Detenciones en la década del ’70.
Apuntes en torno a la historia familiar.
Durante una comunicación telefónica con un periodista de Radio del Plata de Buenos Aires y tras ser consultado acerca del uso del avión provincial para trasladar a un legislador enfermo a los fines de que estuviera en el recinto y pudiera impedir la derogación de la Ley 20.840, sancionada el 28 de septiembre de 1974 y promulgada dos días después, el doctor Néstor Kirchner expresó:
Detenciones en la década del ’70…
“Yo fui preso con Isabel en el ’74, cuando derrocaron a Jorge Cepernic” –entonces gobernador de Santa Cruz-, “fui preso en el ’75, por la 20.840, fui preso en el ’76 y fui preso en el ’77, por contrario a una ley de tipologías abiertas”…
Sabido es que en torno a aquel oscuro período de la historia de los argentinos, hay diferentes versiones.
Memoria de un compañero…
Un compañero de Kircher -Rafa Flores, según la crónica leída en la red de redes-, ha expresado que sólo estuvieron detenidos durante tres días, que “el trato siempre fue de Doctor y el interrogatorio lo realizó el propio Calloni, sin esposas ni capuchas, nos preguntó por nuestra presencia en el acto del 25 de mayo de 1973 y si habíamos visto estandartes de Montoneros… Luego de confirmar su presencia en la plaza y la de los estandartes, Calloni les pidió disculpas por no detenerlos en el cuartel, aduciendo falta de espacio y que los debería alojar en la Unidad Penal Federal 15, de la ciudad. Pocos días antes había nacido Maximiliano, el primer hijo de Néstor y Cristina.”
(En aquel tiempo, en determinados lugares tenían en cuenta las relaciones familiares y es probable que esa haya sido una de las causas del buen trato y del rápido trámite. Distintos han sido los testimonios de los detenidos pertenecientes a las Regionales de la Jotapé…)
Sabido es que el Coronel Alberto Calloni fue el jefe de Área y primer responsable del gobierno detentado a partir del 24 de marzo de 1976.
Terminada esa misión integró el Ente Autárquico Mundial 78 y se desempeñó en la Intendencia de La Matanza, donde fue denunciado por el procedimiento aplicado para la adquisición de semáforos. Después de 1983, dirigió el Centro de Residentes Santacruceños en la Capital Federal, “ya en democracia, en días de Arturo Puricelli” según se ha reiterado…
Apuntes en torno a la historia familiar…
Néstor Kirchner era estudiante de Derecho en la Universidad de La Plata y allí conoció a Cristina Elizabeth Fernández, nacida el 19 de febrero de 1953 y en aquel tiempo, “simpatizante de la JP”. Tras seis meses de noviazgo decidieron casarse, el 9 de mayo de 1975 y para sus gastos dependían del sueldo percibido en el Ministerio de Bienestar Social, que como es sabido, estaba bajo el control de José López Rega.
Terminada la carrera, Kirchner decide volver a Río Gallegos –con su compañero de ruta, Rafa Flores-, y ya estaba gestándose el primer hijo que luego nombraron Maximiliano. Luego, Cristina terminó sus estudios de abogacía: ya todo estaba encaminado para que la sociedad conyugal se consolidara…
En la memoria que aproxima a estos datos, consta que “integrado a la vida social, el joven abogado abrió un estudio en calle 25 de Mayo 264; la etapa de aprendizaje real la cubrió con consultar en el cercano estudio de “Gogo” Pérez Gallart y se pulió al asociarse al Dr. Domingo Ortiz de Zárate, apodado Chacho, renombrado abogado que integró el Tribunal Superior de Justicia hasta la dictadura.” Kirchner prefirió dedicarse a “la asesoría a comercios locales y como apoderado de empresas”, entre otras: “Automotores de Dios, La Opinión Austral, LU12, el comercio de electrodomésticos Bercon y la financiera Finsud, fueron algunos de los que contrataron sus servicios, a los que agregó la gestión de cobro y recupero”.
Durante el período del autodenominado Proceso de Reorganización, el ministro de Economía Dr. José Alfredo Martínez de Hoz logró que se aplicara la Circular 1.050 que establecía la indexación de las deudas y en consecuencia, los sectores de menores recursos perdieron sus propiedades porque no podían seguir pagando los aumentos en las cuotas por créditos hipotecarios. Sabido es que la profesión de Abogado tiene sus riesgos, porque hay que trabajar conforme a Derecho y no siempre ese Derecho coincide con la justicia. También en ese ámbito, las circunstancias van generando mayor interés por los negocios y entre algunos santacruceños suelen rememorar que “los descalabros provocados por la Circular 1.050, de José Alfredo Martínez de Hoz, fueron aprovechados por Lupín para engrosar su patrimonio inmobiliario, aprovechando su posición en Finsud, lo que le permitía comprar las deudas hipotecarias o hacer las ofertas en los remates.” (Con sonrisas el presidente Kirchner suele decir que él es casi un pingüino pero en aquellos pueblos sureños lo nombraban Lupín porque encontraban semejanza entre su perfil y el del casi legendario personaje de historietas relacionadas con la aviación.”
