Estás aquí
Inicio > Historia > Gobernadores Santa Fe > 1874-1878:  Gobierno de Servando Bayo

1874-1878:  Gobierno de Servando Bayo

27-04-1874: primeras decisiones del gobernador Bayo.

21-05-1874: mensaje desde la Legislatura.

12-04-1874: sucesos en Buenos Aires.

Informaciones periodísticas.

1874: síntesis sobre otros hechos relevantes.

Justicia y Fuerzas de Seguridad.

1874: mensaje del gobernador.

1876: policía de campaña y comisarios de Distrito.

Conclusiones sobre la Policía.

Presidencia de Nicolás Avellaneda.

Relaciones entre el Estado y la Iglesia Católica.

Desde la Diócesis de Paraná: impulsos del Obispo Gelabert.

Brote anticlerical en Buenos Aires .

1876: apoyo a la Iglesia Católica.

Tierras, indígenas, inmigración.

1875: movimiento de inmigrantes y de indígenas.

1874-1877: más colonias.

1876: Topografía y plano de la ciudad,

1876: avance hasta los ríos Negro y Neuquén.

Situación en Villa Constitución.

1876: Invasiones de aborígenes.

Expediciones al norte santafesino.

01-06-1874: creación y evolución del Banco Provincial.

Informes del gobernador relacionados con el Banco de la Provincia.

Especulaciones desde el Banco de Londres.

Posición de Avellaneda ante el Congreso Nacional y todos los habitantes.

Mayo de 1876: tras el alejamiento del diplomático y ministro Lucas González.

01-06-1876: agravamiento del conflicto en Rosario.

Coherente actitud del ministro Bernardo de Irigoyen.

23-06-1876: nota del ministro al encargado de negocios británicos.

Misión del presidente del directorio del Banco de Londres.

Ejemplar firmeza del gobernador Bayo.

Deudas, recursos y empréstitos.

1875: Empréstito de Londres – Murrieta y Cía.

1876: Deudas fiscales y giro en descubierto.

Otras conclusiones en torno a Murrieta y Cía.

Derivaciones en la década siguiente.

1877: Ley de Aduanas.

Política educativa.

1874: mensaje del gobernador

Más reflexiones acerca de la importancia de la educación

13-08-1874: Ley de Educación

Acciones en áreas de Educación.

Preceptores

Comisión de Instrucción Pública

Espera de subvenciones nacionales

Libros para “los niños pobres”

Educación: vocación y aptitud

Aprobación del Reglamento de Escuelas

1875: Docentes y necesidad de una escuela normal

Maestros: ocho meses sin cobrar

Subvención nacional – Censo escolar

De 6 a 14 años: solo el 21% matriculados

22-09-1877: aprobación del Reglamento de Escuelas

1877: crisis en Buenos Aires; epicrisis en Swantling

Último desprendimiento de Don Juan Manuel

Breve aproximación biográfica

24-04-1877: funerales en Buenos Aires

Valoraciones en el siglo siguiente

1878: cada grupo con su “cintillo rojo” o “azul”

Intento de asesinato y conspiración en 1877

Avance desde el norte

Casi, misión cumplida

 

En la provincia de Santa Fe, el 7 de abril de 1874 asumieron sus funciones el gobernador Servando Bayo y el vicegobernador Juan Manuel Zavalla, quien lo apoyó oportunamente en todas sus iniciativas.

El gobernador Bayo era católico y fue un perseverante opositor al ex gobernador José Nicasio Oroño, corondino y católico, aunque fue acusado de masón por haber promulgado la ley de matrimonio civil y la que creó los cementerios públicos, servicios que hasta ese momento estaban exclusivamente a cargo de la Iglesia Católica Apostólica Romana.

Es necesario comprender que la creciente inmigración, como la Constitución Nacional lo había previsto, provocó que la población se integrara con distintas nacionalidades y distintas creencias religiosas.  El propósito de Oroño fue el de solucionar esas dificultades porque surgía una discriminación no deseada debido al vacío legislativo: no podían anotarse los nacimientos de los hijos de los colonizadores que no eran católicos, aunque al convocarlos se sabía que eran protestantes o judíos.

(Un gesto del gobernador Oroño es otra señal de su sentimiento cristiano: Tras la convención reformador de la Constitución (1860) y teniéndose en cuenta la guerra del Paraguay, en 1866 se reunieron los diputados de las provincias argentinas para analizar la vigencia de los derechos de exportación y el 12 de septiembre se aprobó la reforma, suprimiéndose “las palabras que limitaban su vigencia” por “una escasa mayoría” porque “el sentimiento de unión nacional primó esos días en Santa Fe”.

El gobernador Nicasio Oroño, “identificado con el espíritu de unión que reinaba en el Congreso deseó expresarlo a las provincias hermanas, eligiendo para ello a la de Entre Ríos, unida a Santa Fe desde los días iniciales de nuestra historia. En el cabildo local se conservaba hasta entonces la moharra de una lanza que había pertenecido al General Ramírez, el Supremo Entrerriano, perdida por éste en las escaramuzas tenidas con las tropas de López en las lomas de Coronda, cuando su infausta lucha con Santa Fe.  Luego de hablar al respecto con el Diputado de Entre Ríos… doctor Martín Ruiz Moreno, el gobernador de Santa Fe puso en sus manos el trofeo y una nota al gobernador de Entre Ríos”, escrita el 19 de septiembre de 1866. [1]

(Sabido es que la cabeza de Pancho Ramírez fue enviada a la capital santafesina, que estuvo expuesta frente a la plaza principal cerca de la puerta de la Catedral de la ciudad y luego la enterraron en el cementerio de los Mercedarios -donde enterraban a pobres y esclavos-, ubicado en la manzana oeste, en la calle 9 de julio entre las actuales General López y Monseñor Vicente Zazpe, parte del terreno adquirido por el protomédico Manuel Rodríguez casado con Manuela Rodríguez del Fresno, padres de Josefa casada con el Brigadier López y lugar donde se construyó la casona que ellos habitaron y es la sede del Archivo General de la Provincia.

Aquella sombra sigue siendo otra señal insoslayable en la historia de los santafesinos, de los argentinos…)

27-04-1874: primeras decisiones del gobernador Bayo.

El 27 de abril de 1874, decidieron resolver algunos asuntos pendientes en torno a las finanzas provinciales y con la intervención del Ministro General de Gobierno en presencia del Escribano Público de Gobierno Francisco B. Clucellas, se acordó con don Leopoldo Guerra, “dejar sin efecto el contrato” de agosto y su modificación de febrero y que una vez presentada la cuenta correspondiente y verificada por la Contaduría General, “el P. E. extenderá una Letra a favor del acreedor, contra la Receptoría de la Ciudad del Rosario, con más el interés convenido y acumulado del uno por ciento mensual, pagadero el 1º de junio próximo”, estableciéndose plazos para los siguientes pagos.  [2]

21-05-1874: mensaje desde la Legislatura…

El gobernador Servando Bayo, el 21 de mayo de 1874 leyó su mensaje ante la asamblea legislativa y refiriéndose a la situación política en la provincia, manifestó:

“La rebelión de Entre Ríos, que por segunda vez enarbolaba la bandera sangrienta del degüello y de exterminio para la propiedad, recibió un golpe de muerte en la batalla de Don Gonzalo, debido a la energía que supo desplegar el Gobierno de la Nación.

  La Provincia de Santa Fe, como siempre, fue la primera en secundar los esfuerzos del Señor Presidente de la República, ocupando en el teatro donde se agitaba la rebelión, el puesto de honor que el deber le imponía, y la autoridad del P. E. le designaba… Sus hijos, derramando su sangre, permanecieron fieles hasta el último momento, sin desmentir sus cualidades de subordinación y de respeto a las órdenes de sus Superiores.”

“Ante la buena administración de justicia no puede existir el temor de que prevalezcan los abusos del Poder, ni los golpes de autoridad a que siempre estamos expuestos.”

Recordó los problemas de la Cámara de Justicia en la etapa final del gobierno de don Simón de Yriondo e informó:

“Hoy la Exma. Cámara está completa en el número de sus miembros titulares, y por las aptitudes del personal que la componen, me es satisfactorio anunciaros, que abrigo grandes esperanzas, de que los interese públicos y de particulares serán servidos con ilustración y rectitud.”

Mientras tanto, no se habían constituido los Tribunales inferiores: en la segunda circunscripción funcionaban dos jueces y uno atendía dos juzgados.

Reconoció que en Rosario, se ha “tenido que presenciar con frecuencia, que solo un Juez asistía al despacho de los tres Juzgados, porque las licencias a los otros jueces se prodigaban con facilidad: rara vez hemos visto funcionar a los tres Jueces a un tiempo por un período regular…”

Destacó el gobernador Bayo que “sucede con frecuencia, que un Juez al mismo tiempo que solicita la licencia, se pone en viaje sin esperar se le conceda, con la seguridad que ha de conseguirla, y así sucede, o por condescendencia, o por otras causas» y destacó que «sucede también que algunas veces no se pide la licencia por todo el tiempo que se necesita, sino por un término más corto, y una vez obtenida en esta forma, empiezan a solicitarse las prórrogas», actitudes que demostraban la necesidad de «adoptar otras medidas para evitar que estos hechos tengan lugar, reformando la Ley del caso, para restringir la facultad conferida o reglamentarla por lo menos”. [3]

12-04-1874: sucesos en Buenos Aires…

El 12 de abril de 1874 se realizaron las elecciones presidenciales, “relativamente tranquilas” como informaban los diarios porteños, salvo en “Balbanera y Concepción, donde hubo los clásicos cantones con armas, y asaltos a las mesas receptoras, en las demás parroquias triunfó holgadamente el mitrismo.  Lo mismo ocurrió en la campaña”. La provincia de Santa Fe había anunciado su apoyo a la fórmula integrada por Avellaneda-Costa.

El 20 de mayo de 1874, al grito de ¡Revolución!… se acercaron algunos manifestantes hasta la casa del Mitre y el general les pidió ¡calma!… El 12 de junio se reunieron los colegios electorales: triunfó la fórmula Avellaneda-Acosta con 146 votos de todas las provincias, excepto Buenos Aires, San Juan y Santiago. Siguieron hablando de ¡revolución!… pero consideraban que era necesario esperar que terminara el mandato del sanjuanino Faustino Valentín Quiroga y Sarmiento, reconocido como Domingo Faustino Sarmiento. El 24 de septiembre de 1874, comenzó “la guerra civil”…

Informaciones periodísticas…

Expresa el historiador José María Rosa que “Sarmiento anunciaba en Tribuna  que los indios de Catriel ‘serían traídos por Mitre a Buenos Aires para que con sus lanzas rompan todos los objetos de arte de la calle Florida’.  El Boletín de la Revolución, órgano clandestino, le contestaba: ‘Sarmiento está sordo y ciego.

Los que rompieron las vidrieras de Baqué y atropellaron a las señoras porteñas fueron los santafesinos que acudieron a sostener el presidente de hecho’.  Se refería a los milicianos de Nelson traídos en defensa de Buenos Aires.”  [4]

(Después de breves combates en Santa Rosa y La Verde, el 2 de diciembre de 1874 al ser alcanzado Mitre en Junín, aceptó la rendición y desarmaron “a “sus pocos gauchos, 41 jefes, 195 oficiales y algo más de 3.000 hombres de tropas, el remanente del ejército de Mitre. Los demás habían muerto, estaban prisioneros o dispersados.  Los indios de Catriel se entregaron después de lancear a su cacique”.  En esa circunstancia, juzgaron en parlamento a Cipriano Catriel y condenaron a muerte, porque dos años antes –en la batalla de San Carlos, el 8 de marzo de 1872-, los había obligado a combatir contra Calfucurá y a favor de los cristianos… Asumió Juan José Catriel como cacique, pero luego abandonó la reducción que le había asignado el gobierno.

