese desempeño respondió o nó a la confianza y al honor que se me dispensó”.

En sucesivos capítulos explica cómo encontró la administración al asumir tales funciones y lo realizado en el lapso 1925-1928.

  1. Finanzas: Superávit.

“Recibí el Consejo, con deudas que venían arrastrándose desde muchos años atrás.  Esa deuda se cancelo en mis tres años de Presidencia. Al terminar ese período, el Contador del Consejo, me expidió el siguiente certificado:’Santa Fe, Abril 11 de 1928. – Sr. Presidente del Consejo de Educación Don Ramón J. Doldán. S/D.  De cuerdo a su pedido verbal de la fecha, me es grato informarle lo siguiente:  el superávit numérico de un millón trescientos noventa y tres mil novecientos veintisiete mil pesos, proviene de la diferencia entre los recursos no percibidos y las sumas que quedan por pagarse de los años 1925 y 1927, lo que quiere decir, que si esos recursos hubieran ingresado con regularidad, el H. Consejo contaría en la Tesorería con dicha suma y sus deudas completamente pagas. LUIS VILLA, Contador.

Luego, Ramón Doldán se refirió a la Junta de Jubilaciones…

Deuda del Consejo a la Junta de Jubilaciones

“Según publicaciones oficiales asciende a más de seis millones de pesos.  Debido a esta situación se debe a los jubilados trece meses y éstos se ven obligados a descontar sus jubilaciones, ya reducidas, en el Banco Provincial, con un nuevo recargo.”

Sueldos de maestros y administración

“Estos estuvieron al día durante mis tres años de Presidencia y se pagaban mensualmente por planilla en la Tesorería del Consejo y por giros bancarios a los maestros de la campaña.  Se estableció el Escalafón y se mantuvieron y abonaron las bonificaciones.  El sueldo inicial se fijó en $ 170.  Se estableció la ‘Semana del Maestro’, como un descanso semejante a las vacaciones de Julio y como un homenaje a los educadores.”

Plan de Estudios.

“El ‘Plan de Estudios’ y los ‘Programas Analísticos’, se sancionaron en el primer año de mi presidencia.  En ese mismo año el Consejo Nacional de Educación adoptó, previo informe de sus técnicos, para las escuelas Lainez de esta Provincia, el referido Plan de Estudios, lo que importaba un verdadero prestigio para Santa Fe y para el magisterio que contribuyó a su formación.

Ese plan de estudios y sus programas analíticos, están hasta hoy en vigencia, sin  ninguna modificación.

La Provincia de Catamarca también los adoptó.”   p. 6

(Ramón J. Doldán reiteró en las páginas siguientes las notas relacionadas con el análisis y aprobación de ese Plan de Estudios, las pertinentes resoluciones acerca de su aplicación.

Incluye una carta escrita en Buenos Aires el 6 de marzo de 1928 por el profesor Pablo A Pizzurno, contestando a su comunicación del 9 de febrero referida a la autorización de “la adopción para las escuelas nacionales” y destaca:

“…Ud. recuerda, bondadosamente, con ese motivo, mi intervención que fue por cierto, muy limitada, en la obra realizada por la Asamblea reformadora”…

Palabras del Inspector General Justo Deheza

“Conste que la redacción de estos ‘Programas Analíticos’, tantos años esperados se debe:

1º – A la fe de los maestros, inspectores y demás colaboradores en la lealtad docente al Sr. Director General de Escuelas Don Ramón J. Doldán y del  Consejo que preside.

2º – A la tenacidad con que el Sr. Doldán se emplea en todos sus actos. Santa Fe, Marzo 1º de 1934. J. Deheza”  (Justo Deheza) p. 11

Homenaje a Miguel Bouvier…

Ramón J. Doldán en ese interesante informe, tras el título “Palabras del Sr. Inspector Deheza en el homenaje póstumo al inolvidable amigo Miguel Bouvier en junio de 1941”, reiteró lo publicado en el “Boletín de Educación de Junio 1941, p. 136:

“Tu nombre y tu acción profesional se encuentran ligados a los de uno de los presidentes del Consejo de Educación de nuestra Provincia, que tiene ya conquistado en la opinión del magisterio un lugar de preferencia, digno de alto elogio por su acción integral y concretamente afianzado: don Ramón J. Doldán, que lo supo valorar y distinguir y cuyo nombre ha de ser siempre grato a su recuerdo y por eso lo menciono en este momento excepcional.”  p. 11

La obra escolar…

“Durante esos tres años, se crearon 143 escuelas, 537 grados, cuarenta y cinco talleres de manualidad, todos con el mobiliario necesario.  /…/ “…el Dr. Pío Pandolfo en una publicación aparecida el 13 de abril de 1929, en el diario “El Litoral”… dice: “1926, 1927 y 1928 (Presidencia Doldán) aumento real de niños incorporados: 14.000 aproximadamente.”

