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2003: Ing. Jorge Obeid, reelecto gobernador de Santa Fe.

Principios del siglo XXI: frente a la potencia de la violencia.

2003: Provincia de Santa Fe, conflictos e interpretaciones.

Obeid: gobernador en su segundo período.

Obeid: entre carpas, bombas de estruendo, incendios y “escarches”.

Obeid: diálogo “informal” con los periodistas.

“Resistencia” y “tendencias” en el camino del Justicialismo.

1972: Entre la diáspora y la organización del Movimiento.

Enero de 1973: memoria desde otro sendero.

Principios de 1973: misiones en la “Jotapé”.

1º de Mayo de 1973: recomendación de Perón a la Jotapé.

25 de Mayo de 1973: el principio del fin.

 

El 10 de diciembre de 2003 -vigente la ley de lemas-, asumió por segunda vez el gobierno de la provincia de Santa Fe (República Argentina), el ingeniero Jorge Obeid votado por aproximadamente la cuarta parte de los ciudadanos que participaron en los comicios.

Principios del siglo XXI: frente a la potencia de la violencia…

Desde fines de la década del ’60 en distintas latitudes se han concretado actos de terrorismo y mediante la colocación de bombas u otros aparatos de destrucción y muerte se inició una hasta hoy interminable nómina de víctimas que en la mayoría de las circunstancias, no tenían relación directa con el motivo invocado como determinante de tan abominables decisiones.

Entre los argentinos también se han sucedido atentados desde entonces.  En las últimas décadas destruyeron el edificio de la Embajada de Israel en la capital federal –en la calle Arroyos- y en otro ataque derribaron la sede de la AMIA, asociación mutual israelita argentina.  Como suele suceder en todos esos atentados con coches-bomba, murieron personas que no tenían relación con esas instituciones.  Esos ataques terminan siendo    ofensivas contra la humanidad porque después de esas experiencias, el miedo aniquila y el terror paraliza.

Desde los últimos años del siglo veinte, ya es casi una rutina observar que la televisión difunde crecientes protestas en calles y rutas argentinas, violándose así la legislación vigente con tolerancia de sucesivas autoridades.  Algunas manifestaciones son denominadas “escarches”: ruidosas concentraciones de manifestantes que llevan pancartas de distintos grupos políticos y hacen ruido utilizando cualquier objeto para la percusión -cacerolas, tapas…; pitos y matracas-; también se expresan con gritos agraviantes e insultos verbales o escritos con pintura en aerosoles, en los frentes de determinados edificios bancarios y comerciales,  dependencias oficiales y hasta en la Catedral de la ciudad de Buenos Aires…

2003: Provincia de Santa Fe, conflictos e interpretaciones…

Durante diversos actos de la campaña electoral y días antes de otro juramento de fidelidad a la constitución desde diarios, radios y televisión, se ha destacado la trayectoria de Obeid como militante durante la década del ’70 en “la gloriosa Jotapé” -como se suele decir en las últimas tres décadas-; ejerciendo la jefatura de la “Regional 2 (Santa Fe y Entre Ríos)” en la etapa final de la resistencia peronista[1]

Esa información revela que desde su juventud ha intentado aproximarse al arte de la Política y necesariamente en ese rumbo, necesitó informarse acerca de… ¡el arte de la conducción!

(El general Perón planteó sucesivas proposiciones durante sus clases en la Escuela Superior Peronista, iniciadas el 1º de marzo de 1951. [2]

Por algo, en el acto de inauguración de aquel ciclo, expresó:

“No hay recetas para conducir pueblos, ni hay libros  que aconsejen cuáles son los procedimientos para conducirlos.  Los pueblos se conducen vividamente, y los movimientos políticos se manejan conforme al momento, al lugar y a la capacidad de quienes ponen la acción para manejarlos.  Sin eso es difícil que pueda conducirse bien.  No es la fuerza, no es solamente la inteligencia, no es el ejemplo mecánico de los métodos, no es tampoco el sentido ni el sentimiento aislado; no hay un método ideal para realizarlo, ni existe un medio eminentemente empírico.  Es decir, es una concentración de  circunstancias tan variables, tan difíciles de apreciar, tan complejas de percibir, que la inteligencia y el racionalismo son a menudo sobrepasados por la acción del propio fenómeno.  Y para concebirlo hay solamente una cosa superior, que es la percepción intuitiva e inmediata y la contracción de que ese fenómeno vuelve a reproducirse como fenómeno en la colectividad.”