1874: síntesis sobre otros hechos relevantes…

Sabido es que el doctor Simón de Iriondo era gobernador hasta el momento de asumir Servando Bayo y en un discurso se ha destacado que también cooperó para evitar enfrentamientos armados, “de la manera más activa y eficaz, recibiendo por esto la más ilimitada confianza del Presidente de la República.   Estos hechos inspiran una satisfacción que debe halagarnos y servir a todos de estímulo.  La cuestión de elección de Presidente de la República, que ha de suceder en el mando al actual, tenía agitados todos los ánimos, sin que hubiera quedado una sola Provincia, que con ardor, lo hubiese tomado parte en la lucha.  La Provincia de Santa Fe, pudo decir que se encontraba en una situación especial.  La rebelión de Ricardo López Jordán la amenazaba de inmediato y con tenacidad.  Tenía a la vista la elección de Diputados Nacionales que se practicó el 1º de febrero del corriente año.  Como sus demás hermanas, participaba con entusiasmo de la cuestión Electores de Presidente, en que estaba comprometida la República.  Y finalmente, tenía en su seno la elección de Gobernador, asunto que debía llamarle, como ha sucedido, de una manera activa y preferente su atención”.   [5]

Justicia y Fuerzas de Seguridad

1874: mensaje del gobernador…

En su primer mensaje a la Legislatura, el gobernador Bayo dijo:

“Señores Representantes esta falta de hombres competentes para el desempeño de la judicatura en que nos encontramos con tanta frecuencia, la atribuyo especialmente a dos causas: a su escasa renta, y a la irregularidad del pago.  De esto son responsables los Poderes colegisladores.  Rentemos bien el empleo, y arbitremos los recursos para satisfacerlo; por mi parte os haré conocer oportunamente mis opiniones al respecto”.

(Motivos similares se reconocen cuando se plantea la lentitud en los procedimientos y en los fallos en los umbrales del tercer milenio.)

Después, el gobernador Bayo expresó:

“En la campaña de la Provincia podría decirse que no se conoce la administración de justicia, como sus interese lo exigen, o que la que existe, está muy distante de responder al gran principio de justicia pronta y barata.  Sus vecinos, en defensa de sus derechos, tienen que recorrer largas distancias, hasta llegar a los centros de población den busca del Juez que debe hacerle justicia, aun por pequeñas cantidades.  Creo conveniente adoptar otro sistema del que rige, modificando su organización y ampliando las facultades de los que desempeñan la judicatura”.

(Percibo que existen semejanzas entre las causas que provocaban esas dificultades en la Justicia en el tiempo del gobernador Servando Bayo y las existentes durante la presidencia del Dr. Carlos Saúl Menem a partir de 1989…

A fines del siglo XX, es insoslayable el documento difundido por la Asamblea Episcopal presidida por Monseñor Estanislao Karlic -Arzobispo de Paraná, Entre Ríos- cuyas vicepresidencias primera y segunda ejercen Mons. Emilio Bianchi Di Cárcano y Eduardo Mirás respectivamente; siendo secretario general Monseñor José Luis Mollaghan.  En ese Mensaje difundido por distintos medios, dirigido a los tres poderes del Estado Nacional, los Obispos declararon la existencia de una “crisis de valores” que provoca una “sensación de querer vivir sin ley, o de poder modificarla para servir a intereses sectoriales”, promoviéndose en consecuencia “la corrupción privada y pública”.)   [6]

1876: policía de campaña y comisarios de Distrito.

En 1876, con respecto a la Policía de campaña y a los Comisarios de Distrito, el gobernador reconoció que se desempeñan “con la mejor voluntad… ejerciendo un acto de verdadero patriotismo, pues, a más de no gozar de emolumento alguno por sus servicios, a veces proporcionan sus caballos, y hasta el alimento, a los individuos que componen sus partidas, por lo cual no puede exigirse más de ellos”.

Propuso reformar el Reglamento de Policía Urbano y Rural, por contener disposiciones que no pueden aplicarse en la actualidad por estar derogadas por leyes posteriores o por hallarse confundidas con las atribuciones de las Municipalidades.

Se habían nombrado comisiones especiales para concretar “un nuevo enrolamiento y organización de toda la Guardia Nacional” conforme las instrucciones del gobierno de la República. Informó el gobernador Bayo que en ese momento, “existen en la Provincia 15.000 Guardias Nacionales, distribuidos en 17 Batallones de Infantería, inclusive uno de Marina y en 20 regimientos de Caballería.  De estos Cuerpos, la mayor parte se hallan ya organizados, numerados y con la competente dotación de Jefes y Oficiales”.

Conclusiones sobre la Policía…

La organización de la Policía no había variado desde 1871: en la Capital y en Rosario funcionaban los Piquetes de Gendarmes; en los pueblos y campañas operaban las “Partidas de Policía, y Celadoras a las órdenes de los Jefes Políticos, Subdelegados de Policía, Comisarios Generales y Jueces de Paz”.

El gobernador Bayo manifestó ante los legisladores:

“Me contraigo con empeño a poner en juego todos los medios a mi alcance, para que la Policía sea activa y perseverante en la persecución de los delitos, y particularmente del robo y del asesinato que destruye tanto nuestro progreso.  Con constancia y la aplicación rigurosa de las penas establecidas por la Ley, estoy seguro que mucho hemos de conseguir”.

Destacó el gobernador que “el Comisario comisionado se ocupa también de hacer los trabajos necesarios para formar un archivo general de marcas de toda la Provincia”, para que tenga “más seguridad el hacendado, desde que en la Provincia no podrán haber dos marcas iguales”.

Expresó su agradecimiento a la “Sociedad Rural” de Rosario por la cooperación en el control del abigeato.

Mientras tanto, el gobierno nacional seguía ejerciendo el control de las fronteras y el gobernador Bayo aclaró que “a consecuencia de la rebelión de Ricardo López Jordán, las fuerzas que guarnecían la segunda línea del Norte, fueron trasladadas a la Provincia de Entre Ríos, siendo sustituidas por otras de Guardias Nacionales movilizadas al efecto; aún se hallan en aquel lugar, pues el ‘Escuadrón de Seguridad’ que es el destinado para ocuparlo, se encuentra recién en marcha, con este objeto”.

(Después de la expedición del General Obligado al norte santafesino, resultó evidente que los aborígenes evitaron cruzar la línea  allí establecida…)

 

Presidencia de Nicolás Avellaneda…

El 12 de diciembre de 1874, asumió el Presidente Nicolás Avellaneda, “con expectativa de los congresales y ausencia del pueblo”, destaca el historiador Rosa y agrega:

“Sarmiento se lo entrega deseándole que se haga digno del sillón ‘donde Rivadavia y Sarmiento se sentaron’.

Juran los ministros Simón de Iriondo interior, Santiago Cortínez, hacienda, Onésimo Leguizamón instrucción pública, Adolfo Alsina guerra, de relaciones exteriores se hace cargo interinamente el médico Pedro A. Pardo, porque ha sido nombrado Félix Frías que está al frente de la legación en Chile.” [7]

(Hay que tener en cuenta que del doctor Simón de Iriondo a cargo del Ministerio del Interior, recién había terminado sus funciones como gobernador de Santa Fe: en 1872, había promulgado la ley que autorizaba un empréstito para la creación del Banco Provincial”.  Dos años después, el 1º de junio de 1874 se sancionó la ley de creación de bancos de emisión y de descuentos.

Acerca del ministro de Hacienda Cortínez hay que destacar que disminuyó el gasto público pero debió enfrentar la crisis financiera creciente debido a la restricción del crédito bancario y la disminución de las importaciones, hechos que incidían en el costo de vida porque aumentaban los precios, ya que se consumían mercaderías importadas porque la producción industrial nacional era mínima.)

Relaciones entre el Estado y la Iglesia Católica

Desde la Diócesis de Paraná: impulsos del Obispo Gelabert…

En aquel tiempo, don Facundo Zuviría apoyaba la labor del Obispo José María Gelabert y Crespo.  Su constante iniciativa de levantar templos, fue destacada por el sacerdote jesuita Padre Guillermo Furlong al expresar que “la acción de Monseñor Gelabert fue titánica y así se explica que, si no día a día, ciertamente mes a mes, inauguraba una nueva iglesia o capilla, y la Curia se veía en apuros y tenía que hacer malabarismos para hallar párrocos o capellanes para tantas nuevas fundaciones”; testimonios reiterados por el Presbítero Edgar  Gabriel Stoffel en una interesante biografía.

Brote anticlerical en Buenos Aires …

Aunque Mitre perdió las elecciones presidenciales pero la mayoría de los estudiantes universitarios bonaerenses lo apoyaban y también la masonería, porque lo habían reconocido como miembro.

Hay que tener en cuenta que años antes, la masonería había logrado unir a progresistas, liberales y federales, entre ellos “el Dr. José Roque Pérez, antiguo rosista, Derqui “grado 18º de las logias cordobesas en tiempos de los Reinafé” y “Urquiza había sido iniciado en la masonería pues ostentaba el supremo grado 33”; Mitre (grado 3º y elevado); Sarmiento de grado 18 a 33.

Desde décadas anteriores, las disidencias con la Iglesia Católica eran evidentes en distintas localidades.  En enero de 1875 se fundó el Club Universitario que organizó “un mitin de protesta contra el Arzobispo” convocando para el 28 de febrero en el Teatro Variedades.  El obispo Monseñor Aneiros -que era diputado nacional-, había dispuesto la modificación de algunas parroquias y devolvió el templo de San Ignacio a los jesuitas, desalojados por orden del rey de España Carlos III en 1767 y que regresaron un siglo después para continuar con algunos proyectos educativos.

Terminado el mitin de los estudiantes universitarios -apoyados por otros sectores sociales-, “algunos exaltados cometieron desmanes contra la Curia reprimidos por la policía; pero otros llegaron al colegio del Salvador situado en una zona excéntrica y poco poblada consiguiendo prenderle fuego”.  [8]

Se  ha destacado que “el hecho produjo un desborde pasional, fue agriamente comentado por la prensa y en los ambientes populares y estudiantiles; además monseñor Aneiros había sido electo diputado nacional por el partido autonomista.  Los estudiantes realizaron un acto de protesta en el teatro Variedades y luego algunos grupos atacaron el palacio arzobispal y causaron destrozos, mientras otra parte de los concurrentes al teatro Variedades se dirigió al Colegio del Salvador y lo incendió al ser muerto uno de los manifestantes por alguien del interior del colegio.  Esos desmanes fueron condenados por la opinión pública y el gobierno decretó el estado de sitio por treinta días”.  [9]

“La repercusión del hecho fue estruendosa.  Se habló de hordas de incendiarios que renovarían en Buenos Aires los horrores de la Comuna de París de 1871; el jefe de policía Enrique B. Moreno debió renunciar; se restableció el estado de sitio y fueron movilizados mil guardias nacionales para ‘mantener el orden’.”

“La justicia rechazó por ‘falta de pruebas’ la acusación contra algunos estudiantes sindicados como promotores.”