El presupuesto

“Durante esos tres años, o sea, de 1925 a 1926, el Presupuesto Escolar giró entre los 9 y 10 millones de pesos. El de 1927 fue de diez millones y el de 1928, de once millones ochocientos treinta y seis mil pesos.

En Mayo de 1928 dejé la Presidencia.

Actualmente el Presupuesto del Consejo es de veinte millones novecientos veinticuatro mil, seiscientos diez pesos y los maestros no reciben bonificaciones, el sueldo inicial se ha disminuido, los haberes deben descontarse en el Banco Provincial, con pérdidas para los mismos y la Semana del Maestro, se ha suprimido.

Hubiera deseado no hacer comparación ninguna, por que siempre resultan molestas, pero los hechos me imponen decir la verdad tal como es, aunque sienta cierta mortificación espiritual por referirme a otras labores que no acusan los saldos favorables que sería de desear, dada la gran ampliación del Presupuesto Escolar.”  p. 12

El escalafón – Inspectores…

El Escalafón existía por Reglamento y disposición del Consejo y de aplicaba con toda rectitud.

Hay aún inspectores que lo pueden atestiguar: los señores Fradegrada, Dall’Aglio, Rosa Valenti, Justina de la Peña y muchos otros. En mi discurso de Octubre de 1926, pedí al P. E. que se propiciara la Ley de Estabilidad y Escalafón (véase p. 335 de la ‘Memoria’ 1927).”

El Cuerpo de Inspectores de Consejo elaboró una nota de reconocimiento a la labor de Ramón J. Doldán, firmada por: Angelina C. Alonso de Novoa; Leonardo Silvestre; Cornelio C. Andino; Felipe Hang; Eduarda Oberti de Montenegro; Francisco Silva; A. Dall’Aglio; C. –­Carlos- Garrauño; Bruno Paz Rodríguez, G. Gerlero, Cantalicio Ramírez.”

Bancos Escolares y Visitas

En el lapso “1925 a 1928 (Mayo), de acuerdo a la memoria de 1927 se habían construido por talleres 8.865 bancos y por adquisición 12.450 bancos, en total 21.315.

Durante ese período, el presidente Doldán visitó “134 escuelas, entre las cuales están las del Norte de la Provincia, hasta V. Ocampo, El Toba y otras, por el Sud, hasta Chabás, cerca de la Provincia de Buenos Aires”.   p. 1.

Reconocimiento en diarios…

El 12 de abril de 1928, en el Diario “Democracia”, con el título “La moral de don Ramón J. Doldán”, destacaron:

“Don Ramón J. Doldán, Presidente del Consejo de Educación, abandonará el cargo antes de un mes.  Durante casi los tres años de gobierno de Aldao mereció el reconocimiento franco de su obra eficaz, sencilla, honesta.  Humilde, admitió consejos ahí donde más tarde habían de entregarle cicuta.  Libre de  prejuicios, a pesar de su hondo catolicismo, se ajustó a la ley cumpliéndola con severidad.  Fiel, desempeñó sus tareas impidiendo que la política traicionara sus convicciones y las ideas del gobernante.  Ecuánime, no impuso influencia en obstruir o facilitar la carrera profesional.  Don Ramón J. Doldán, administrador educacional, más que educacionista, realizó la misión que correspondía a su momento; vigorizar la ética del maestro, corregir hábitos de caciquismo, establecer normas mejores en la teoría y en la práctica de la enseñanza.

No hacemos más que repetir un concepto nuestro sostenido en la campaña electoral: el gobierno de Don Ricardo Aldao, salvará su nombre por la administración escolar.”  p. 20

El 25 de febrero de 1928, “El Santa Fe” publicaba con el título “Una enseñanza de moral administrativa ha resultado la investigación efectuada a la gestión escolar de Don Ramón J. Doldán”, algunas conclusiones entorno a su responsable labor:

“La ética política y administrativa del gobierno que iniciara e doctor Gómez Cello el 9 de Mayo de 1928, impuso como un imperativo la necesidad de investigar la actuación del gobierno que terminaba.

Entre las reparticiones sometidas al examen de contadores, de hombres técnicos en números, se encontraba también el Consejo General de Educación, a cuyo frente estuvo don Ramón J. Doldán, teniendo como colaboradores inmediatos a los doctores José María Cullen y José A. Giménez.

Y bien, después de casi dos años de minuciosa comprobación se ha llegado a la conclusión de que en el manejo de más de treinta millones de pesos que tuvo el Consejo no se invirtió un solo centavo en mala forma.

Y como consecuencia del informe de los contadores y el dictamen del Fiscal de Estado, el gobierno de la Provincia ha firmado un decreto mandando archivar todas las actuaciones.

El señor Doldán, al retirarse del Consejo de Educación, dejó en caja, en efectivo la suma de 164.690,55 pesos, además de una letra firmada por el gobierno por valor de pesos 120.000y como superávit numérico 1.393.927 pesos.