“En esa acción, rápida, eficaz, donde se aplican los principios y se aprovecha la experiencia, no debe pensarse ni en el principio ni en la experiencia porque si uno analiza ambas cosas, llega tarde y el fenómeno se ha producido en contra de todo cuanto uno había previsto.  Es decir, que son acciones inmediatas que deben producir reacciones también inmediatas, donde la inteligencia interviene sólo en parte.

Hay una fuerza de distinto orden y de percepción, que los hombres tienen o no tienen y que los capacita o no para tomar por reacción inmediata lo que el racionalismo tardaría mucho tiempo para producir.”  [3]

Obeid: gobernador en su segundo período…

Sabido es que el ingeniero Obeid fue gobernador durante el lapso 1995-1999, que sucedió al gobernador Carlos Alberto Reutemann también reelecto y en funciones hasta el 10 de diciembre de 2003.

Durante los dos meses primeros meses de gestión del gobernador Jorge Obeid, se han acentuado las manifestaciones de protesta en distintos lugares: pidiendo soluciones por la falta de trabajo; exigiendo que se asuma el compromiso de ayudar financieramente a familias y empresas que soportaron las consecuencias del desborde del río Salado a fines de abril de 2003, con gravísimas consecuencias por los muertos, heridos y pérdidas irreparables… Lo menos visible y de mayor importancia es el daño sicológico y espiritual que soportó la población del oeste de la ciudad porque fueron directos protagonistas frente a esa catástrofe y la sensación de impotencia e indefensión que se proyectó también en toda la población de la capital santafesina y de distintos departamentos.  Fue tal la magnitud de esos hechos que inmediatamente varios organismos internacionales y asociaciones no gubernamentales de diferentes países enviaron su apoyo logístico y realizaron aportes de bienes destinados a “los inundados” que en realidad debieran ser reconocidos ya como “los sumergidos”.

Obeid: entre carpas, bombas de estruendo, incendios y “escarches”…

El viernes 27 de febrero, el gobernador santafesino ingeniero Obeid, expresó que no le gustan los escarches y afirmó:  [4]

Estamos en democracia, forman parte de las reglas de juego…”

Estamos en democracia; mientras no haya violencia.”

 

(Aún perdura el impacto que produjo el incendio intencional en la entrada y oficinas de la Casa Gris mientras el gobernador estaba en Rosario y la destrucción de computadoras, muebles, archivos…

Interpreto que reconocer los límites en torno a “qué es la violencia”, depende de los valores éticos; del concepto de equidad y de justicia, del escorzo filosófico que la persona sea capaz de abarcar; de su aptitud para lo religioso, lo que religa

Cuando veo pasar por la avenida Urquiza esas manifestaciones, estoy convencida de que “hubo” y “hay violencia”.  En todos los casos, hay una causa que genera la reacción.  En el campo científico hay leyes que rigen diferentes fenómenos y Perón en su prédica insistía: “…a las mismas causas obedecen los mismos efectos”…  Señalaba también que “en la historia no se repite dos veces el mismo caso en igual forma”  y por eso indicaba: “…hay que hacer trabajar el criterio propio en casa caso, porque es el criterio el que va a servir en los casos y no el ejemplo ni el principio.”  Insistía luego: “…Si nosotros conseguimos formar conductores mediante la enseñanza racionalizada de nuestra doctrina, de nuestra teoría y de nuestras formas de ejecución, habremos cumplido bien con nuestra misión.  Pero si formamos solamente hombres capaces de decir, no habremos cumplido sino la mitad.  Tenemos que formar hombres capaces de decir y hombres capaces de hacer, y en este caso se trata de formar, en lo posible, el mayor número de hombres capaces de hacer, porque en este país, hasta ahora, no hemos formado más que hombres capaces de decir.”  [5]