“Debía satisfacerse la vindicta pública y explicarse el estado de sitio y la movilización miliciana.  En el barrio Monserrat unos artesanos extranjeros se reunían en la pieza de un conventillo para editar un periódico, El Trabajador; fueron detenidos, descubriéndose que alguno había sido afiliado a la Internacional En Europa. Aunque no se los pudo acusar judicialmente por el incendio del Salvador, bastó para presentarlos en la prensa como los autores de la quemazón”.  [10]

1876: apoyo a la Iglesia Católica…

El gobernador Bayo informó sobre las relaciones con las autoridades eclesiásticas, conforme el art. 4º de la Constitución Provincial que reconoce la religión Católica Apostólica Romana.  Destacó la necesidad de contribuir a la refacción de capillas y reconoció que se hizo “notar en algunos centros de población la necesidad de un Sacerdote… ya sea como Cura, o Capellán” para que “provea a sus vecinos de los auxilios de la Santa Religión”, para lo cual se había dirigido al Obispo de la Diócesis.

Tierras, indígenas, inmigración…

En su mensaje de 1874, el gobernador Bayo destacó que “nuestro territorio es muy vasto y rico: tenemos 3.650 leguas cuadradas de tierra que pueden contener muchos millones de habitantes”.

Informó que en 1873 entraron por el Puerto de Santa Fe, 1.725 inmigrantes de diversas nacionalidades (alemanes, austríacos, españoles, franceses, italianos, suizos, alemanes): 857 hombres, 363 mujeres, 256 niños y 249 niñas.

Durante ese año, el Departamento Topográfico había registrado 224 títulos expedidos por el Gobierno y 13 correspondientes a particulares. Continuaban las operaciones de mensura y la elaboración de planos de distintos departamentos.

1875: movimiento de inmigrantes y de indígenas…

Las Comisiones de Inmigración de Rosario y de La Capital informaron sobre el movimiento de inmigrantes.  En ese tiempo se habían sembrado 30.412 cuadras cuadradas, empleándose 13.181 fanegas, las que han producido 164.861 fanegas; datos que permiten evaluar los resultados del esfuerzo de los colonos, aunque solían soportar condiciones climáticas adversas o las invasiones de diversas plagas, entre ellas las langostas.

En ese tiempo se estaba cosechando trigo en “cuarenta Colonias agrícolas” donde “a la gran suma de población productora” se sumaba la fecundidad de un “suelo privilegiado”.

Destacó el gobernador que “la langosta, la piedra y las excesivas lluvias, durante la última cosecha de trigo han causado la pérdida de sesenta y tantas mil fanegas de este valioso producto ,  en el Departamento de la Capital, y en menor cantidad en los otros”.

1874-1877: más colonias…

San Martín de las Escobas, fundada por Manuel Nickish y Martín Echeverría, actual departamento San Martín.

Bustinza, fundada por Julián de Bustinza en 1874, actual departamento Iriondo.

Pilar -1876, por Guillermo Lehmann sobre terrenos adquiridos a Mariano Cabal- y Santa María, en el Departamento La Capital.  [11]

Santa Teresa en el departamento San Jerónimo, fundada por Julián de Bustinza.

Es Totoras desde 1891 porque así se denominó esa estación ferroviaria y mediante el Decr. 6063 del 223 de diciembre de 1965, el gobierno aprobó esta denominación para evitar confusiones con “María Teresa” en el departamento Constitución..

San Urbano (actualmente no registrado con ese nombre), Teodelina –1875, por Diego de Alvear, actual Dto. Gral. López; e Iriondo (entonces en el departamento Rosario, actualmente con ese nombre se reconoce una localidad del distrito Nelson, en el departamento La Capital).

Funes, fundada por Tomás Latorre y M. Ávila en 1877 cuando ya estaba habilitado otro tramo del ferrocarril Central Argentino.

Serodino fundada en 1875 por Pedro Serodino, actual Dto. Iriondo.

Llambi Campbell (un grupo de colonos se estableció a partir de 1877 en el sector sur del pueblo que se denominó Campo Lassaga), actual departamento La Capital.

Rivadavia -conocida como Colonia Rivadavia-, actual Dto. Las Colonias, fundada por Santiago Denner en 1876.

(Hay que tener en cuenta que en aquel tiempo se establecían las familias y así fundaban “colonias” o “pueblos” sin que estuvieran registrados nombres ni planos, trámites que concretaban varias décadas después. En consecuencia, se podían reiterar nombres y algunos fueron cambiados imponiéndose el nombre de las estaciones ferroviarias.)

El gobernador Bayo informó que hubo una invasión de aborígenes en el departamento San Jerónimo y que las Guardias de Frontera seguían cumpliendo sus funciones.

1876: Topografía y plano de la ciudad,

El 7 de septiembre de 1875 se reorganizó el Departamento Topográfico y el 2 de octubre se aprobó el Reglamento Interno.  Ordenada la elaboración de un Plano Gráfico de la Provincia, “fue presentado al Gobierno sin concluir y con algunas deficiencias”, siendo devuelto “a fin de que se hagan las rectificaciones del caso y se practiquen los trabajos necesarios para su pronta terminación”, expresó el gobernador en su mensaje a la asamblea legislativa el 4 de mayo de 1876.

1876: avance hasta los ríos Negro y Neuquén…

Mientras las deudas con el Banco de Londres y otros acreedores del exterior generaban situaciones tensas y obligaban a renegociar algunos préstamos, el gobierno de la provincia de Buenos Aires terminaba la campaña al desierto que logró extender la frontera hasta los ríos Negro y Neuquén y de inmediato empezó la enajenación de tierras, de modo que en dos décadas se estableció el latifundio porque aproximadamente 1.843 personas dispondrían de 41.700.000 hectáreas.

El general Julio Argentino “Roca se resignó con 65.000 hectáreas”.  [12]

Situación en Villa Constitución

Es oportuno tener en cuenta que en Villa Constitución a pesar de los dieciocho años transcurridos, continuaban los problemas por la posesión de tierras en la empresa que integraron cuatro empresarios que se separaron en breve tiempo y no entregaron oportunamente las escrituras.

“En vista del total y calamitoso abandono del pueblo por la Empresa Fundadora» el gobierno mediante una ley del 20 de julio de 1875, declaró de «utilidad pública las zonas urbana y rural propiedad de la Empresa”, autorizándose después la entrega de solares gratuitos con la condición de ser poblados en el término de seis meses.

1876: Invasiones de aborígenes

En el norte de la provincia soportaron algunas invasiones de los aborígenes. Expresó el gobernador Bayo:

“El Gobierno vivamente impresionado por estas invasiones, y por otras que con más frecuencia se habían repetido anteriormente, mandó expedicionar al Chaco, valiéndose para esto de los servicios ofrecidos por el Norte-Americano Dn. Guillermo Moore, quien, acompañado de un reducido número de hombres, en su mayor parte extranjeros, se comprometió a internarse en el corazón del Chaco, a fin de escarmentar a los salvajes en sus mismas guaridas”.

(El 18 de marzo de 1877, el norteamericano Moore y Gaspar Kaufmann, acompañaron a Patricio Cullen -entre otros conspiradores que pretendían llegar al gobierno por la fuerza- y tres días después terminó esa rebelión en el Combate de Los Cachos…)

Expediciones al norte santafesino

Explicaba el gobernador Bayo: “Dos expediciones, costeadas por el Gobierno, se llevaron a efecto en el año anterior, habiéndose obtenido en ambas el mejor éxito. En la primera de éstas, se confió el mando y la dirección de las fuerzas al citado Señor Moore; y en la segunda, en que también tomaron parte algunos Guardias Nacionales de Santa Rosa, se asoció a aquel el experimentado Jefe Nacional Teniente Coronel Dn. Raimundo Oroño.  Después de estas expediciones, no se ha notado ninguna otra entrada de consideración, lo que prueba que, este sistema de guerra contra los Indios, es el que da mejores resultados en la práctica”.

Tan convencido estaba de su acertada decisión el gobernador Bayo, que expresó ante los legisladores:

“En esto el Gobierno creyó cumplir con un estricto deber, para con sus gobernados, garantiéndoles, con sus propios recursos, el honor, la vida y sus más caros intereses y coadyuvando a la vez la acción del Gobierno Nacional, como su agente legítimo”.

Luego informó que “por resolución del Ministerio de Guerra, se han librado a los Guardias Nacionales del servicio de Fronteras, estando estas cubiertas actualmente con fuerzas de línea pertenecientes al Ejército Nacional, a cuya remonta contribuye este Gobierno, remitiendo individuos condenados a este servicio por falta de enrolamiento”.

En ese tiempo, ni siquiera se habrían imaginado una Asamblea de los Derechos Humanos porque aparentemente el derecho a la vida y el respeto a la dignidad humana sólo se vislumbraban para algunos sectores de la población, preferentemente para los extranjeros, para los empresarios y políticos. Los aborígenes y los gauchos si se quejaban tendrían que engrosar las filas de las milicias y hacer cualquier trabajo que le ordenara el Juez de Paz o el Comisario. 

01-06-1874: creación y evolución del Banco Provincial.

Hasta 1874, el Banco de Londres y Río de la Plata había logrado ser el único que operaba en la provincia de Santa Fe y además de los servicios financieros estaba autorizado para emitir moneda, con lo cual ejercía una notable influencia en la economía nacional.

Destaca el historiador José María Rosa que el Banco de Londres “mantiene el monopolio del crédito hasta 1874, en que el gobernador Simón de Iriondo emplea un empréstito gestionado en Inglaterra por 300.000 libras en abrir un Banco Provincial con casa en Rosario.”

Es oportuno recordar que la primera institución bancaria en Rosario fue el Banco Mauá fundado en 1856.  En ese tiempo, llegó a Rosario el astuto Carlos Casado de Alisal, descendiente de una familia vinculada a la burocracia española y enseguida se relacionó con comerciantes y financistas que negociaban en Buenos Aires y Montevideo.

En 1865 y favorecido por las dificultades económicas que generaba la Guerra del Paraguay, el descendiente de familias españolas vinculadas a la burocracia de aquel país, logró que su Banco Casado otorgara créditos a familiares de combatientes y también los necesarios para abastecer al ejército.  La empresa abarcó un breve lapso y declinó a partir de 1871, cuando se generó la epidemia de fiebre amarilla.  [13]

En 1867 el Banco Mauá había transferido su cartera al Banco de Londres y establecieron un sucursal en Rosario, “puerto preciso del interior” y nudo del Ferrocarril Central Argentino que seguía extendiendo las vías hacia Córdoba para facilitar el comercio de granos y de otras producciones de las provincias centrales hacia el exterior porque así también aumentaban las recaudaciones de esa empresa y en menor proporción los recursos fiscales.

Al ser aprobada la ley de creación del Banco Provincial, el ministro de Gobierno Melquíades Salva fue designado para establecer las bases constitutivas de esa institución. Desde el sector privado aportaron capitales Carlos Casado de Alisal, Fermín Lejarza, Grognet… [14]

Camilo Aldao -vinculado con Nicasio Oroño en proyectos de colonización-, era uno de los miembros del Directorio.  La puesta en marcha de esa institución financiera generaría una evidente competencia y los ingleses inmediatamente reaccionaron.

Tales algunos datos reiterados por diversos historiadores, pero es interesante tener en cuenta los que aportó el gobernado Bayo en su discurso ante la asamblea legislativa:

Informes del gobernador relacionados con el Banco de la Provincia…

Sabido es que el 1º de junio de 1874 se autorizó la creación del Banco de la Provincia  y que se ha había gestionado un empréstito del Banco Nacional cuyo “producido líquido” se destinaría “al establecimiento de un Banco en la Provincia, y un millón de pesos fuertes, para la construcción de un ferrocarril de la Capital a las Colonias del Oeste, y a otras mejoras y adelantos”.