Ese fue el resumen económico de la administración investigada y a la cual se le reconoce oficialmente la limpieza de procedimientos y de manejos usados en todo momento.

Grato es consignar estos resultados, sobre todo por tratarse de la educación pública, por cuanto es un ejemplo para maestros y alumnos”p. 21

“Homenaje del Magisterio de la Provincia”

Durante un acto realizado con la presencia del Gobernador de la Provincia, ministros, el Presidente del Consejo de Educación Ramón Doldán, los vocales Dres. José María Cullen y José A Giménez,  habló la señora B. Dabat de López Elitchery y le entregaron un álbum con cuatro mil firmas de docentes al presidente Doldán que estaba finalizando su misión.

Luego María Elena Sheahan, representando al “Magisterio de la Capital” elogió la dedicación de las autoridades del Consejo y se refirió al “proyecto de impartir la enseñanza agrícola por medio de granjas escolares donde el alumno comprenda que no solo reside la felicidad de un pueblo en el aula primaria, secundaria o superior, sino también y especialmente, en el brazo vigoroso de los hijos que se refugian en las campiñas rurales para labrar en silencio, con tesón y perseverancia, la verdadera grandeza de la Patria! /…/

“…la creación de edificios escolares; la institución del mutualismo; la incorporación de 8.000 niños a la población escolar y la creación de escuelas, talleres y bibliotecas en un triple afán de combatir el analfabetismo con la instrucción; de propiciar el trabajo, fuente de riqueza, en el taller, y de repartir con bondad en el libro el pan bendito del conocimiento, la belleza y el ensueño.”   p. 27

12-10-1926: Discurso de Ramón Doldán

Del discurso pronunciado por el Presidente Doldán al finalizar el acto de “entrega de un álbum por el Magisterio de la Provincia”, es oportuno reiterar algunos párrafos:

“Señores maestros:  Vuestra bondad ha creído encontrar motivos para estimular mi humilde acción de funcionario y yo pienso que he hecho muy poco en bien de la escuela y del maestro; que aún queda mucho por hacer y que esa es obra de tiempo y de legislación”. /…/

“Yo que estoy a tanta distancia de la sabiduría y del genio, actúo como los hijos de Asís con la humildad consciente del que sabe que debe cumplir un deber y realizar un ideal con honradez y con firmeza de voluntad y por eso estudio, medito, escucho todas las opiniones, trabajo sin cuidarme de horarios ni de intereses personales, procurando solo ser útil a mi patria en la medida de mis fuerzas, de mis conocimientos y de mi leal sentir.  Me equivocaré, como todos los hombres, tal vez más que otros, pero de buena fe, siempre en busca de lo mejor, de lo más justo y de lo más noble.

Si no hago más, si no brillo con más luz, si mi actuación resulta pobre de iniciativas y de talento será porque habré llegado al límite de mi saber y de mis esfuerzos, pero siempre lleno de patriótica unción y sentido muy hondo el sentimiento de la nacionalidad para servirla con entusiasmo, con amor, con sacrificio, como se sirve a la madre, a la bandera, al suelo en que se nace, con todos los valores del espíritu, con todos los fuegos del corazón, con todas las incitaciones que he bebido en una tradición de gloria y de progreso, en las grandes actuaciones y en las grandes almas de ayer.

Éste es mi único haber y mi único mérito. Lo demás pertenece al Consejo, a los maestros, a los amigos de la educación, a todos los que han puesto su saber y su voluntad al servicio del niño y de la cultura popular”. /…/

“…no tengo ambiciones personales, no me inquieta la figuración, no me enorgullecen los aplausos ni las altas investiduras, no me molesta tampoco en lo  más mínimo el triunfo de los demás; no siento la perduración de ningún agravio en mi espíritu; pero tampoco sé de renunciamientos porque valoro todo lo que importa la dignidad; conozco el camino del sacrificio y jamás he dado la espalda a las tormentas del camino, ni me han quebrado nunca las injusticias de los hombres.  Estoy acostumbrado a dar el frente a los que me salen al paso, ofreciéndole caballerescamente una amistad sin doblez o dejándolos a la vera del camino con sus animosidades y prejuicios, porque entiendo que la vida de los hombres dignos es siempre de ascensión, de ejemplo, de sanas enseñanzas, de viriles procedimientos.”  /…/

“Yo soy de los que creen que hay un norte seguro en la vida; la práctica del bien, hábito honroso que eleva los valores del hombre y cimenta los verdaderos conceptos educativos de la sociedad.

Enseñemos a seguir esa senda a las generaciones de mañana y habremos asegurado las fuerzas morales de la personalidad y los más altos valores de la democracia argentina.

Antes de todo, hay que hacer buenos a los hombres para hacer grande a la nación, ha dicho con mucha verdad uno de nuestros estadistas.  Ésa es, a mi juicio, la suprema fórmula de la escuela.”

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                                      Nidia A. G. Orbea Álvarez de Fontanini.

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