“Como decíamos ayer…” dijo el español Fray Luis de León cuando retornó a la cátedra; “…decíamos ayer” expresó el filósofo Miguel de Unamuno cuando retornó de su exilio en Francia y se encontró con sus discípulos en el aula de la Universidad de Salamanca…

Decíamos ayer

¿Qué decíamos y qué hacíamos algunos argentinos?…

Hoy: ¿qué decimos y qué hacemos?…

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Por algo, a principios de la década del ’70, proponía a nuestros alumnos que escribieran los lemas difundidos el 1º de enero en el Día Mundial de la Paz, aplicando técnicas caligráficas y de dibujo, luego expuestas en el “Mural” verde, algunas aún en el archivo del “servicio de educación por el arte” porque fueron cedidas por las alumnas.

Era el tiempo en que en la ENET Nº 5 “Esteban Echeverría” de Santa Fe, organizamos para compartir en las clases de dibujo y caligrafía, cajas con pinturas, pinceles, tinta, papeles… aportados por todos.  Eran momentos en que giraba la cinta del grabador y escuchábamos música seleccionada:  Vivaldi, Bach… o algunos alumnos leían las páginas de suplementos culturales referidos a obras de pintores y escultores… También fue la época en que Julio B…, en los recreos hablaba con entusiasmo de sus proyectos: estuvo en Ezeiza el 20 de junio de 1972, regresó confundido, temeroso…

Empezó el año 1973 tras transiciones contradictorias; se imponían el fanatismo y la subversión crecientes.

El Papa Pablo VI, el primer día de enero, insistía:  [6]

“Si quieres la paz, trabaja por la justicia”.)

Obeid: diálogo “informal” con los periodistas…

En la cuarta página del Diario El Litoral de la capital santafesina, el sábado 28 de febrero de 2004 en aquella nota que abarcaba cuatro columnas, con el título “Escarches: ‘Son una parte de las reglas de juego democráticas”, subtítulo “Obeid dijo que la pelea Kirchner-Reutemann no le hace bien al país”, se reprodujo lo expresado por el gobernador  “durante un diálogo informal con los periodistas”:

“Aquí confrontan dos hombres de mi partido que no son cualquiera: uno es el presidente de un gobierno que vengo apoyando desde su primer día y desde mucho antes que llegara al poder, cuando muy pocos en el país y ningún otro en la provincia lo respaldaba; y el otro (Reutemann) es el referente más importante de la política de Santa Fe, que llegó a la senaduría con casi un millón de votos.” 

Dijo luego:

“A veces uno está de un lado del mostrador, a veces está en el medio. Pero son situaciones a las que también hay que acostumbrarse.”

Refiriéndose a su asumido rol como “mediador de la confrontación”, declaró:

“Y no me siento incómodo por esto.  Todo lo contrario.  Porque más allá de que yo tenga fama de que grito y puteo mucho, soy un hombre equilibrado.  No me voy a los extremos, trato de resolver los conflictos en armonía y con diálogo”…

 “Resistencia” y “tendencias” en el camino del Justicialismo…

Ahora, desde este “lugar para el sosiego y el asombro” es oportuno rememorar algo más de la historia de los argentinos.

(Interpreto que el lapso 1955-1973, fue realmente otro período de resistencia peronista y esencialmente, porque hizo posible la demostración de la firmeza y entereza del líder del Movimiento Nacional Justicialista: Juan Domingo Perón, a partir del 16 de septiembre de 1955,  cuando fue derrocado por la autodenominada revolución libertadora -que dictó el absurdo decreto Nº 4.161 del 5 de marzo de 1956 prohibiendo hasta el uso de determinadas palabras: comunidad organizada; justicia social…  Nueve meses después, los libertadores que detentaban el poder, ya habían destruido los bienes de uso, parte de las  fachadas y de los muros de las construcciones para niños y ancianos realizadas por la Fundación -coherentes con el decreto citado-;  también ordenaron los fusilamientos del 9 de junio de 1956, anunciando luego la vigencia de la ley marcial- y con más asesinatos tres días después.