Aclaró el gobernador Bayo en su primer mensaje a la Legislatura que “fue necesario limitar la cantidad autorizada como empréstito exterior a trescientas mil libras y por ella se ha consumado esa negociación”.

Todavía no se había definido si en nuevo Banco santafesino sería un “banco oficial” o “debía revestir otro carácter”.

(Saber que existía tal duda después de haber sido solicitado el empréstito resulta casi incomprensible y más aún, que sea ratificada por el gobernador de la invencible provincia de Santa Fe…)

El gobernador continuó con su discurso: “Comprendí que para lo primero, es decir, para establecer un Banco Oficial, no teníamos los recursos suficientes, a más de que podía peligrar en sus resultados, por la poca confianza que podía inspirar al pueblo: no trato de justificar esta desconfianza, pero es necesario respetarla.   Esta consideración me hizo decidir a tomar otro temperamento.  La iniciativa no partía del pueblo mismo, como lo esperaba, y entonces recomendé al Ministro General –Melquíades Salva– formulase bases para el establecimiento de esta institución, con arreglo a las ideas que habíamos acordado.  No trepidé un instante en dar al pueblo la mayor participación en todos los actos que han de dar por resultado, la realización de este pensamiento.  En reuniones de numerosos individuos que se tuvieron al efecto, tanto en esta Ciudad, como en la del Rosario, se hizo conocer el propósito y la voluntad decididas del P. E., para llevar a cabo la realización de un establecimiento bancario, con capitales de la Provincia principalmente, y por sus recursos, y tengo la satisfacción de anunciaros que la idea ha sido acogida con el mayor entusiasmo, hasta el punto de que abrigo fundadas esperanzas de que muy pronto lo tendremos funcionando, si inconvenientes superiores no se oponen a nuestros deseos”.

Después, sería necesaria “la sanción de la carta fundamental del Banco, que debe consultar los intereses que representa el gobierno”, afirmó el gobernador Bayo imaginándose el funcionamiento del banco de capital mixto.

Recién en abril de 1878 se aprobaron los estatutos para el funcionamiento del Banco y treinta años después, se dispuso que funcionaran la Casa Santa Fe y la Casa Rosario.

[Ya en el ocaso del siglo veinte, se discute la posibilidad de privatizarlo y se suceden los paros, huelgas, manifestaciones hasta la Legislatura, heridos como consecuencia de la excesiva violencia y en 1997 el gobernador Jorge Obeid -justicialista- integró una Comisión Investigadora presidida por el Dr. Alfredo –Pichón- Nogueras para establecer las responsabilidades de las anteriores autoridades designadas por los gobernadores del mismo Partido CPN. José María Vernet (1983-1987) y Dr. Víctor Félix Reviglio (1987-1991) en cuyo lapso se produjeron la mayoría de los préstamos impagos que generaron enormes pérdidas.]

Especulaciones desde el Banco de Londres

El gobernador Bayo comprobadas algunas irregularidades había ordenado la intervención.  Destaca el historiador José María Rosa que “el gerente del Banco de Londres, un alemán de apellido Behn, quiso acabar con el rival criollo para quedar nuevamente con el monopolio del crédito rosarino. Adquirió billetes del Provincial y sin previa advertencia los presentó a principios de mayo en ventanillas exigiendo su pago en oro.  Significaba el cierre del Banco Provincial, y el gobernador Bayo, venido a todo galope de Santa Fe, después de intentar en vano un arreglo, quitó la personería del Banco de Londres ‘por haberse convertido en una institución  ruinosa para los intereses públicos y peligrosa en las presentes circunstancias para el crédito interior y exterior de la provincia’. Ordenó al jefe de policía de Rosario cerrar sus puertas, sellar sus libros y de paso incautarse del oro bajo recibo.  Como Behn se desmandó en palabras inconvenientes, el jefe lo detuvo y procesó por desacato a la autoridad (19 de mayo de 1876).

El escándalo fue mayúsculo. La prensa porteña, unánimemente puso el grito en el cielo ¡Un gobernador incautándose del oro inglés, y un jefe de policía metiendo preso al gerente del Banco de Londres! ¡Ni en los tiempos de Rosas”.

El mendocino Lucas González que tenía experiencia como intermediario en la gestión y aceptación de empréstitos británicos, era “cónsul general en Londres y vinculado a empresas ferroviarias y bursátiles”.  Para despejar el camino y lograr acuerdos con los británicos, en julio “se le pide la renuncia a Cortínez, cuyas economías caseras no resultaban” y el 2 de agosto de 1875 es designado Lucas González para desempeñar esas funciones. Llegó en octubre a la Argentina y asumió como titular del ministerio de Hacienda, cuando “apenas quedaba oro en las oficinas de cambio, y el gobierno carecía hasta de billetes de papel.

No obstante consiguió de Baring un préstamo a corto plazo para solventar los servicios de la deuda por el primer semestre de 1876” mientras “la temible palabra –moratoria- se pronuncia.  Los títulos argentinos, cuya cotización estaba entre 88 y 90 bajan a 60 en abril.”

Posición de Avellaneda ante el Congreso Nacional y todos los habitantes…

En el diario de Sesiones del Congreso Nacional, se reiteró lo expresado por el presidente Avellaneda en mayo de 1876:

“Hay dos millones de argentinos que ahorrarán hasta sobre su hambre y sobre su sed para responder, en una situación suprema, a los compromisos de nuestra fe pública en los mercados extranjeros.”

Anunció que se reducían en un 25% más los sueldos y las pensiones, quedaban suspendidas todas las obras públicas -con lo cual se generaban más pérdidas y desocupación-, no se atenderían los vencimientos de los acreedores internos y  una vez más, el vasto sector de los empleados públicos esperaría seis meses para cobrar sus retribuciones mensuales.  Como suele suceder, en ese plan de austeridad no se incluyeron los gastos militares, tampoco los pagos a acreedores extranjeros y se impulsaba la continuidad de las obras ferroviarias hacia Tucumán, para poder disponer de los vagones que traerían aquellas producciones hasta el puerto porteño donde se concentraban las exportaciones.

Se generó un éxodo de inmigrantes porque no encontraban trabajo ni en las ciudades ni en las zonas rurales; aumentaban los precios, quebraban las pequeñas y medianas empresas generalmente individuales o familiares.

“Hay Ópera, hay magníficos coches, pero también hay trampas y crímenes, desorden en el hogar, y locos y suicidios todos lo días”.  [15]

 

Mayo de 1876: tras el alejamiento del diplomático y ministro Lucas González.

En mayo de 1876, enterado el diplomático Lucas Gonzáles de la magnitud de aquel conflicto, conflicto, “le da definitivamente la congestión cerebral y el 20 de mayo renuncia”…

El presidente aplicó una original estrategia: “Avellaneda ofrece el ministerio al presidente del Banco de Londres, Norberto de la Riestra” quien tras asumir, “ofreció a Baring, ‘sin que esto sentase precedentes’, solventar los servicios con pesos papel tomando el gobierno la desvalorización.  Era lo mismo que pagar en oro, puesto que Baring podía canjear los billetes por metal en Londres, pero fue presentado como un triunfo de la habilidad financiera de Riestra y sus excelentes vinculaciones con la City.”  [16]

01-06-1876: agravamiento del conflicto en Rosario…

El ex presidente del Banco de Londres, desde el ministerio de Hacienda había logrado negociar con los acreedores británicos pero se acentuaba el conflicto en la ciudad de Rosario porque el gobernador Servando Bayo –con sus amigos financistas– se mantenían firmes en la defensa del recién creado Banco Provincial.

Mientras tanto, en la capital federal seguían analizando esa insólita situación desde el punto de vista de quienes preferían proteger los intereses foráneos.

El primer día de junio de 1876, el encargado británico Saint John “ordenó a la cañonera Beacon” -en castellano  faro o baliza-, “situarse en Rosario en resguardo de la propiedad británica” mientras entrevistaba el mismo día al ministro de relaciones exteriores  Bernardo de Irigoyen.

El ministro había sido asesor de Avellaneda antes de desempeñar ese cargo; “no era un hombre de lucha, pero le sobraba inteligencia, tino y había aprendido junto a Rosas cómo se conducían las relaciones exteriores”, destaca el historiador José María Rosa.  “Debía manejarse contra fuerzas muy superiores -Inglaterra, Brasil- y sin enfrentarse abiertamente valerse de sus condiciones en beneficio de la Argentina.”   [17]

Instalada la cañonera frente a las barrancas de Rosario, mientras algunos rememoraban lo sucedido en 1845 cuando en la Vuelta de Obligado se animaron a cruzar cadenas de orilla a orilla del Paraná para evitar el avance de la flota extranjera, los medios periodísticos rosarino se expresaban en contra del gobernador mazorquero.

Tiempo después, el historiador H. S. Ferns escribió:

“Muchos intereses argentinos estaban comprometidos en un desenvolvimiento dependiente del capital británico, para dar su aplauso a la exhibición de las finanzas gauchas”.  [18]

(No fue por casualidad que el coronel Lucio Mansilla antes de comenzar el combate para obligar al retiro de la escuadra invasora anglofrancesa que avanzaba sobre el río Paraná, el 20 de noviembre de 1845 expresó:

“¡Allá los tenéis!  Considerad el insulto que hacen a la soberanía de nuestra patria al navegar, sin más título que la fuerza, las aguas de un río que corre por el territorio de nuestro país. / ¡Pero no lo conseguirán impunemente! / ¡Tremola en el Paraná el pabellón azul y blanco y debemos morir todos antes de verlo bajar de donde flamea! ¡O juremos con gloria morir! / ¡Viva la Patria!”

Coherente actitud del ministro Bernardo de Irigoyen.

Una vez más, en los diarios de sesiones del Congreso Nacional hay más señales sobre aquel conflicto, porque en 1914 el diputado Estanislao Zeballos durante un debate rememoró que “el abogado que acompañaba al encargado de negocios reclamante anunció por vía intimidatoria que una cañonera inglesa se dirigía hacia el puerto de Rosario, el ministro con digna reacción, se puso en pie y se negó a continuar”…

Era intolerable que una vez más, un argentino estuviera al servicio de los intereses de otros países.

Como lo ha destacado el historiador José María Rosa: durante la permanencia del ministro Irigoyen, “una palabra olvidada desde Caseros –soberanía-,  volvía a estamparse en los documentos de la cancillería argentina”…

El ministro inmediatamente informó al presidente reunido con los miembros de su gabinete y basándose en el estado de derecho, insistió en que al presidente del Banco de Londres lo habían detenido por cometer el delito de desacato y en consecuencia debía ser juzgado. No era cómoda la situación del ministro del Interior Dr. Simón de Iriondo, gobernador entre 1871-1874) y quien promulgó la ley de autorización del empréstito para la creación del Banco Provincial.  Había sido el impulsor de la candidatura de su amigo de Servando Bayo y supo ser leal a los intereses de la provincia, apoyándolo en esas difíciles circunstancias.

23-06-1876: nota del ministro al encargado de negocios británicos.

