Sinopsis: aproximación biográfica. Títulos de algunas publicaciones. Poema: “Corrido del Negro Lorenzo”.
El 23 de octubre de 1908, En Barcelona (Estado Anzoátegui), nació Miguel Otero Silva. Escritor, humorista, periodista, político. Bachiller (1924). Estudió Ingeniería en la Universidad Central de Venezuela y abandonó. Comenzó a publicar sobre humorismo con el seudónimo “Miotsi”. En febrero de 1928 lo vincularon con la conspiración del 7 de abril de ese año, acosado por las persecuciones huyó; también lo relacionaron con quienes invadieron en junio de 1929. En ese tiempo se dedicaba a escribir y en 1930 publicó el primer libro: Fiebre. Luego viajó a Estados Unidos, Cuba y Colombia; editó el poemario Agua y cauce. En 1949 recibió el título de “Periodista” graduado en la Universidad Central de Venezuela; fue presidente de la Asociación Venezolana de Prensa en 1951, decidió dedicarse a escribir y recibió el Premio Nacional de Literatura 1955-1956.
En 1963, en su libro La muerte de Honorio, refleja la lucha contra Marcos Ruiz y es una denuncia sobre torturados y presos. En 1980 le otorgaron el Premio “Lenín” de Literatura. Se ha reiterado que en los últimos meses de vida, habló de su propósito de escribir sobre el espíritu aborigen de América.
Falleció en Caracas, el 28 de agosto de 1985.
Corrido del Negro Lorenzo
¡Yo soy el Negro Lorenzo!
Negro del Tuy, negro, negro.
Noche con alma. Tambor
dormido bajo mi pecho.
Dormido bajo mi pecho
tengo un dolor de candelas,
corazón rojo por dentro,
corazón negro por fuera.
Corazón negro por fuera,
corazón sombra de blanco,
si tengo rebelde el pelo
tengo rebeldes las manos.
Tengo rebeldes las manos,
manos trenzadas al viento
mientras lanzo al viento el grito.
¡Yo soy el Negro Lorenzo!
Yo soy el Negro Lorenzo,
nieto y bisnieto de esclavos,
cruzado de cicatrices
como negro tronco de árbol.
Como negro tronco de árbol
de pie atisbo la sabana
que invita a correr por ella
con banderas desplegadas.
Con banderas desplegadas
y palpitar de tambor
al frente de gritos negros
fundidos en una voz.
Fundidos en una voz
oigo los lamentos negros
de las negras cicatrices.
¡Yo soy el Negro Lorenzo!
¡Yo soy el Negro Lorenzo!
Negra noche, negra el alma,
negro de pecho desnudo,
negro cortador de caña.
Negro cortador de caña
como mi abuelo y mi padre,
esclavo negro de todos,
esclavo no soy de nadie.
Esclavo no soy de nadie
porque soy lo que no soy,
tengo un dolor de candelas
y un palpitar de tambor.
Y un palpitar de tambor
bajará por los barrancos
como la voz de los muertos
los negros muertos esclavos.
Los negros muertos esclavos,
mi abuelo y mi bisabuelo.
Negra y rebelde es mi mano,
¡yo soy el Negro Lorenzo!
Lecturas y síntesis: Nidia Orbea de Fontanini.