En ese tiempo ya habían sido trasladados diecisiete detenidos por causas políticas hasta la cárcel de Ushuaia en Tierra del Fuego (extremo sur del Océano Atlántico) y Arturo Jauretche durante su exilio en Montevideo, al enterarse de esa decisión necesitó expresar el poema titulado: Oración por las 17 almas, publicado en el periódico Resistencia y cuyos versos aún son rememorados:

“Por los miles de presos, los hermanos

en pontones, en cárceles y campos;

por la libertad que ellos nos gritan

y que sólo nosotros practicamos:

la libertad de ser nosotros mismos

¡Nosotros!… ¡Descamisados!”

También Jauretche escribió la canción del nomeolvides porque algunos militantes usaban esa flor como distintivo de la resistencia frente al “antiperonismo” y también como confirmación de un compromiso de lealtad con la Causa Justicialista  que esencialmente, se sustenta en la justicia y ha de proyectarse en función de la defensa de los derechos humanos…

“No me olvides, no me olvides,

Es la flor del que se fue.

No me olvides, no me olvides

Volveremos otra vez.”

Desde entonces, Juan Perón en el exilio debió soportar los vaivenes de las disputas internas provocadas por quienes pretendían ocupar determinados espacios de poder: se formaron algunos partidos autocalificados neoperonistas.  Los ciudadanos argentinos escucharon a quienes hablaban en representación de  “Unión Popular” y “Unión Popular-Populista” antes de las elecciones del 23 de febrero de 1958, cuando Perón aunque consideraba significativa la abstención estaba convencido de que era necesario una vez más, pensar primero en “la Patria” después en “el Movimiento”… y así fue como orientó al electorado del Justicialismo para que votara al candidato presidencial Dr. Arturo Frondizi (UCRI, Unión Cívica Radical Intransigente).

Tres años después, en las elecciones del 17 de diciembre de 1961, apareció otroPartido Laborista”: distinto del liderado en la provincia de Buenos Aires por Cipriano Reyes, trabajador del gremio de la carne en una época en que los frigoríficos cercanos a la capital federal -con miles de empleados-, pertenecían en su mayoría a expresas extranjeras.  Aquel Partido Laborista, manifestó su arte de la movilización el 17 de octubre de 1945 y apoyó la candidatura de Perón en las elecciones del 24 de marzo de 1946 ya que así se identificaron las boletas para esos comicios.  En 1961, en la Provincia de Santa Fe, la justicia electoral aprobó la lista de candidatos del nuevo “Partido Laborista” propuestos para los cargos de diputados nacionales y diputados constituyentes a los fines de la reforma constitucional provincial concretada al año siguiente.

De generación en generación se ha dicho que “para muestra basta un botón”.  En esa circunstancia, estos dos botones son la revelación irrefutable de que no todos los candidatos que han integrado listas en nombre del “Partido Justicialista”, han sido disciplinados en cuanto al respeto a las orientaciones del Líder, aunque algunos todavía siguen nombrándolo tras casi cuatro décadas de amparo y de ascensos, apoyándose en la sigla del “Pejota” e invocando la doctrina cuyo texto completo parece que han olvidado…

Hay suficiente información en diarios, libros y revistas útil para saber quiénes fueron leales y quienes fueron los constantes especuladores, que eran militantes con el propósito de ocupar provechosas posiciones en la pirámide de las estructuras políticas local, provincial o nacional.]

1972: Entre la diáspora y la organización del Movimiento…

En ese tiempo, tras el afán de competir para poder ocupar cargos en distintas jurisdicciones, se hizo visible la disgregación que se había generado en los últimos tres lustros entre quienes tantas veces gritaron la vida por Perón.   Así fue como el Cap. (R.) Antonio Campos -del ejército, rosarino-, oponiéndose a la decisión del Frente de Liberación Nacional que impulsaba la lista oficializada con el Nº 1 “Movimiento de Integración y desarrollo (Adherido al Frente Justicialista de Liberación” –MID adherido al Frejuli– para los comicios provinciales que se concretarían el 11 de marzo de 1973, había convocado a potenciales adherentes con la finalidad de presentar otros candidatos: en la boleta que   Lo apoyaba el Ecno. Ovidio López vinculando a parte de la militancia de la capital provincial y de los departamentos del norte de la provincia.  En el Congreso realizado entre los días 16 y 17 de diciembre de 1972, se aprobó una plataforma electoral y una lista de candidatos encabezada con la fórmula Antonio Campos-Alberto Bonino para gobernador y vice; senadores nacionales Dr. Mario A. Cabral y Ecno. Ovidio López…