El 19 de junio el representante británico envió otra nota al ministro de relaciones exteriores que fue contestada cuatro días después con un interesante análisis y oportunas conclusiones:

“El Banco de Londres es una sociedad anónima, una persona jurídica que sólo existe con fines determinados…

(A principios del tercer milenio, no recuerdo quién expresó con sutil ironía que S. A. es sigla de sociedad anónima y no se sabrá si por casualidad o por causalidad, también podría ser de sin alma…)

En otro párrafo, Irigoyen expresaba:

“Debe su existencia exclusivamente a la ley del país que la autoriza: no hay en ella nacionales ni extranjeros, no hay individuos de existencia material.  No son las personas quienes se asocian sino los capitales bajo forma anónima como la palabra lo indica.  No hay nombres, ni personas, ni responsabilidad individual comprometida”.  [19]

Tal posición del ministro impulsó al británico a enviarle otra carta, planteándole sus disidencias, pero Irigoyen le contestó con firmeza:

“Siento que Su Señoría discrepe conmigo… pero el hecho que las acciones hayan sido suscriptas por individuos de una nacionalidad es eventual y no puede desnaturalizar que hoy están en poder de ingleses que pueden pasar fácilmente a manos de ciudadanos de otros países”.

En este extremo sur de América seguía imponiéndose la retórica y en Londres, las discusiones giraban en torno a “la incautación del oro” que había sido la consecuencia de un acto de gobierno de Servando Bayo. Algunos ya se imaginaban un posible bombardeo a la ciudad de Rosario: la ciudad símbolo porque sobre ese suelo estuvieron las fuerzas del general Manuel Belgrano  cuando desobedeciendo las órdenes del gobierno porteño, ordenó enarbolar la bandera celeste y blanca y cuando Cosme Maciel logró que llegara al tope del improvisado mástil, allí la juraron las tropas de las Baterías Libertad e Independencia.

Si algo distingue a los estadistas, como prioridad se revela la aptitud para negociar y los británicos ya habían demostrado tales habilidades durante sucesivos siglos. El mercado argentino producía importantes  beneficios para la Corona y no les perdonarían un error.  En aquella isla del hemisferio norte, sabían que tampoco era conveniente que la cañonera estuviera anclada sobre el Paraná sin lograr el propósito que había generado esa movilización, porque estaba demostrando indecisión casi injustificada.

Misión del presidente del directorio del Banco de Londres

Era necesario resolver cuanto antes la irregular situación en que se encontraban algunos representantes británicos y en Londres decidieron que Mr. George Drabble – presidente del directorio del Banco de Londres en aquella sede- viajara a Buenos Aires para definir la estrategia final en diálogos con las autoridades nacionales y si fuera necesario, con el gobernador santafesino.   Así fue y lo primero resuelto por Avellaneda y su ministro de Hacienda, fue cómo se entregarían los fondos al Banco Provincial santafesino mediante un préstamo de la Nación. También fueron tenidas en cuenta las recomendaciones verbales del gobernador Bayo acerca del alejamiento de mister Behn del país y la necesidad de que si se reabría esa sucursal del Banco en Rosario, el presidente fuera la persona propuesta por los británicos y aceptada por el gobernador Bayo.

“El provincial recibió las libras en agosto y devolvió el oro al de Londres.  Se retiró la acusación contra Behn, que fue trasladado a Montevideo, pero pasaba el tiempo y Bayo no daba el decreto permitiendo la reapertura; se le había ocurrido que el Beacon debía retirarse antes.”

Ejemplar firmeza del gobernador Bayo

El Banco Provincial siguió funcionando y la reapertura del Banco de Londres se concretaría oportunamente: cuando los capitalistas británicos aceptaran las condiciones propuestas por el gobernador Bayo: trasladar a Mister Behn a Montevideo y nombrar para la desempeñarse en la presidencia a la persona que consideraran pertinente y cuya elección debía ser consentida por Bayo

El presidente Avellaneda coincidió con el ministro de Hacienda en la necesidad de emitir billetes para salir de la crisis y 3 de agosto de 1876 emitieron 10.000.000 de pesos fuertes en bonos del 1% mensual a los fines de pagar la “deuda certificada y flotante  En setiembre, después de angustiosas negociaciones, el banco Provincia prestó a la nación 310.000 libras en su equivalente de papel amortizables con la renta de aduana, para poner al día los sueldos y rescatar el oro inglés que tenía el Banco de Santa Fe.   Se necesitaba más circulante, y el Banco Provincia emitirá en setiembre diez millones con la garantía de la Nación, que se consideraron suficientes.”

Oportunamente, el encargado de negocios Saint John ordenó al comandante Dunlop que preparara la nave para zarpar y en Rosario, una vez más algunos comerciantes decidieron organizar un banquete para despedirlo.

Así fue como en el País de los Contrastes, mientras el gobernador había demostrado ser un predicador del patriotismo y defensor de la soberanía nacional, algunos distraídos o maliciosos interesados lo juzgaban con prepotencia y hasta se animaban a brindar  y expresar loas junto a los enemigos…

Es lamentable que en la brevedad de los textos que se utilizan en los establecimientos educativos no alcancen las páginas para relatar estos hechos que constituyen hitos en la historia de los argentinos, en la historia hispanoamericana… porque aún en el siglo veinte se siguieron avasallando los soberanos derechos territoriales argentinos, ya que la Gesta de las Malvinas iniciada el 2 de abril de 1982 terminó con el cese del fuego de las tropas nacionales debido a la superioridad del armamento y de la cantidad de combatientes ingleses.  En esa oportunidad, Estados Unidos y Chile -también con cierto apoyo en el sector oriental de Sudamérica- contribuyeron a que tal fuera el resultado y por ello, desde el 3 de enero de 1833 siguen las islas usurpadas por quienes las incluyen entre sus colonias con el nombre de Falkland…)

Deudas, recursos y empréstitos…

En su mensaje de 1874, el gobernador Bayo analizó el estado de las cuentas del Estado y se refirió a las amortizaciones de distintos créditos.

1875: Empréstito de Londres – Murrieta y Cía.

El 2 de mayo de 1875 el gobernador Servando Bayo en su mensaje a la asamblea legislativa informó sobre las cuentas pendientes y explicó los trámites relativos al Empréstito que “se había realizado en parte en el mercado de Londres”, expresando que “los documentos que existen en la Secretaría de V. H.” –vuestra honorabilidad- “manifiestan que los contratistas, Señores C. de Murrieta y Cía., se reservaron en su poder las cantidades necesarias para el servicio de intereses y amortización correspondiente a tres semestres; -dos se han hecho ya… y podéis estar tranquilos; -cumpliré religiosamente con esta obligación, aun cuando para ello fuese necesario hacer sacrificios. Me es satisfactorio anunciaros, que nuestro crédito en el mercado de Londres, se encuentra en condiciones envidiables. -El 8 de febrero del corriente año, nuestros títulos del empréstito del 74 se cotizaban al 98 ½ %; pocos pueblos de Sud América, tienen su crédito tan alto en el primer mercado del mundo.

Mi opinión es, que el 1º de Enero del año entrante se han de cotizar a la par,  si no están con premio.  Me atrevo a pensar así, observando el movimiento que han tenido en un año; -sobre el precio del 92% a que fueron enajenados han aumentado un 6 ½ %.  No dudo, y aún puedo asegurarlo, que si buscamos un nuevo empréstito, lo obtendríamos con mayor facilidad y en mejores condiciones y esto nos impone con más razón el deber de cumplir religiosamente las obligaciones que hemos contraído”.   [20]

(Desde otra perspectiva, Gastón Gori en su profundo estudio sobre el latifundio de La Forestal en el Chaco Santafesino, alude a la compra de tierras realizada por Murrieta y Cía. en Corrientes y luego en Santa Fe; destaca la existencia de explotaciones de tanino en aquel tiempo y advierte que “no era un misterio el valor potencial… de los bosques que se enajenaban, ni lo que la industria había realizado en materia de tanino… Quizá los compradores extranjeros sabían más que los gobernantes argentinos, o los gobernantes argentinos no se preocuparon por saber tanto como los compradores ingleses, o simplemente todos estaban sabiendo todo…   Los capitalistas de Londres cumplían a conciencia con su función, como que eran hombres de una nación imperialista; la responsabilidad debemos buscarla… en tierra argentina y a ella es ajena el pueblo, gobernado por el régimen de una democracia permanentemente escamoteada”.[21]

Desde la visión del gobernador Bayo con respecto a los beneficios del Banco Provincial manifestó que “tiene confianza en que los producidos del Banco, han de exceder las cantidades que necesitamos para hacer el servicio del empréstito interior, en la parte que a él corresponde”.

1876: Deudas fiscales y giro en descubierto…

Con respecto a las cuentas pendientes de la Provincia, manifestó que las Letras a Pagar al Banco Mauá y a don Leopoldo Guerra, estaban canceladas.  Se había girado en descubierto en el Banco Provincial de Santa Fe, para pagar “sueldos y gastos”; se estaban reduciendo los créditos del empréstito de Londres e informó sobre “la cuenta especial que tiene la casa de los Sres. C. de Murrieta y Cía. de Londres con este Gobierno”.

Otras conclusiones en torno a Murrieta y Cía.

Sabido es que en aquel tiempo -y como sucede aún.-  algunos negocios de los santafesinos se hacían en Europa.

Es oportuno intentar otra aproximación a hechos insoslayables en la historia de los argentinos.

Desde los tiempos del general Urquiza (1854) el influyente Federico Woodgate dialogaba con José Nicasio Oroño, José María Echagüe y el Dr. Marcelino Freyre, sobre la importancia de las tierras en el sur santafesino, cuando se estaba proyectando la construcción del ferrocarril en el tramo Rosario-Córdoba.  En ese tiempo ante el fracaso de las gestiones del improvisado José Buschenthal, se dispuso la creación de un consorcio y don Guillermo Weehlwright viajó a Londres una vez más para conseguir el aporte de capitales.  Seis años después otro viajero, el inolvidable Lucas González intentaba imponer sus candidatos desde el recién creado Club Republicano que adhería a la política del Gral. Urquiza –estanciero y colonizador- y propuso a sus amigos Benjamín Victorica y con Simón de Yriondo como candidatos a convencionales.

Una vez más, el gigante de las Letras, el historiador Gastón Gori, ilumina una de las tantas etapas sombrías, referida a la explotación de los quebrachales santafesinos por los ingleses.

Derivaciones en la década siguiente…

Ha destacado Gastón Gori que el latifundio se negocia y advierte acerca de la compra de tierras que en 1883 concretó Murrieta y Cía., mediante una escritura que “debía ser firmada también por Juan Bautista Alberdi, que intervenía a nombre del gobierno y que conoció todos los antecedentes de la gestión y su contenido final, pero estando en Burdeos su deficiente salud no le permitió viajar a Londres y otorgó poder para que lo representara el señor Federico Woodgate, inglés radicado en aquella ciudad; de manera que este señor Woodgate” –…el fundador y primer presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario-, “con el doctor Lucas González” –el amigo Simón de Yriondo-, “entre otros- actuaron en representación de nuestro gobierno.

Pero las tierras adquiridas inmediatamente después fueron negociadas por Murrieta y Cía. y en esa negociación Federico Woodgate actúa como apoderado de Murrieta y Cía.  Lo que demuestra que la vinculación de la casa y de Woodgate en Londres ya tenía otros antecedentes.  Y por último debemos aclarar definitivamente la situación de todos los negociadores: Lucas González y Federico Woodgate representan al gobierno de Santa Fe ante Murrieta y Cía, pero a su vez son apoderados de Murrieta y Cía. en el mismo negocio, de modo que a pesar de que esté salvado el aspecto legal, quien fue el árbitro, quien hizo como quiso en la operación fue Murrieta y Cía. que trataba en ese enorme negocio sobre entrega de territorio argentino, con sus propios apoderados en ése y en otros negocios.