No fue por casualidad que hacia 1980 arrojaran una bomba Molotov hacia el frente de su estudio jurídico. Tampoco hay que justificarlo, porque la violencia engendra más violencia…
También es sabido, que producidas las sentencias en trámites por cobro de deudas, en la mayoría de los casos se procede a retirar los bienes muebles afectados y en consecuencia, ese momento deja huellas imborrables en quienes se sienten despojados de algo que les es necesario o útil para mejorar la calidad de vida.
Más historias del pago chico…
Entre las historias del pago chico se alude “al caso de Henry Olaf Aaset, alias Pilin, quien de niño vio, con lágrimas en los ojos, cómo Lupín le secuestraba el televisor”. Insisten en que “la inquina le quedó y ya de grande, abogado, desde el Frente Grande, trataba de ‘mafioso’ a su colega, Gobernador, sabiendo todos el origen de su bronca”.
Como en el universo todo parece ser un continuo girar, tiempo después el doctor se transformó de censor en defensor –afirman que es el abogado personal del Dr. Kirchner-, “su representante ante el Consejo de la Magistratura y… defensor de cuanto funcionario fuera acusado, entre ellos de quienes golpearon salvajemente a los caceroleros el 26 de abril de 2002.”
Ya las abuelas de principios del siglo veinte decían que pueblo chico infierno grande y parece ser que se ha extendido la jurisdicción del averno…
Vínculo fraternal…
Alicia Margarita Kirchner de Mercado –casada con el conductor del Sindicato Único de Petroleros del Estado conocido por el apodo Bombón-, vivió momentos de incertidumbre porque fracasaron los negocios de venta de autos y de repuestos puestos en marcha por su marido. Ella tenía una boutique con atractivos “maniquíes en la vidriera” hasta que una noche como por arte de magia, unos mineros tuvieron extrañas visiones: en lugar de ver a los maniquíes luciendo modernas prendas, se sorprendieron con la desnudez de algunas mujeres…
No fue por casualidad que terminara así aquel interesante negocio. Tampoco es por casualidad que la hermana del doctor Kirchner se actualmente reconocida sólo como Alicia Kirchner… sin aditamento de Mercado. Además, es bastante frecuente que las mujeres no agreguen a su apellido el de sus maridos, tampoco consta en los padrones electorales y tampoco en diversos trámites públicos o privados.
Alicia Kirchner: funcionaria…
Al asumir Kirchner el gobierno de la provincia de Santa Cruz, ubicó a su hermana que era una experta en asistencia social y familiar, en un cargo que le aportó suficiente experiencia como para ser miembro del gabinete nacional cuando el doctor asumió la presidencia de la Nación, el 25 de mayo de 2003.
(Mientras anoté estas referencias que pueden servir para un trabajo literario y que deberán ser corroboradas antes de elaborar cualquier trabajo histórico, recuerdo a Alberto Birri Doval nacido en 1942, joven técnico químico que a mediados de la década del ’60 partió en un Hércules hacia Río Gallegos, siendo coordinación del contingente de obreros que se reunieron en el aeropuerto de Sauce Viejo con sus pequeñas valijas atadas con hilo sisal algunos, otros con dos bolsas de tela que les servían para trasladar lo poco que tenían para llevar hacia aquel destino aún desconocido. Kuki Birri era un egresado de la Escuela Industrial Superior dependiente de la Universidad Nacional del Litoral y de la Escuela Provincial de Artes Visuales “Juan Mantovani” de la capital santafesina. Falleció en un accidente automovilístico, viajando con su esposa –un año después del casamiento- y con amigos: otro matrimonio. Hay quedado algunas señales en el primer cuaderno El Hombre y la Cultura editado en 1985 por la subsecretaría de Cultura de la Provincia de Santa Fe, en la Reseña de la Plástica de la Ciudad de Santa Fe (1830-1972) escrita por Antonio Colon: “En la exposición de homenaje a los artistas plásticos desparecidos figuró con un óleo: ‘El paredón’ pintura de concepción figurativa.” (p.86)
Lecturas y síntesis: Nidia Orbea Álvarez de Fontanini.