[Uno de los integrantes de aquella lista -el primer candidato a senador provincial Edgar Antonio Zapata en “la boleta Nº 9” con el rótulo “Partido Justicialista”-, ha expresado: [7]

“Hubo reuniones traumáticas, donde la gente de los departamentos del sur fueron visitados por los dirigentes rosarinos /…/ y, a su vez, debieron soportar presiones de los acólitos del citado Campos. / Se tejieron sucesos lamentables, como el producido en Cañada de Gómez (cabecera del departamento Iriondo), en el domicilio del prestigioso dirigente Dn. Agulino Carbonari, donde la irrupción de los seguidores de campos, fuertemente armados, originaron la debacle entre los representantes justicialistas de los departamentos Belgrano e Iriondo, quienes consensuaban su decisión ante la cruel alternativa partidaria”.

Enero de 1973: memoria desde otro sendero…

Han sido difundidas por distintos medios, diversas acciones que caracterizaron el perfil político del joven Jorge Obeid, diamantino, residente en la capital santafesina.  El periodista Miguel Bonasso ha recordado -y así lo difundió en un libro-, que el jueves 18 de enero de 1973, se desarrolló una conferencia de prensa de “la JP” y “los candidatos juveniles convocaron por su lado a periodistas y leyeron un mensaje de Galimberti, que seguía prófugo a raíz del proceso abierto en la Cámara Federal.” /…/  [8]

Luego, el periodista Bonasso escribió:

“En la conferencia de la JP, Leonardo Bettanín hizo una encendida apología del dirigente perseguido, que le había puesto el apodo de ‘Perejil’, y con el que tenía notorias diferencias;  Jorge Obeid (candidato a diputado por Santa Fe) sostuvo que las insurrecciones populares y el accionar de las ‘formaciones especiales’ habían sido ‘los factores que facilitaron el actual proceso electoral’…”  [9]

Principios de 1973: misiones en la “Jotapé”…

En aquel tiempo, se multiplicaron los periódicos de distintas tendencias que informaban sobre actividades políticas y estrategias electorales.  Sabido es que en a principios del ’73, viajaron a Madrid con el propósito de dialogar con el General, el entusiasta Jorge Obeid y su compañero de senda: Rodolfo Gabriel Galimberti, que había largado “la bomba de las milicias armadas” -dicho en un sentido metafórico-, luego expulsado y actualmente fallecido.   Acerca de ese viaje, el periodista Bonasso recuerda que Galimberti no hizo declaraciones en el aeropuerto español de Barajas porque primero necesitaba hablar con el General y “esta vez, el Loco no fue recibido de inmediato.  Le aguardaba una inquietante amansadora.”

Mientras tanto, Cámpora seguía afirmando que “Perón era el Jefe y él, un soldado”.

            1º de Mayo de 1973: recomendación de Perón a la Jotapé…

Transcurría el día del trabajo y de los trabajadores y Bonasso destaca: “El 1º de mayo, el Jefe recibió a Galimberti y Obeid.

Al salir de la quinta, el Loco les dijo a los periodistas que no podía hacer declaraciones. ¿No puedo hablar, porque me juego la cabeza”, dijo el decapitado.  También guardó silencio en Ezeiza.  En Buenos Aires le esperaba todavía la reprimenda de “la Orga”, que no sabía cómo calmar la ira del Viejo.  Le ordenaron dar un paso atrás y mantenerse en un discreto segundo plano.

Las Regionales de la JP acataron la purga y suspendieron una proyectada “marcha de la liberación”, “para evitar que los enemigos del país saquen ventaja”.  “Querían hacer buena letra ante el Viejo, que en su mensaje del Día de los Trabajadores, había pedido “suma prudencia y serenidad”.   Los canales de televisión después trasmitieron las opiniones de Perón que estaba junto a Cámpora en uno de los estudios de TVE –Televisión Española-: “El país no puede ser pacificado por el Ejército y la policía, sino por un poco más de libertad y mucha justicia.”