Eso ocurría en Londres, mientras en nuestro país, en la zona donde se habían deslindado las tierras para los ingleses, los colonos labraban reducidos campos y explotaban el bosque, y otros enérgicos creadores de riqueza argentina solicitaban concesiones de pocas leguas para crear obrajes de quebrachos y diversas maderas, algunas de las cuales fueron negadas con un ‘archívese’…”

En Londres, dos extranjeros en nombre de Murrieta y Cía., otro inglés en representación de Alberdi, y un argentino vinculado a los negocios ingleses, firmaban la entrega del Chaco santafesino en una extensión de 1.804.563 hectáreas…

Murrieta y Cía, se hizo propietaria de las 668 leguas cuadradas y fracción ‘con la esperanza de poder transferir parte de estos terrenos a una compañía colonizadora, que ellos formarían con sus amigos y bajo su responsabilidad, tomando ellos mismos una gran parte’… esto dice, el doctor Lucas González en el informe sobre las negociaciones previas a la venta…

Y efectivamente se formó, no una compañía colonizadora con obligación de radicar inmigrantes, sino la Compañía de Tierras de Santa Fe.”  [1]

Es evidente que antes de realizar esos negocios se había tejido una sólida trama de intereses políticos y económicos. 

En consecuencia, cuando “el 22 de agosto de 1883”, el inglés Federico Woodgate en su carácter de apoderado tomó posesión de las tierras en nombre de Murrieta y Cía. “el gobierno” de la provincia invencible era ejercido por el vicegobernador Dr. Cándido Pujato.

El conocimiento de esos hechos revela otra paradoja en la historia de la Historia y produce asombro e indignación; sentimientos que Gastón Gori sintetizó en pocas palabras:

“¡Y el P. E. agradeció a González y Alberdi porque habían salvado el crédito y el honor de la provincia!  Fue un pésimo negocio o una condescendencia abusiva con el imperialismo inglés, al cual se le estaban preparando ya las vías férreas pagadas con dinero del pueblo, para que pudieran traer desde el corazón de los bosques del norte sus productos a los puertos del litoral…”

Todo es historia de la Historia de los argentinos…

1877: Ley de Aduanas.

A fines de 1877 después de prolongados debates entre librecambistas y proteccionistas fue sancionada la ley de aduanas cuyo propósito fundamental era aumentar las recaudaciones fiscales.  La mayoría sostenía el principio de apoyo a las industrias, sin provocar privilegios.  En aquel tiempo las leyes impositivas aduaneras se votaban todos los años y estaban directamente relacionadas con las necesidades del presupuesto oficial.  “En general los derechos de importación a manufacturas extranjeras crean -además de una pingüe renta fiscal- un clima propicio para el surgimiento de una serie de actividades industriales, que al amparo de ese margen de seguridad se hallan en condiciones de compensar, en cierto grado, las diferencias de costos de producción de los artículos nacionales, por lo general más elevados que los similares extranjeros”.  [22]

Política educativa

1874: mensaje del gobernador.

El gobernador en un interesante discurso, expresó que “la educación seguía su lento rumbo: todavía no se había logrado el funcionamiento del Colegio Nacional previsto en la capital de la provincia”; había cerrado “el Colegio de Santa Rosa”… dejando un vacío lamentable”.  Continuaba el trámite para el reconocimiento de los títulos de Derecho para los universitarios del Colegio de la Inmaculada Concepción de los padres jesuitas.  El gobernador recordó lo expresado por el gobernador de Mendoza al colocarse la piedra fundamental de la “Escuela Sarmiento”:

“La escuela es la luz que empieza a brillar en el pequeño horizonte del niño.  Donde no hay Escuelas, hay tinieblas, y en la oscuridad se ocultan los crímenes.  Hagamos luz, que esta que encendemos, suba hasta el cielo donde moran nuestros padres.  Que penetre hasta la cabaña que cubre la miseria del desvalido, y esperemos tranquilos las bendiciones de Dios, de Aquel que premia las buenas acciones de los hombres”.

Propuso inmediatamente:

“Imitemos el ejemplo… fundemos la Escuela.

Eduquemos al pueblo. ‘Hagamos luz’…”

Más reflexiones acerca de la importancia de la educación.

En otro párrafo de su discurso, el gobernador Bayo propuso otra oportuna reflexión:

“En vano… nos hemos de quejar de las influencias gubernativas, de la presión de los Comandantes militares, de los Comisarios de campaña, de los Jueces de Paz, que coartan la libertad del pueblo, cuando ejerce el precioso derecho del sufragio, si el pueblo mismo no sabe defender sus derechos, porque no los conoce, y no los conoce, porque no tiene instrucción.  Allí quedará el hombre ignorante, lo que llamamos pueblo, sin otra misión que derramar su sangre y morir, cuando le ordenemos emprender la marcha para defender nuestras ambiciones.  Allí quedará sujeto a la arbitrariedad de su Comandante, de su Comisario, del Juez de Paz, porque desobedeció sus órdenes o contrarió su voluntad; y no podrá defenderse de la arbitrariedad, porque no sabe escribir una carta siquiera.  Instruyámoslo entonces, eduquémoslo, cumplamos con este deber, que hasta nuestra religión misma nos impone.”   [23]

13-08-1874: Ley de Educación.

Es oportuno tener en cuenta que el 13 de agosto de 1874 fue sancionada la ley  de educación, que “venía a independizar casi completamente la educación común de la acción del P. E.” y fue derogada “a causa de los inconvenientes que se notaran en su ejecución”, produciéndose «un notable alteración en la enseñanza primaria; por cuanto «el gobierno y administración de las Escuelas estuvieron confiados en los primeros seis meses del año 1875, a la Superintendencia General, a las Comisiones Departamentales y a las de Distrito, hasta que por la ley del 28 de junio y decreto reglamentario del 2 de julio del mismo año, la administración de las Escuelas quedó a cargo del P. E., quien, para conocer el estado de la Educación, las rentas que se habían percibido e invertido, así como las cantidades que se adeudaban, ordenó al Inspector General procediese a practicar la visita y pasase el informe correspondiente».

De acuerdo a la Memoria de la Inspección «debieron funcionar 122 escuelas públicas, de las cuales sólo se establecieron 74 costeadas por el gobierno, las que, agregadas al número de las Municipales y particulares, forman un total de 101 escuelas primarias».

Acciones en áreas de Educación…

Creada la Superintendencia General de Escuelas, distintas fuentes sirven para aproximar al conocimiento de determinados logros.

Los párrafos siguientes, son reiteración de lo expresado en una aproximación a la trayectoria de descendientes del primer diputado de San Juan, José Ignacio Maradona, electo el 10 de julio de  1810 para integrar la Junta Grande en Buenos Aires.  Waldino Baldomero era amigo de Simón de Iriondo, acompañó al presidente Sarmiento durante su recorrido por Santa Fe y en las visitas a las colonias agrícolas (1870), fue senador representante del departamento Las Colonias en 1892…  [24]

Se ha destacado que Waldino Baldomero a pesar de que “el sueldo asignado a un preceptor era de veinticinco pesos y había que esperar varios meses para cobrarlos, no dudó en prestar servicios en la escuela de Colastiné.”

Si se intenta elaborar una síntesis de la labor de gobierno, son útiles los discursos y mensajes de las autoridades -aunque tales descripciones suelen ser imprecisas…-, los diarios de sesiones de las legislaturas -en todas las jurisdicciones-; las crónicas periodísticas, los informes de asociaciones civiles…  Al ser casi imposible abarcar tanta documentación e información, hay que admitir que la historia de la Historia seguirá siendo un relato parcial de todo lo sucedido y de sus consecuencias.

Aquí, ahora, una aproximación a experiencias administrativas relacionadas con la Eduación durante el gobierno de Servando Bayo.

Preceptores…

El 16 de febrero de 1872, en la colonia Coronda poblada en su mayoría por italianos y algunos suizos, asumió el primer preceptor don Alfredo Tatti, maestro que percibía $ 25 como única retribución; fue reemplazado por don Juan Marioni y luego por el joven Waldino Maradona, cuyo traslado prácticamente fue un ascenso, porque en ese tiempo la escuela corondina era de mayor categoría.  Fue reemplazado por el preceptor José Hidalgo y cuando el maestro español tuvo que abandonar el cargo por haber castigado a un alumno, asumió esas funciones Juan Larrechea, hermano del estanciero y político.

Comisión de Instrucción Pública…

En aquel tiempo, Waldino Baldomero Maradona fue designado Secretario Inspector de la Comisión de Instrucción Pública del Departamento San Jerónimo (Santa Fe). El 1º de marzo de 1875 el Superintendente de Instrucción Primaria Escuelas don Milciades Echagüe remitió una nota al secretario Inspector de Escuelas, cuyo texto reprodujo el recopilador corondino Dr. Carlos Berra.  En el primer párrafo consta que le devolvió el Reglamento interno de esa Comisión que le pareció “bueno y aceptable”, aunque por separado le sugirió “algunas ligeras enmiendas”, “necesarias para la mejor interpretación y cumplimiento de la ley”, destacando que la Comisión podía “aceptarlas o no”, “pues es de su exclusiva competencia formar y aprobar su Reglamento”

Espera de subvenciones nacionales…

En el segundo párrafo expresaba la necesidad de recibir la información pedida para completar las planillas que se enviarían a Buenos Aires para solicitar la subvención nacional correspondiente a ese cuatrimestre. Le sugirió que pidiera licencia y el 17 de marzo viajara a Santa Fe para recibir “personalmente unos $ 500 pesos fuertes o más, si es posible, de un dinero que estamos por recibir, a cuenta de la subvención provincial, para ayudar al pago de las maestras y creación de las escuelas; pues comprendo que tan a los principios las comisiones deben ser ayudadas en lo posible, si han de marchar con regularidad hasta que puedan organizar bien sus rentas». Insistió en el párrafo siguiente: «Este dinero debe pues recibirlo Ud. aquí, o en su defecto una persona de su confianza, completamente autorizada por esa Comisión.

Libros para “los niños pobres”…

También tengo una cantidad de regular de libros, que se los entregaré para que puedan atender provisoriamente el pedido de los niños pobres o para aquellos otros de que habla la ley, cargándoselos en cuenta, según el caso».  Después de los saludos y de un mensaje para el Sr. Cura, en el último párrafo le recomendó enviar un telegrama oficial si decidía la semana siguiente, incluyendo el texto inicial que debía transcribir teniendo en cuenta su carácter oficial.

Educación: vocación y aptitud…

El 26 de agosto de 1876 se produjo un cambio notable en la Superintendencia de la Instrucción Primaria cuando cesó en su breve desempeño don Francisco Malbrán y asumió «un maestro en el exacto sentido, un técnico, un enamorado de la educación popular; y ese espíritu modelador, cultísimo cuya actuación ha debido merecer los honores del bronce» -al decir de su ex alumno Carlos Berra-, era el profesor de Gramática de la Escuela Normal de Santa Fe don Isidro Aliau.

Aprobación del Reglamento de Escuelas…

El 22 de septiembre de 1877 fue aprobado el reglamento de escuelas de la provincia, elaborado por Inspector Gral. de Escuelas Isidro Aliau que incorporaba la música vocal en los planes de las escuelas elementales.

Hacía trece años desde el nombramiento del primer maestro de música en las escuelas normales y recién diez años después, se crearon los cargos de profesores de música y de gimnasia para las escuelas del departamento La Capital.  Estas referencias permiten imaginar los diálogos entre los maestros Maradona y Aliau, conscientes de la importancia de la educación para eliminar la insoslayable discriminación que emerge del analfabetismo.

Durante seis años crecieron las escuelas santafesinas con las iniciativas del inspector Isidro Aliau hasta que se constituyó el primer Consejo de Instrucción Primaria de Santa Fe presidido por el Dr. Mariano A. Quiroga.

1875: Docentes y necesidad de una escuela normal…

Destacó el gobernador Bayo en su mensaje ante la asamblea legislativa: “El número de Preceptores y Subpreceptores, ocupados en la enseñanza pública de la Provincia, asciende a 109, y el de los que regentean Establecimientos particulares a 62, formando un total de 171 personas dedicadas a la Educación común.  Los maestros y ayudantes corresponden, en general, a la confianza depositada en ellos.  No obstante, se hace notar la falta de una Escuela Normal, para formar buenos Preceptores”.

Maestros: ocho meses sin cobrar…

El párrafo siguiente del mensaje del gobernador, refleja una situación que tiene características de insoslayable tradición: “Al comenzar el presente año, se adeudaban a los maestros de las Escuelas de la Provincia, el segundo y tercer cuatrimestre del año anterior; mas -aclaró don Servando Bayo- al presente ya se han mandado abonar los sueldos correspondientes al segundo cuatrimestre, y se han librado los que pertenecen al tercero, esperándose solo para hacer efectivo el pago, recabar al Gobierno Nacional varias cantidades que se adeudan a la Provincia por subvenciones atrasadas”.

Subvención nacional – Censo escolar.

En un párrafo siguiente, el gobernador manifestó: “Se ha recibido del Gobierno Nacional la subvención acordada a esta Provincia para gastos de educación, correspondiente al año próximo pasado, habiéndose rendido ya cuenta de la inversión de los fondos del 1º y 2º cuatrimestre.  Oportunamente se presentarán las cuentas del tercero”.

(No resultan de fácil comprensión estas informaciones sobre las subvenciones y los pagos pendientes…)

De 6 a 14 años: solo el 21% matriculados…

Lo que merece ser tenido en cuenta es que según el censo escolar había aproximadamente 20.000 niños de 6 a 14 años obligados a concurrir a las escuelas y sólo concurren “4.176, quedando 15.826 sin recibir educación, o sea un 79%” de la población que debería ejercer su derecho a la educación más que su obligatoriedad de asistencia.  [25]

22-09-1877: aprobación del Reglamento de Escuelas.

El 22 de septiembre de 1877 fue aprobado el reglamento de escuelas de la provincia, elaborado por Inspector Gral. de Escuelas Isidro Aliau que incorporaba la música vocal en los planes de las escuelas elementales.

(Habían transcurrido trece años desde el nombramiento del primer maestro de música en las escuelas normales.)

Recién diez años, después se crearon los cargos de profesores de música y de gimnasia para las escuelas del departamento La Capital.

1877: crisis en Buenos Aires; epicrisis en Swantling…

En Buenos Aires mientras Mitre declaraba la abstención, se manifestaba la crisis del autonomismo y entre los jóvenes estaban enfrentados los sectores conducidos por Aristóbulo del Valle y Eugenio Cambaceres, quienes impulsaban la candidatura de Dardo Rocha para la presidencia a partir de 1880. El 3 de abril, el gobernador Carlos Casares destituyó “al comisario Hipólito Irigoyen”, caudillo de Balbanera y sobrino de Leandro Nicéforo Alem, “exonera a éste de su grado en las guardias nacionales” provocándose la adhesión del grupo de Del Valle.

Último desprendimiento de Don Juan Manuel…

El 14 de marzo de 1877 en su refugio de Swantling, cerca de Southampton, fallecía otro argentino que ha sido admirado casi en la misma proporción en que ha sido vituperado, aunque sólo fuera por los comentarios escuchados o por algunas lecturas parciales acerca de la historia de los argentinos.

Breve aproximación biográfica…

Aunque en los relatos históricos se tuvo en cuenta cómo firmaba, en realidad el Brigadier General era “Juan Manuel Ortiz de Rozas López de Osornio”, nacido en 1793, el mayor de los hijos varones de Agustina López de Osornio (1769-1845) -descendiente del militar y hacendado Clemente López y Osornio y de Manuela Rubio  Díaz-, una mujer de temple que educó a sus hijos “con severidad” y “con ternura”.  [26]

León Ortiz de Rozas -esposo y padre responsable- fue teniente de infantería del Regimiento Fijo de su ciudad natal Buenos Aires, quien en 1785 integró la expedición destinada a consolidar la fundación de Carmen de Patagones en Río Negro fue vencida por los aborígenes, siendo uno de los prisioneros que tuvo oportunidad de conocer a varios caciques y de establecer buenas relaciones, hasta que las negociaciones con las autoridades del virreinato hicieron posible un tratado de paz y las liberaciones, circunstancia en que fue ascendido a teniente, contrajo matrimonio (1789) y fue nombrado administrador de las estancias del Rey que proveían de caballadas al ejército.

(Es oportuno expresar que en febrero de 1970 ya estaba organizada una comisión con el propósito de lograr la repatriación de sus restos, pero recién se concretó el 30 de septiembre de 1989, siendo presidente de la Nación el Dr. Carlos Saúl Menem.) [27]

24-04-1877: funerales en Buenos Aires…

Desde el diario El Nacional, familiares del ex gobernador de Buenos Aires y protagonista directo en acciones contra invasores indígenas y fuerzas del exterior, anunciaron que en la iglesia de San Ignacio celebrarían un funeral.

El 21 de marzo desde Tribuna aluden a esa invitación y con ironía expresan que “el aviso ha olvidado decir si la concurrencia debe llevar chaleco colorado y cintillo punzó” y luego describen objetos que habrían sido utilizados durante tormentos y castigos.

(Lo sorprendente es que mientras los diarios porteños aludían al cintillo con tales conjeturas, los integrantes de los grupos políticos santafesinos -entre ellos Simón de Iriondo- seguían usando el rojo para distinguirse de quienes usaban el cintillo azul.)

Valoraciones en el siglo siguiente…

Desde Madrid, Juan Domingo Perón que fue electo presidente de la Nación por amplia mayoría (1946-1952, 1952-1955), desde las violentas jornadas de septiembre del ’55 prefirió el exilio antes de ser testigo de una guerra civil y estaba en su residencia de Puerta de Hierro en Madrid, cuando recibió la carta que le enviara en febrero de 1970 el Dr. Manuel de Anchorena informándole acerca del proyecto de repatriación de los restos de Rosas.

El líder del justicialismo que había impulsado con sucesivos acuerdos la unidad latinoamericana -o hispanoamericana-, como etapa previa al continentalismo y al universalismo, contestó mediante una extensa carta y destacaba:

“Don Juan Manuel, no sólo ha tenido la gloria de su grandeza, sino que también ha merecido el honor que le han rendido la infamia y la calumnia de los hombres pequeños. La calumnia, la diatriba y el insulto, son siempre homenajes que se rinden a un mérito, a una virtud o a un valor. Pocos han sido más indecentemente calumniados, ello sería ya mérito suficiente como para considerar sin más entre los grandes…”

El avión que trasladó el ataúd con los restos de Rosas, que según se dijo estaban intactos, en el aeropuerto de Fisherton en la simbólica ciudad de Rosario, donde estaban anclados el patrullero Murature y dos barreminas, cuya tripulación rindió los honores pertinentes.  [28]

1878: cada grupo con su “cintillo rojo” o “azul”…

Durante los últimos meses del gobierno de don Rosendo Fraga se acentuaron las luchas por el poder entre los federalistas que ostentaban su cintillo punzó y se reunían en el Club del Pueblo liderados por el ex gobernador Dr. Simón de Yriondo y los integrantes del Partido Liberal que usaban el cintillo azul y proclamaban como candidato a don Ignacio Crespo.

Intento de asesinato y conspiración en 1877…

Producido en noviembre de 1876 el último avance de Ricardo López Jordán sobre la provincia de Entre Ríos, enseguida lo apoyaron sus aliados santafesinos, entre ellos Camilo Aldao y los diarios rosarinos El Comercio y La Capital.  En consecuencia, Aldao y quienes lo apoyaron fueron obligados a trasladarse a otro territorio. Vencido luego López Jordán, en enero de 1877 quedó detenido en Rosario.

Esos hechos determinaron que el presidente Avellaneda y Simón de Iriondo -su ministro del Interior-, decidieran establecer el estado de sitio en ambas provincias y en Córdoba.  Prácticamente ya estaban elaborando las listas de candidatos para las próximas elecciones. Iriondo proponía su reelección y seguía con el apoyo del Club del Pueblo y también del PAN, el partido autonomista nacional que estaba en crisis.  El candidato opositor era Ignacio Crespo -del Partido Constitucional, mitrista y apoyado por el entonces senador Nicasio Oroño, quien había logrado la adhesión de Adolfo Alsina, también integrante del gabinete nacional, titular del ministerio de Guerra.)

Como suele suceder, los grupos opositores se organizaron para destituir a Servando Bayo y asumir el poder antes de que se realizaran las elecciones.  Trascendió que podían atacar desde el sur y el gobernador envió tropas al Arroyo del Medio.

Expresa el historiador José María Rosa que “una junta revolucionaria presidida por el ex gobernador Patricio Cullen y cuyo hombre de acción es Francisco Iturraspe (Alias Insúa), contrata rifleros suizos de las colonias Helvecia y Esperanza, excelentes tiradores.  Se descubre un complot en Rosario para matar al gobernador, y poco después -17 de marzo- los revolucionarios atacan a la casa de gobierno de Santa Fe, siendo rechazados.”  [29]

Avance desde el norte…

El grupo del norte respondía a las órdenes de Patricio Cullen, cuñado de Oroño porque el corondino estaba casado con Joaquina Cullen y Rodríguez del Fresno.

(Además, hay que tener en cuenta que Patricio fue gobernador de Santa Fe en el período 1862-1865; Oroño en el trienio 1865-1868 y que ambos habían establecido vínculos con grupos de inmigrantes que los apoyaban en sus proyectos políticos.)

Cullen y Luciano Leiva, acompañados por  el norteamericano Guillermo Moore y Gaspar Kaufmann y más hombres dispuestos a luchar, pasaron  el 18 de marzo por San Javier y allí detuvieron al juez de paz, se apoderaron de las armas y acamparon en esa zona con el propósito de incorporar más combatientes: en tales circunstancias eran bienvenidos los indígenas y los gauchos, enhorabuena si se integraban los extranjeros…

En ese campamento decidieron que Patricio Cullen seguiría con parte de la tropa mientras Leiva e Iturraspe apoyados por los caciques Caraponcho y Bailón levantarían más gente en el camino de la costa y de paso entrarían en las estancias, como sucedió en la de Juan Manuel Zavalla, donde mataron a tres peones.  [30]

Todas las tropas que conspiraban se unieron cerca del Paso de los Cachos donde estaba la estancia de López, mientras las fuerzas defensoras del gobierno llegaban desde el sur al mando del Comandante Romero -alias Manzanares-, acompañado por el leal coronel Raimundo Oroño y cruzaron el arroyo Leyes.

Al encontrarse frente a frente, comenzó el combate. Muertos, heridos y al caer Francisco Iturraspe fue detenido.  Patricio Cullen, mal montado recibió la orden de entregarse pero como estaba acostumbrado a usar las armas, prefirió responder con un disparo de escopeta.  Inmediatamente le contestaron con otro tiro y aún derribado volver a usar su arma pero se adelantó un soldado atacándolo con la lanza. Patricio Cullen murió enseguida y más soldados adversarios se acercaron, lo degollaron y mutilaron su cuerpo.

(Se ha reiterado que Avellaneda felicitó al gobernador por ese triunfo y que Alsina negó haber apoyado a los rebeldes.