(Por algo S. S. Pablo VI, el primero de enero de 1972 al celebrarse el “Día Mundial de la Paz” anunció el lema: “ “Si quieres la paz, trabaja por la justicia.”  Afirmó al año siguiente: “La paz es posible.”)

25 de Mayo de 1973: el principio del fin…

Sabido es que cuando asumió el presidente Dr. Héctor Cámpora (25-05-1973), participaron en los actos oficiales algunos presidentes hispanoamericanos -entre ellos el socialista chileno Salvador Allende, asesinado el 23 de septiembre antes de asumir el general Augusto Pinochet- y también representantes diplomáticos.  Diarios, revistas y libros reiteran que en la organización del acto de asunción del Tío -como nombraba la juventud al odontólogo de San Andrés de Giles-, tenían funciones concretas los dirigentes de las regionales de “la J.P.” y lógicamente, puntual estaba allí Jorge Obeid.  Del encuentro con el presidente cubano Osvaldo Dorticós Torrado, se ha recordado:

“Entre apretujones y aplausos pudieron abrirse camino hasta la suite presidencial.  En los pasillos había cientos de dirigentes tratando de saludar a los dos mandatarios, pero Cámpora tuvo especial deferencia con los siete muchachos que conducían las Regionales de la JP: Juan Carlos Dante Gullo, Jorge Obeid, Miguel Ángel Mozé, Guillermo Amarilla, Ismael Salame, Raúl Orellana y Hernán Osorio.”  [10]

Ya en la casa de gobierno, “la JP organizaría cordones afuera para abrirles un camino a los invitados”.  Fue entonces cuando Juan Dante Gullo le ordenó a un teniente coronel que se retirara: “…nosotros nos vamos a encargar de que por aquí entre quien corresponde.” Así fue como desde ese momento, “…ocupaban el lugar los jóvenes de los brazaletes.  Entre los que se destacaban los otros seis jefes de las Regionales. /…/ Con Bettanín, con Obeid, con el Negro Amarilla y el Turquito Salame, salieron al balcón y vieron a la Plaza de Mayo como la veían Perón y Evita. [11]

Luego les conectaron los micrófonos y esos chicos, que no llegaban en promedio a los veinticinco años, le pidieron al ‘gigante invertebrado’ que organizara cordones y dejara pasar a los invitados.  A partir de ese momento, dijeron, el control del acto estaba a cargo de la JP.  Abajo, en el sector más conflictivo de la Plaza, los periodistas registraron una escena nunca vista: los policías que habían gaseado a la multitud comenzaron a retirarse de sus posiciones, custodiados por Dardo Cabo y otros dirigentes juveniles que los preservaron de la furia popular.”  [12]

Desde la noche anterior, en las cárceles estaban esperando que se firmara un decreto de amnistía -o de indultos- y al ser autorizados para comunicarse entre distintos pisos, el santafesino Francisco Paco Urondo logró que se acercaran a su celda los sobrevivientes del 22 de agosto de 1972 en Trelew: Alberto Camps, Ricardo René Haidar y María Antonia Berger; estuvieron grabando hasta la madrugada algunas evocaciones de aquella trágica jornada y después Urondo publicó su libro La Patria fusilada…  Así fue como Cámpora en ejercicio del Poder Ejecutivo, necesitó comunicarse con el líder para informarle:

“Como la situación era muy difícil, toda vez que llegó a quererse tomar la cárcel la única posibilidad era reprimir violentamente, se decidió que lo más conveniente para evitar hechos más graves era indultar a los presos políticos”.

“A las nueve, Abal Medina subió a la terraza y asomó sobre el muro con el megáfono en la mano, para anunciar que ‘los compañeros’ iban a ser liberados esa misma noche.  El anuncio fue festejado con una gigantesca ovación.  Según El Descamisado, en ese mismo momento

‘el compañero Cámpora informaba a dos dirigentes de la Juventud Peronista, Jorge Obeid y Hernán Osorio, que el decreto de indulto estaba firmado.  Estos se reunieron con los ministros de Justicia e Interior para completar la lista de presos’.

A las diez de la noche, un furriel del penal comenzó a tipear, en una vieja Remington de la Alcaidía, un acta… /…/ donde constaba que los legisladores procedían, ‘bajo su responsabilidad’, a liberar a los presos que acababa de indultar el Poder Ejecutivo”.[13]

(Ya son tantos los botones para muestra… que podrían servir para varios uniformes militares aunque ya esos hábitos de distinguirse por la vestimenta, en algunos territorios tienden a desaparecer…

Percibo el eco de una voz…

“…soy un hombre equilibrado.  No me voy a los extremos, trato de resolver los conflictos en armonía y con diálogo”…

Se impone la necesidad de otra prolongada pausa.)

                          Nidia Orbea Álvarez de Fontanini.  Verano de 2004.

 

 

 

[1] Entre comillas, información reiterada por el actual diputado nacional Miguel Bonasso, otro de los integrantes del grupo Montoneros que ha editado una interesante obra: “El presidente que no fue” – Los archivos ocultos del peronismo. Buenos Aires Planeta-Ejemplo de la Argentina; 4ª ed. abril de 1997.

[2] “Conducción Política” – “Clases en la Escuela Superior Peronista – General Juan Domingo Perón” /…/ “1ª clase 15-03-1951; siguientes: 20-03; 05-04; 12-01, 19-04 y secta clase 20-05-1951.   (Ver inserción en el diario de sesiones de la Cámara de Diputados de la Nación, 19 de diciembre de 1952 (p. 2199-2291.) # Luego se editaron libros con ese título y similar contenido, porque un cotejo personal ha permitido encontrar algunas diferencias, algo parecido a lo que sucedió con el libro Doctrina Peronista que en la primera edición –libro de aproximadamente 7x 12 cm, con tapas amarillas-, tuvo impresas palabras que desaparecieron en la siguiente… (Lamento que durante el peregrinaje de una parte de nuestra biblioteca familiar a partir de septiembre de 1955, los estragos de la humedad hayan provocado su destrucción…)

[3] Cámara de Diputados de la Nación, Reunión 47º, diciembre19 de 1952, p. 2201-2002.

[4] Diario El Litoral.  Sábado, 28 de febrero de 2004; 1ª Sección, Política, p. 4.

[5] Cámara de Diutados, 1952, p. 200-2003.

[6] S. S. Pablo VI es el número 260 en la sucesión Papal, cumplió esa misión desde el 21-06-1963 hasta 06-08-1978.  Su nombre : Giovanni Battista Montini; nació en Concesio, cerca de Brescia (26-09-1897) y falleció en Roma (06-08-1978), en el Día de la Transfiguración. # Otros lemas: 1969: “La promoción de los derechos del hombre, camino para la paz.”  1970: “Educarse para la paz a través de la reconciliación.” 1971: “Todo hombre es mi hermano.” 1972: “Si quieres la paz, trabaja por la justicia.” 1973: “La paz es posible.” /…/

 

 

[7] Zapata, Edgar Antonio. Historia de los gobiernos peronistas en Santa Fe.  Santa Fe, Ediciones Sudamérica Santa Fe, agosto de 1994, p. 71-80.

[8] Bonasso, Ob. cit. P. 363

[9] Ibidem, misma página.  El autor expresa “Jorge Obeid (candidato a diputado por Santa Fe)” y es oportuno aclarar en el  ’73 en la provincia de Santa Fe, la lista de candidatos del “Frente Justicialista de Liberación” -impulsada apoyada por el Líder del Justicialismo aún residente en Madrid-, no incluía a Obeid.

[10] Idem, p. 456.

[11] Id., p.. Bonasso ha destacado que durante el verano del ’49,  “recibieron una bicicleta y un beso de Evita: Juan Manuel y Fernando Abal Medina (4 y 2 años en aquel momento); Mario Firmenich, Rodolfo Galimberti, Leonardo Bettanín y Juan Carlos Dante Gullo.   Con tales datos, es posible imaginar cómo habrán vivido aquellas experiencias adolescentes en el ’73…

[12] Los nombrados son: Leonardo Bettanín (Perejil); Guillermo Amarilla (El Negro) e Ismael Salame (Turquito). Dardo Cabo ((Flaco).

[13] Bonasso, ob. cit. P. 479.

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