El 25 de diciembre de 1877, mientras estaba en la línea de la frontera, Adolfo Alsina empezó a sentir agudos dolores intestinales e inmediatamente fue trasladado a su hogar en Buenos Aires, pero a pesar de los intensos cuidados falleció el 29 de diciembre: “Un pueblo entero, consternado y dolorido acompañó a pie en medio de la lluvia torrencial hasta la Recoleta, el cadáver del que fue abnegado patriota, fogoso tribuno, gran corazón” -reitera el historiador Rosa-, siguiendo la nota publicada al día siguiente, en Tribuna de Buenos Aires.)

Después de tantos movimientos y de tantas víctimas, tras una declaración denunciando que no había garantías electorales, el Partido Constitucional optó por la abstención.

Casi, misión cumplida…

Terminado el período del gobernador Servando Bayo, fue reelecto para esas funciones el Dr. Simón de Iriondo y a pesar de sus intentos de conciliación integrando el gabinete con representantes de distintos grupos, la semana siguiente a la asunción del cargo tuvo que soportar una sublevación en la ciudad de Santa Fe.

Las crónicas acusaron a Mariano Cabal, José María Cullen y Nicasio Oroño como responsables de esa situación que culminó con crímenes y robos en varias viviendas y en algunas estancias.

Una vez más se comentó que el grupo subversivo había sido apoyado desde Buenos Aires.

                                                         Todo es historia de la Historia

 

Síntesis: Nidia Orbea Álvarez de Fontanini

[1] Gori, Gastón. La Forestal. La tragedia del quebracho colorado. Santa Fe, Litar S.A., 1983, p. 26-27.

[1] Busaniche, José Carmelo. Hombre y hechos de Santa Fe. Santa Fe, Colmegna, 1946, p. 163-165. En el segundo párrafo de esa nota firmada también por el ministro Emiliano García, el gobernador Oroño expresaba: “Sellada por la Constitución de Mayo la historia sangrienta de nuestro pasado, el presente que envío a V.E. sólo pudiera conservarse en esta Provincia como una protesta de los sentimientos de unión y fraternidad que la ligan a la del Entre Ríos como a los demás de la República.  / “La lanza que el General Ramírez perdiera en las lomas de Coronda pertenece hoy exclusivamente a la Provincia de su nacimiento, ya que por aquel afamado guerrero no hubiera sido legada a su familia- / “En tal concepto y para que en la Provincia de Santa Fe no exista símbolo alguno de los recuerdos que en otro tiempo lo alejaron del Entre Ríos, he creído de mi deber remitirla a V. E., como hago por la presente y por el intermedio del expresado doctor Moreno.”  El 17 de octubre de 1886, el gobernador José Domínguez y sus ministros Nicanor Molinas y José J. Sagastume, agradeció el envío de ese “valioso recuerdo que debe ser conservado en Entre Ríos, por haber pertenecido a uno de sus más ilustres guerreros”.

[2] Santa Fe. Historia de las Instituciones de la Provincia de Santa Fe. Tomo IV; p. 370-371.

[3] ibídem, p. 332-333.

[4] Rosa, José María. Historia Argentina. Tomo 7. Buenos Aires, Editorial Oriente, 1992, p. 322.

[5] Santa Fe. Historia de las Instituciones. Ob. cit., p. 329-353.

[6] Buenos Aires. Diario Clarín. Año LII, Nº 18.403. Domingo 27 de abril de 1997, p. 1 a 3.

[7] Santa Fe. Historia de las Instituciones. Ob. cit., p. 325-326.

[8] Ídem, p. 330-331.

[9] Abad de Santillán, Diego. Historia Argentina. Tomo 3. Buenos Aires, Tipográfica Editora Argentina, 1965, p. 221.

[10] Rosa, José María. Ob. cit. p. 331-332.

[11] Actualmente hay sólo dos localidades con denominación semejante, en el departamento Las Colonias: Santa María Centro y Santa María Norte, fundadas en 1869 por Santiago Denner.  Pilar también pertenece a ese departamento. #  Santa Teresa (Dto. Constitución). # Teodelina (Dto. General López). Iriondo (actualmente es la localidad del Departamento La Capital, poblada a partir de 1889 cuando se inauguró la estación ferroviaria.

[12] Tur, Carlos A. y otros. Hombres y momentos de la Argentina, p. 15.

[13] Carlos Casado de Alisal era amigo del poderoso José Chavarri que vivía en Rosario y estaba directamente vinculado con importantes empresas de Buenos Aires y Montevideo. Se incorporó como dependiente de Martín Echevarría y  fue amigo del vicecónsul español, el empresario Joaquín Fillol también con notable influencia en el poder político provincial.  Este activo vasco, junto a Rusiñol habían organizado el servicio de Mensajerías que de posta en posta llegaba a diversas localidades del litoral.   En ese tiempo, Carlos Casado incrementó la venta de mercaderías al contado -las menos- y la mayoría a plazos con pagos en cuotas o con documentos que le aseguraban excelentes beneficios.  Entre 1865-1866, aumentaron sus ganancias porque debido a la guerra contra el Paraguay aumentaron las necesidades de créditos en algunas familias de combatientes y como suele suceder, el ser abastecer del ejército facilitaba el crecimiento de su patrimonio. Aprovechó esas circunstancias y creó el Banco Casado que funcionó durante breve tiempo.  En 1863 mediante una operación financiera con el Banco de Londres adquirió un campo que era propiedad de Mariano Grandoli y que estaba arrendado a Víctor Mirando.  Dos años después, puso en marcha la empresa denominada Colonización Agrícola y Urbanización, con el propósito de poblar aquel campo y además, adquirió 10.000 hectáreas en la región de Los Desmochados que tenían una situación estratégica porque era el camino de las postas: Posta de Candelaria era el lugar donde descansaban y cambiaban las cabalgaduras quienes avanzaban hacia Mendoza y el sur), también estaban en esa zona Guardia de la Esquina y Melincué.  En 1870 -año del asesinato del general Urquiza-, Casado de Alisal empezó su imaginado proceso de colonización con venta de parcelas al contado o a plazos, la mayoría en arrendamientos.  Un año después, la epidemia de fiebre amarilla también afectó sus intereses económicos pero como él seguía vinculado a la tradicional burguesía terrateniente, pudo seguir con tales empresas y acercarse más a quienes estaban impulsando la puesta en marcha del Banco Provincial. Sabido es que hasta 1862 en la provincia  de Santa Fe se sucedieron los gobiernos de familias que respondían a grupos políticos integrados prácticamente por estancieros -que vivían en las ciudades- mientras los encargados y peones se ocupaban de los trabajos rurales hasta que el patrón llegaba para controlar el resultado de las cosechas.   En el decenio 1862 y 1871 se impuso la necesidad de incrementar las exportaciones con productos primarios o elaborados; en 1872 se sancionó la ley autorizando el empréstito para crear el Banco Provincial; dos años después se conocieron las bases para la integración del capital y fue entonces cuando Carlos Casado de Alisal logró invertir parte de su capital. Siguió con su expansión en comunicaciones, estableció empresas en los puertos del noreste argentino, incluso en Paraguay.    

[14] En el siglo siguiente, descendientes de esa familia Grognet seguían participando en la política nacional y durante el debate del proyecto de reforma a la ley de municipalidades, en 1914 “el diputado Ángel Ortiz Grognet -departamento San Martín-, propuso que teniendo en cuenta ‘las legítimas aspiraciones de la masa popular’, los intendentes sean ‘llevados también por el sufragio popular’, que implícitamente incluiría a las mujeres. “

(En libro inédito: Orbea de Fontanini, Nidia A. G. El Tiempo de Perón (1946-.1952)).

[15] Rosa, José María. Ob. cit., p. 346. Aclara el autor que ese párrafo corresponde a una carta de Mendeville a Juan Bautista Alberdi, citada por A. Mayer en sus libro Alberdi y su tiempo.

[16] Ibidem, p. 348-350.

[17] Ídem, p. 340.

[18] Íd. p. 352.  La cita corresponde a H. S. Ferns. Gran Bretaña y Argentina en el siglo XIX  (trad.)

[19] Ese texto reiterado por J. M. Rosa en la página 352, pertenece a J. Velar Irigoyen Bernardo de Irigoyen.  Algo en torno a una vida argentina.

[20] Tur, Carlos A. y otros. Hombres y momentos de la Argentina, p. 381-402

[21] Gori, Gastón. La Forestal. La tragedia del quebracho colorado. Santa Fe, Litar S.A., 1983, p. 22-23.

[22] Dorfman, Adolfo. Historia de la industria argentina, p. 156-161.

[23] Santa Fe. Historia de las Instituciones de la Provincia de Santa Fe. Tomo IV; p. 345-346.

[24] Orbea de Fontanini, Nidia A. G. Maradona… personalidades ejemplares. (inédito) Incluye referencias biográficas y obras de Waldino Baldomero Maradona, sus hijos Dr. Esteban Laureano –el Doctor Dios, quien convivió con aborígenes hasta ser octogenario, Waldino Buenaventura Maradona, primer diputado socialista en la legislatura de la Provincia de Santa Fe (1932).

[25] Santa Fe. Historia de las Instituciones de la Provincia de Santa Fe. Tomo IV; p. 405-428.

[26] Así está escrito en:  Sáenz Quesada, María. Mujeres de Rosas. Buenos Aires, Planeta, 1991.

[27] El doctor Carlos Saúl Menem, es un destacado riojano, líder del partido justicialista ya a principios de la década del ’70 a pesar de la proscripción vigente desde 1955. En 1973 fue gobernador electo y asumió el 25 de mayo de ese año, siendo presidente de la Nación el Dr. Héctor José Cámpora, que renunció a los fines de un nuevo llamado a votación siendo candidato a la presidencia Perón que ya había retornado al país. #  Tras el fallecimiento del Teniente General Juan Domingo Perón -1º de julio de 1974-, el doctor Menem fue designado para hablar en nombre de los gobernadores en el acto del sepelio, realizado el día 4 en el cementerio de la Chacarita. # El doctor Menem fue presidente de la Nación electo por amplia mayoría y ejerció esas funciones durante dos períodos consecutivos (1989-1995 y 1995-1999), tras la reforma de la constitución Nacional de 1853 realizada con debates de comisiones en las ciudades de Paraná y Santa Fe, presididas las sesiones plenarias por el Dr. Eduardo Menem -convencional por La Rioja y en ese tiempo presidente del Senado de la Nación- porque había renunciado el vicepresidente Dr. Eduardo Duhalde a los fines de ser gobernador de la provincia de Buenos Aires.

[28] En otro helicóptero viajaron desde Buenos Aires el presidente Carlos Menem y su esposa Zulema Yoma, el gobernador Dr. Víctor Reviglio y el vicegobernador Antonio Andrés Vanrell, con sus respectivas esposas.  También participaron del acto el gobernador de Buenos Aires Dr. Antonio Cafiero y el secretario general de la CGT Saúl Ubaldini, entre otras autoridades nacionales, provinciales, militares y eclesiásticas.  El homenaje se desarrolló en el Parque Nacional de la Bandera, al pie del monumento a nuestra enseña nacional.  Se entonó el Himno Nacional Argentino y luego el Obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Rosario Monseñor Dr. Mario Luis Maulñion celebró una misa de campaña.

[29] Rosa, José María. Historia Argentina. Tomo 7. Buenos Aires, Editorial Oriente, 1992, p. 367.

[30] López Rosas, José Rafael. De la discordia y la melancolía. Santa Fe, Fondo Editorial de la Provincia de Santa Fe, edición 1986, p. 215-218.

Top